(Outfit de Emma en multimedia)
EMMAMe miro en el gran espejo que está frente a mi cama. Sentada en forma de indio sobre esta, toco mi cuerpo, mi cara y mi pelo, buscando algo, algo con lo que pueda verme enferma, que diga que las sospechas no son ciertas, que confirme que mi padre no me miente todos los días.
Cansada de buscar siempre lo mismo, me levanto de la cama, me pongo mis pantuflas y me encierro en el baño.
-No hay necesidad de que me mienta, verdad?
Suelto un suspiro y lavo mi cara seguido de mis dientes.
-Emma -la voz de mi padre me hace salir del baño, cuando me ve se le iluminan los ojos y se acerca a mí- buenos días preciosa -le sonrío.
-Buenos días papá -beso su mejilla- necesitabas algo? -pregunto al ver que se mantiene callado.
-Si -sacude levemente su cabeza- necesito que bajes a desayunar, tengo que darte una noticia que seguramente te agrade -me sonríe feliz.
-Se acabaron las pruebas? Estoy libre del cáncer? -le pregunto entusiasmada y con una sonrisa, pero todo eso se va cuando su cara se transforma en una de tristeza -oh, no es eso, ok, puedes irte, yo bajo enseguida -desvío mi mirada.
Me doy la vuelta entrando nuevamente al baño con la mirada triste, echo el pestillo y me siento en el váter, apoyo los codos en mis rodillas y escondo mi cara entre mis manos. Cuando escucho la puerta de mi habitación cerrarse lloro, lloro como antes hacía, pidiendo la ayuda de mi madre en murmullos.
Luego de unos minutos me levanto y lavo mi cara otra vez, pongo un poco de corrector en mis ojeras e intento que el nudo en mi garganta se vaya respirando profundo un par de veces.
Salgo del baño y me visto con una remera blanca con mangas pero que deja libre mis hombros y con un pantalón algo suelto de color nude con un lazo en la parte de la cintura. Cepillo mi cabello lacio y lo dejo suelto.
Me miro por última vez al espejo y abro la puerta de mi habitación. Bajo las escaleras y voy hacia el comedor, me sorprendo al ver a mi padre sentado en la mesa charlando con la ama de llaves, Lucy, él nunca está aquí, siempre desayuna, almuerza, merienda y en ocasiones cena en su oficina.
Ignoro eso y me siento frente a mi padre empezando a desayunar y espero a que él hable.
-Bien Emma, como te he dicho, quería comentarte una noticia -asiento- mañana vendrá un viejo amigo junto a su familia desde Londres y se quedarán aquí. Ellos traerán sus equipos y nos ayudarán en la investigación y a encontrar la cura.
-Oh, eso suena bien, aumenta las posibilidades de encontrarla, pero yo tengo que ver en la parte de... -insinúo a que continúe.
-Tu tienes que ver en la parte en la que te digo que la familia de ellos se conforma por él, su esposa y sus dos hijos -asiento de vuelta- ellos son unos meses más grande que tú y son gemelos, quiero que crees una amistad con ellos, su padre, Lucas, me dijo que no son muy sociables y no tienen muchos amigos, se llaman Jesús y Daniel -algo se revolvió dentro de mi. Voy a tener que vivir con dos chicos desconocidos en mi casa.
-Por cuánto tiempo se quedarán? -pregunto dejando mi desayuno y mirándolo a él.
-No lo sabemos, quizás por unos 4 o 5 meses aquí, pero luego se irán a una casa no muy lejos. -Yo asiento- sé que va a ser un poco incómodo que vengan dos chicos a casa ya que tu no socializas mucho con ellos, pero son amables, no harán nada para incomodarte, ellos no son de hablar mucho ni de estar con chicas.
Lo último me sorprendió pero no dije nada al respecto, simplemente asentí y mi padre dio la vuelta a la gran mesa para darme un abrazo y un beso en la cabeza a modo de despedida. Eso significa que no lo veré en lo que queda del día.
...
Ya son las 8 de la noche, estuve la mitad del día paseando por un parque y la otra mitad en mi cuarto leyendo hasta este momento.
Me siento en el borde de la cama y desato un moño despeinado que había hecho mi pelo, me saco los lentes y los apoyo en mi escritorio.
Cierro el libro que acabo de terminar de leer, "Peter Pan", lo he leído miles de veces y nunca me canso de él, tengo aproximadamente 5 libros de distintas editoriales y ya me los sé de memoria todos.
Dejo mi libro en una gran librería donde tengo como mínimo 40 libros, los cuales ya me los he leído todos, escucho dos golpes en mi puerta abierta y al voltear veo a mi padre. Él me sonríe y yo le devuelvo la sonrisa, pasa y mira mis libros.
-Te los has leído todos? -pregunta asombrado tocandolos con uno de sus dedos.
-Si, más de uno lo repetí 4 o quizás 5 veces -río nerviosa.
El me mira y veo un brillo en sus ojos, coloca nuevamente uno de los libros que él sacó de allí y me abraza, yo asombrada se lo devuelvo, no me lo esperaba, hace muchísimo tiempo mi padre no me abrazaba así y esto es algo "nuevo".
Cuando se separa de mí toma mis manos y me mira a los ojos.
-Estoy muy orgulloso de ti, cariño -En mi cara se dibuja una gran sonrisa y mis ojos se cristalizan.
-Gracias papá -lo abrazo otra vez y él acaricia mi pelo hasta que su teléfono suena y se separa, observa su teléfono y me mira a mi- tranquilo, ve a atender.
Él me sonríe y yo suspiro cuando se va de mi habitación, aunque estoy acostumbrada, siempre está hablando por teléfono o está con alguien en una reunión.
Voy al baño, me pongo el pijama, lavo mis dientes y me acuesto mirando el techo, cuando era bebé mi madre y mi padre pegaron unas estrellas que brillan en la oscuridad en él, imagino ese momento hasta que consigo caer en un profundo sueño mientras pienso en lo que va a pasar mañana, será un día largo y extraño, me tendré que levantar temprano a recibir a las nuevas personas que se quedarán en mi casa, sólo espero que ellos sean buenos y caerles bien. Por favor que no sean como los chicos de mi Instituto.
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Este es el fin..
Del capítulo (jajajaja que graciosa que soy), bueno nada, como ya dije, si os gustó el capítulo darle a la ⭐estrella⭐ que se encuentra abajo a la izquierda para saber que os va gustando la historia y agregarla a vuestra biblioteca así os avisa cuando subo un nuevo capítulo❤
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Without Lies - [ Jesús Oviedo ]
Werewolf-...No puedo prometerte algo como la luna, ni enseñarte hasta la última estrella del universo, supongo que eso no está a mi alcance -sonríe un poco mientras toma mis manos y clava su vista en mis ojos- Pero lo que si puedo prometerte, es amarte toda...