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Los jóvenes estaban en el restaurante del hotel, todo lo que pidieran en el lugar estaría pagando por la empresa, eso hacían en todos los viajes.

Támara comía admirando el lugar, era muy elegante y distinguido.

- Oye Támara, tengo una duda -Decía Colbyn bebiendo un sorbo de su vaso de refresco.

- Dime.

- ¿Por que estabas de malhumor antes del viaje? -Preguntó el jóven muy interesado.

- Emm.. -Támara dudo en hablar.- Cosas de mujeres. -Mintió.

- Oh, si son cosas de mujeres mejor no meto mis narices en eso -Respondió Colbyn riendo un poco.

La jóven fingió reír por un momento, para después hacer hacia el frente su plato de comida, aún no terminaba de comer. Sin embargo, estaba claro que no comería más.

- Me he llenado. -Aviso la rubia.

- Igual yo, ¿Vamos a dormir de una vez? -Preguntaba Colbyn poniéndose de pie.

Ya era hora de ir a dormir un poco, todo el día había estado un poco agitador por tanta horas de estar sentados en el avión, a pesar de las horas que ya habían pasado los jóvenes seguían intumidos.

- Sí, tengo mucho sueño y me siento un poco agotada -Contesto Támara imitando la acción de el jóven.

- Vayamos a dormir. -Dijo el jóven de ojos marrones para esperar a que Támara tomará la delantera en el camino.

No tenían que pagar nada por el momento en el lugar, estos emprendieron camino hacia el pequeño ascensor del edificio y entraron a este, en unos cuantos minutos ya estaban en su respectivo piso, se dirigieron a su habitación y entraron a ella sin pensarlo mucho.

Támara entro al baño con su pijama en mano, había pensado en todo. La pijama que había llevado a Washington no era la que usaba usualmente, está vez era su pijama más tapada, no tenía en cuenta que compartiría habitación con Colbyn, pero era bueno saber que su pijama estaba junto a ella es esa situación.

Colbyn aprovechó que Támara estaba en el baño para quitarse la ropa y ponerse su pijama, aunque en realidad su pijama sólo era una short cómodo.

La jóven salió del baño con su pijama puesto, al cerrar la puerta de este se dio la media vuelta para recostarse en la cama, sin embargo no contaba con encontrarse con un Colbyn sin camisa, estaba frente a ella sin camiseta, su abdomen bien remarcado se veía muy bien, pero aún así penso en que no estaba bien.

- Ahorita mismo te pones una camisa -Ordeno Támara tapándose los ojos.- No pienso dormir así.

- ¿Qué? -Respondía Colbyn parándose de la cama, este caminaba cerca de la jóven queriendo quitar sus manos de su rostro.- ¿Que hay de malo que duerma sin camisa? Así duermo siempre.

- Si, pero recuerda que yo no soy Zahara como para que duermas así, entiende. -Contesto Támara quitando sus manos de su cara.

- Ya lo sé, pero que duerma sin camisa no es como si fuéramos a hacer... algo más, ¿O si? -Sacaba sus conclusiones Colbyn.

- ¡Claro que no! -Gritó Támara.- Ya acuéstate y duérmete.

- Ya voy, ya voy. -Repitió el jóven alejándose de la chica.

Este rodeo la cama y se recostó en su lugar, le dio la espalda a Támara y guardo silencio aunque estuviera despierto.

Támara hizo lo mismo, apago la luz y se tapó, se acomodo bien en su lugar dándole la espalda al jóven, mañana sería un día muy agitado para los dos.

Por Una Mujer ✔️ [#1 Trilogía: The Shield]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora