LUCIANO:
No podía creer lo que estaba a punto de hacer.
Hace años que no jugaba fútbol, juraba que estaba oxidado. ¿Cómo chucha se le ocurre al Max culiao decir que me había unido a los Cóndores?
¡En la weá que me había metido! ¡El culiao sabía perfectamente que no jugaba a la pelota!
¡Este conchesumare!
Vi al Tebo salir del colegio. Me acerqué a él, caminando piola, con care' serio. Tampoco quería que creyera que estaba desesperado
Él me miró con una ceja alzada
— ¿Vení a inculparme de alguna weá? — preguntó medio resentido
Negué con la cabeza. Me caía tan mal ese culiao, no lograba entender porque chucha estaba hablando con él
— Vengo a pedirte un favor. —puse care' pena pa' que me creyera.
— ¿El pololo del Sepúlveda pidiéndome favores a mi? ¡Ja! —se burló con un ademán arrogante. Comenzó a caminar, ignorándome
— ¡Me peleé con el Max!
El Tebo se dio vuelta altoque. De pronto, le había interesado el favor que le iba a pedir
— ¿Cómo se que no me estai webeando? —se cruzó de brazos.
— ¿Nos viste juntos hoy? —pregunté, él negó. Había funcionado quedarse en la sala todo el día. — ¿Me viste irme con él ahora? —volvió a negar.
— ¿Por qué se pelearon? —mostró un poco más de interés
¿Por qué nos habíamos peleado? ¡Tenía que inventar una wea creible!
— Le dije que... —tragué saliva antes de decirlo. — Le dije que le daba color a su equipo culiao de las Panteras, que eran más malos que la mierda. Terminamos discutiendo, le dije que estaba seguro de que los cóndores le ganarían, y le ardió el hoyo
— Obvio que se iba a enojar, la verdad duele. —respondió arrogante. — Bueno, te creo. ¿Qué favor querí?
— Quiero unirme a tu equipo.
Él me miró con el hocico abierto un rato.
— Los cóndores no metemos weones así nomás, además estamos a días del partido decisivo...
— ¿Te das cuenta de que si me tienen a mi, a las panteras le afectará? Era el mejor amigo del capitán, va a ser un factor sorpresa que los dejará weones, Tebo. —traté de venderle la pomá
Él se quedó pensándola un rato. No entendía que tanto pensaba, era como si alexis sanchez quisiera ser del renca juniors.
— Hoy hay entrenamiento a las seis y media. —sonó como si accedió a mi propuesta. — Vas a tener que entrenar mucho, no quiero a ningún weon malo el día del partido. Me voy a conseguir una polera y un short de los cóndores con mi papá.
¿Luciano Rossi un Cóndor? Definitivamente sí.
//
— ¿Era verdad no juegas hace años? — preguntó un weon, incrédulo, al terminar el entrenamiento. — No estas oxidado, ¿Por qué dijiste eso?
— Sí, hace años que no juego, me gusta mas andar en bici. —me encogí de hombros.
Comenzaba a molestarme estar sudado. Pero, la sensación de jugar a la pelota era casi algo nuevo pa' mi, la presión del capitán y entrenador sobre nosotros me generaba adrenalina
Estaba creyendo el cuento de ser un cóndor.
Me senté en una banca a tomar una botella de agua. Me sentí todo un deportista. No le hallaba mucha entretención al fútbol, sin embargo, no podía negar que la pasé bacán entrenando.
— ¡Rossi! —me gritó el Tebo, entrando corriendo, venía desde el estacionamiento.
Caminé piola hacia donde estaba. Él sacó de una bolsa unas cosas y me las entregó
— Short, una polera y las medias de los cóndores. —explicó mientras yo examinaba la ropa. — Lo saqué de la bodega hoy. Mandaré a estamparle tu apellido a las poleras mañana, estarán listas el mismo día del partido.
Agradecí, estrechamos las manos, luego él miró a sus espaldas. Pude divisar a la Bianca apoyada en un auto. El Tebo se despidió rápido y partió pa' allá
Pasé a las duchas, cuando estaba limpiecito, me subí a mi bici y emprendí camino pa' la casa del Max.
Mi amigo me esperaba afuera de ésta. Estaba medio cagao de frío revisando el celular
— ¿Y? ¿Cómo te fue?
— Ya me pasaron hasta el uniforme. —le conté, riéndome un poco.
Él me siguió la risa.
— ¿Vas a jugar el sábado? —alzó una ceja, frotándose las manos
— Sí, ya mandó a ponerle mi apellido a la camiseta y todo el cuento.
El Max comenzó a reirse a carcajadas
— Es muy imbecil el Tebo. —dijo, al terminad de reir. — Vas a hacerlo perder el partido y él no ha caído en cuenta
Fruncí el ceño. Traté de terminar de entender lo que estaba diciendo. ¿Iba a sabotear el partido?
— ¿En qué momento quedamos en que haríamos perder a los cóndores? —lo interrogué, pensativo.
— ¿Y qué quieres hacer? ¿Ayudarlos a ganar? —se echó a reír otra vez. — Ni cagando, si hoy es la primera vez que juegas fútbol en tres años.
¿Acaso estaba retándome? Yo sabía perfectamente de lo que era capaz. Si yo quisiera, le volaría la raja en el partido
— ¿En serio crees que no soy capaz de ganarte una cagá de partido? —alcé una ceja, desafiante.
— Luciano, se realista.—respondió con obviedad— ¡Hagamos una apuesta po!
— ¿Qué apostamos?
— Si las panteras ganan el partido, tú vas a ir directo a decirle a la Gissele lo que sientes por ella. —ofreció
— Si ganan los cóndores, vo' nos vas a contar a mi y a tu hermana quién chucha te pegó y porqué.
Estrechamos las manos pa' cerrar la apuesta.
Esa cagá de partido lo iba a ganar.
![](https://img.wattpad.com/cover/154496691-288-k402515.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Te debo una
Teen Fiction"Gissele, me mandaron a hacer trabajo comunitario en el colegio por tu culpa... Me debes una. "