C.38: "Puedo ser lo que tú quieras"

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JESÚS
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Con Emma, hemos decidido salir al patio que tiene el hotel en la parte trasera, ella viene detrás de mí con dos tazas de café y una bolsa de galletas y yo llevo a Mili en brazos y una manta.

Suerte que el pequeño patio está rodeado por un muro lo suficientemente alto como para que Mili no se escape.

Llegamos hasta un árbol, donde da la sombra y yo bajo a Mili, quien se acuesta sobre el césped y rápidamente se duerme.

Estiro la manta y Emma se sienta en forma de indio en una esquina, dejando las galletas y ambos cafés con cuidado de que no se caigan sobre la manta.

Yo me siento a su lado y siento como los minutos pasan super rápido mientras disfruto de sus carcajadas cuando me tira una galleta para que yo pueda cogerla con la boca.

Si tuviera un deseo, desearía que esto no acabe nunca.

Pero no lo tengo, así que prometo que haré todo lo que esté a mi alcance por que nada de esto acabe, creo que vivir sin Emma en mi vida... No sería vivir.

Sin ella, me sentiría perdido en medio del océano Atlántico sobre una balsa de madera rodeada de cinco tiburones deseando comerme.

Por eso creo que comprar este departamento es asegurar nuestra relación, que por ahora no tiene etiqueta, este departamento es otro lazo que nos une y Mili también.

En conclusión, este departamento fue lo mejor que pude hacer en mi vida, osea, no puedo evitar imaginarme vivir aquí junto a ella, despertar todos los días a su lado y desayunar, almorzar, merendar y cenar con ella, disfrutar del sonido de su risa a todas horas...

Suena magnífico.

Muerdo mi labio para evitar que una sonrisa se me escape por los labios y, luego de tomar los cafés, nos acostamos sobre la manta y observamos el cielo, nuestros hombros se rozan y nuestras cabezas están pegadas, nuestras manos se acarician por encima de nosotros y, cada vez que giramos la cabeza, nuestras narices nos hacen cosquillas.

Dibujamos las figuras que tienen las nubes en el aire con nuestras manos agarradas y Emma se emociona cuando reconoce alguna figura.

Luego, ella se pone de costado y con la punta de su nariz traza mi mandíbula de arriba a abajo, la parte de arriba de su nariz se amolda perfectamente en mi mandíbula, también pone su pierna derecha sobre mi cintura y yo pongo uno de mis brazos debajo de su cabeza como si fuera una almohada y la otra la pongo sobre su pierna, escribo palabras con la yema de mis dedos sobre ella y Emma las adivina.

Pienso en qué más escribir, le he escrito "Sorpresa", "Emma", "Estrella", "Nubes", "Felicidad", "Sonríe" y "Ornitorrinco", no pregunten por qué la última, sólo importa que las adivinó todas.

Muerdo el interior de mi mejilla al tener una idea y lamo mis labios.

Suspiro y con mis dedos, muy lentamente, deseando que la adivine, trazo sobre su piel cinco letras, dos palabras.

"TE AMO"

Emma hace un sonido pensativo y noto como sonríe sobre mi cuello.

—No lo sé -ríe.

—Oh vamos, es fácil -sonrío yo también.

—Ay! -sonríe más- No lo sé -se levanta y me mira dulce y yo niego.

—No te lo diré -río.

—Oh vamos! -pasa su brazo por mi cuello y me acerca a ella- Jesús! -yo hago fuerza con los brazos y la subo encima de mí- Dímelo -se tumba encima y me mira a centímetros de distancia.

Without Lies - [ Jesús Oviedo ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora