"Yoonmin 2" Cap 6 Parte I

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-¡Papi! ¡Papi! ¡Levántate!- pedía mi hijo de ahora 7 años brincando en mi espalda para levantarme.
-Un rato mas- pedí aún con sueño y sin moverme.
-¡No! ¡Es hora de levantarse!- dijo para luego quitar las sábanas.
-Hijo déjame dormir- le pedí mientras buscaba la sábana con la mano.
-¡Tienes que trabajar Papi!- dijo mi hijo recordándome lo que no quería saber.
-Tu ganas- dije levantándome un poco perezoso.
-Te ayudaré a levantarte y te llevaré al baño- dijo con una gran sonrisa tomando mi brazo.
-Yo no estoy tan viejo Enano, puedo hacerlo solo- dije sonriendo y el nego.
-Estas viejo Papi, necesitas ayuda- dijo llevándome al baño. Sus palabras me hicieron reír un poco.

Esto solo pasaba los fines de semanas ya que me tocaba trabajar en la tarde, quisiera que pasará más seguido pero los dias de semana salgo muy temprano y no me ve hasta la tarde casi noche, aún sigo trabajando con Namjoon en un estudio, tenemos un estudio nuevo, más grande y mejorado... Y eso significa más trabajo, pero al menos trato de darle a mis bebés (el enano y Jimin) el tiempo que merece.

-¡Papi! ¡Cepillate bien los dientes!- ordeno mi hijo y pude escuchar la risa de Jimin que estaba en la cocina.
-Lo estoy haciendo- dije mostrándole y el nego con su cabeza.
-No Papi ¡así no es!- dijo quitando de mi mano el cepillo, para el hacerlo.
-Es así- dijo cepillando mis dientes.
Al terminar lave mi cara y fuimos a la cocina.
-¡Papá! Ya Papi está listo- hablo mi pequeño a Jimin que se encontraba sentado esperándonos.
-Buenos días, al fin se despierta Señor Min- dijo para levantarse y dejar un pequeño beso en mis labios.
-Nuestro hijo lo hizo- dije mirando al pequeño.
-Bien hecho- sonrió Mi Bebé Min a nuestro pequeño quien sonrio orgulloso.

Desayunamos y comenzamos a recordarle lo que había hecho en la escuela. Mientras se hacía la hora del almuerzo.

-A ver pequeño que es esto- le enceño Mi bebé Min un dibujo de un cuadrado.
-Mmm... Es... Es... Un... Cuadado?- respondió dudoso.
-Muy bien hijo- lo felicité y él sonrió.
Ahora Le mostró un número.
-Es... El Cinco...-me miró y yo negué- ¡está difícil papi!- se quejó.
-Es fácil hijo, solo miralo- le indique y el cruzado de brazos volvió a mirar el número.
-¿El ocho?- dijo y yo asenti, haciendo que el sonriera.
-la ultima- dijo su papá Jimin mostrándole una letra.
-¡Esa es fácil! Es la A de avión- respondió orgulloso.
-¿Como lo supiste?- pregunto papá Jimin fingiendo estar asombrado.
-Es que soy muy inteligente- respondió sonriendo.
-¿si? ¿Muy inteligente?- siguió preguntando.
-¡Si! Como Papi Yoongi- dijo para luego abrazarme.
-¿Como el?- pregunto fingiendo estar asombrado.
-Si, ¿verdad Papi?- dijo esperando mi respuesta.
-Si Hijo, eres inteligente como yo- dije orgulloso y él sonrió.
-¿Y yo que?- dijo haciendose el ofendido con un puchero.
-Papa Jimin también es inteligente, mutísimo ¿verdad Papi?- me preguntó y yo asenti.
-Tienes razón hijo el también es muy inteligente y tierno como tu- respondí dándole una sonrisa.
Jimin se acercó y le dió un beso en la cabeza a nuestro hijo.
-Servire el Almuerzo- dijo levantándose de la mesa.
Ya el almuerzo estaba listo ya que Jimin lo preparo temprano, solo tenia que calentarse.
-¡No te vas a hacer nada hasta que me des mi beso!- exigí y él sonrió.
-No seas celoso- dijo acercándose a mis labios.
-No es justo, el enano tuvo su premio ¿y yo?- dije mirándolo serio.
-Tu no te lo has ganado, no me has dicho nada lindo hoy- respondió dándome la espalda y así caminar hasta la cocina.

Me levanté y lo seguí, estaba buscando los platos en los estantes, me acerque y lo voltee cuidadosamente para que pudiera mirarme.

-¿Que? ¿Vienes a robar el beso que nunca te ganas?- pregunto un poco molesto.
-No, hoy me lo quiero ganar- respondí dándole una sonrisa.
-Te escucho- dijo mirándome interesado.
-Los labios de Mi Bebé Min quiero besar, pero se me ha olvidado hacerlo sonrojar, eres lo más especial que tengo en la vida, Sin ti, no sé qué aria, me volvería loco o hasta me moriría, porque eres mi mundo y la luz de mis días...-sonrei y él sonrió sonrojado- Perdona por no ser tan expresivo todos los dias contigo, pero jamás olvides que Te Amo, a ti y a nuestro pequeño hijo- dije acariciando su mejilla sonrojada.

-Te Amo- dijo mi bebé Min sonriendo timido para luego unir nuestros labios en un tierno beso.
-¡No se besen! ¡Aún sigo chiquito para ver eso!- exclamó nuestro hijo con los ojos tapados con sus manos.

Los dos reimos al escuchar sus palabras.

-Ve con Papi Yoongi a preparar la mesa- le indico su Papá Jimin y el asintió.
-Esta bien papá, lo ayudaré- respondió caminando hacia la mesa.

Al terminar de almorzar me aliste para salir a trabajar...
-¡Papi! ¿Puedo ir contigo? Quiero ver a abuelo Namjoon- pidió haciendo un puchero.
-Hijo Papi Yoongi va a estar ocupado- le dijo Jimin, y el colocó su semblante triste.
-Pero...- lo interrumpi.
-Vamos, ve a cambiarte- dije haciendo que el colocará una gran sonrisa.
-Siiii ¡voy con papi! ¡A ver a abuelo Namjoon!- dijo corriendo a su habitación.
-¿No estarás ocupado?- pregunto el amor de mi vida preocupado.
-Sabes que el Enano ama estar en el estudio y más si está su abuelo Nam... Además nuestro hijo no es un estorbo- respondí haciendo que mi esposo sonriera.
-¿Te Amo sabías?- pregunto sonriendo.
-Si lo se- respondí orgulloso.
-Estas logrando ser el mejor padre para nuestro hijo- dijo para luego unir nuestros labios.
-Tu lo eres más que yo- aclare haciendolo negar.
-¡Papi! Estoy listo- dijo saliendo de su habitación.

El a temprana edad aprendió a vestirse solo, y a decidir que ropa ponerse, sabía elegir bien la ropa, Jimin era el que le daba el visto bueno.

-Estas guapo chiquitín- dijo Jimin haciendo que nuestro hijo sonriera.
-Gracias papá, eso ya lo sabía- respondía caminando hasta tomar mi mano.
-¿Lo has dejado con Jin verdad?- pregunté esperando la respuesta de Jimin, quien solo sonreia.
-Ehh... Si... Es que ha veces me salen trabajos que hacer y lo dejo un rato con Jin- respondió apenado.
-Sabia que eso vendría de Jin, lo que falta que diga que le gusta el rosado y ya no será mi hijo sino el de Jin- dije haciendo que Jimin riera.
-No exageres... Ya es hora de que se vallan, llegarán tarde si siguen aquí- dijo Jimin para después abrazar a nuestro hijo y darme un beso de despedida.
-¡Chao Papá!- se despidió nuestro pequeño mientras subíamos al ascensor.
-¡Los amo!- dijo Jimin cuando el ascensor se cerraba.
-¡y nosotros a ti papá!- dijo antes que cerrara por completo.

!Mentir por amor! 1-2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora