Parte 37:

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Podía sentir como algo chocaba contra mi rostro, una pequeña brisa. Intente abrir mis ojos pero esa brisa hizo que los volviera a cerrar, volví a intentarlo y logre ver una figura frente a mi. A la tercera logre descifrar que era una persona y finalmente todo se volvió más claro. Sus ojos estaban abiertos, fijos en mi y una pequeña sonrisa se podía ver en sus labios. Y entonces descubrí que esa brisa era su respiración.

-¿Como me encontraste?

-Siempre sabre donde encontrarte-Se giro quedando boca arriba, apoyando su cabeza sobre su brazo mirando el techo. Imite su acción y pude notar que nos encontrábamos en una habitación de una arquitectura bastante distinta a todas las que conocía.

-¿Donde estamos?

-Bueno como en todo reino, existe un grupo rebelde que va en contra de todos los ideales de su rey.-Me levante un poco dejando caer mis pies al suelo, sentándome.

-Donde crecí era uno de esos lugares.

-Lo sé, por eso te enviaron allí, nadie pensaría que estarías allí.-De repente todas los recuerdos comenzaron a aparecer en mi mente y entonces recorde todo.

-¡Tenemos...-Solte de repente-tenemos que ir por ellos! No puedo dejar que muera por mi.

-¿De qué hablas?

-Jace, morirá si no voy. Tienes que llevarme a donde los lleva, por favor, Grayson te lo pido.-El no entendía a lo que me refería, pero de la nada soltó una carcajada lo que me dejo confundido.¿Por qué se reía? ¿Acaso se le hacia gracia que Jace muriera? No iba a perder tiempo con el asi que sin más me levante y camine hacia lo que parecía ser una puerta. 

-¿A donde vas?-Pregunto a lo lejos. 

-¿Donde esta Jessica?-Pregunte girándome nuevamente hacia el pero este solo se encogió de hombros. ¿Qué le sucedía? Grayson no era de esa forma, puede que sea un idiota pero no era así.-Tú no eres Grayson.

-Tal vez-Dio unos pasos hacia mi quedando a escasos centímetros de donde yo estaba, de forma inconsciente retrocedí pero la puerta me impidió que pudiera alejarme.-Pero si yo no soy Grayson, tú no eres Ventino.

-¿Qué haces?-Pregunte cuando pude como tomaba mis hombros y se acercaba aún más. Cuando logre reaccionar lo empuje con mis manos y abrí rápidamente la puerta saliendo de la habitación. Comencé a caminar entre el lugar hasta llegar a lo que parecía la salida y entonces logre ver que era de noche, camine entre las personas que no parecían notarme. Se vestían de una forma extraña. Camine un poco más hasta que pude ver una especia de fogata, donde todos se movían al rededor. Recuerdo cuando solían hacer esto para celebrar en el lugar de donde vengo. De repente, distinguí un cabello claro entre todas las personas. Su cuerpo se movía suavemente y el fuego la iluminaba. Me acerque en busca de respuestas, pero cuando me vio comenzó a bailar a mi al rededor. ¿Por qué todos actuaban tan raro en ese lugar? 

-Jessica-Solté pero ella hizo caso omiso y siguió bailando, en un momento apoyo sus manos sobre mi pecho y ya no pude hablar. Comencé a sentirme extraño, como perdido. Cerre un momento mis ojos tomando mi cabeza con mis manos y cuando volví abrir los ojos logre ver una mujer observándome desde lejos. Parecía ser la única de allí que no bailaba, la única despierta. Me aleje de Jessica rápidamente caminando entre las personas para intentar llegar a ella pero se había levantado y comenzaba a caminar como si estuviera huyendo de mi. Pocos metros antes de alcanzarla una especie de muralla de fuego apareció, como si estuviera encerrándome e impidiéndome que llegue hacia ella-¿¡Quien eres!? ¿Qué es lo que quieres?

-Soy lo qué más deseas.-Confundido mire a mi alrededor, vi a Jessica junto a Grayson tan perdidos, como si el mundo no siguiera girando. Sentí una respiración chocar contra mi cuello, sabia que era esa mujer.-Déjate llevar. 

Todo sea por la corona ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora