—¡Deja de seguirme, te perdono!—Gritó HoSeok corriendo más rápido.
—¡Hyung, escucheme, porfavor!—Pidió JungKook tratando de alcanzarlo.
Ambos llegaron al quinto piso, habían corrido por mucho tiempo, ya completamente exhausto, HoSeok se detuvo colocando sus manos en las rodillas y agachandose levemente para respirar tranquilamente.
JungKook llegó tras él y se recargó en una pared para recuperar la respiración.
—Hyung.—Susurró y tragó saliva.—Déjeme explicarle.
HoSeok seguía en la misma posición pensando que tan buena idea era eso, se levantó un poco con la respiración un poco más tranquila y giró a ver a su menor.
—Yo...—Se detuvo un momento cuando escuchó el típico sonido del ascensor y giró a ver encontrando a personas salir de él.—No.—Dijo y salió corriendo hacia el elevador para subir a él mientras JungKook lo seguía por detrás gritando que se detuviera.
Se adentró en él y apretó varias veces el botón para llegar al primer piso del edificio y justo cuando las puertas se estaban cerrando JungKook logró entrar dejándolos a ambod solos dentro de aquel angosto espacio.
Solo se escuchaban sus dificultosas respiraciones y HoSeok se encontraba bastante incómodo con la mirada atenta de JungKook en él.
Llegaron al cuarto piso y el pelirrojo creyó que era una buena oportunidad para escapar pero no contaba con que JungKook lo sostuviera fuertemente de la cintura impidiendo su huida.
Un hombre los miraba con extrañeza frente a ellos.—Ah, supongo que están ocupados.—Dijo y JungKook asintió volviendo a tocar el botón al primer piso.—Kook.—Escuchó la voz de su Hyung y miró hacia abajo para verlo.—Sueltame.—Dijo HoSeok con un tono intangible y mirando el suelo.
—Lo siento.—JungKook soltó la cintura de su hyung tomándose el tiempo para acariciarla un poco.
Ahora HoSeok se encontraba en una esquina del ascensor manteniendo un distancia prudente a su menor con la mirada abajo.
JungKook rascó su nuca incómodo, no sabía cómo empezar su disculpa, además, el aroma que su mayor desprendía lo estaba volviendo loco e intentaba centrarse en otras cosas.
—Y-Yo...—Intentó hablar pero fue interrumpido por el sonido del ascensor indicando que habían llegado a su destino.
Ambos bajaron y HoSeok quiso correr hacia los brazos de NamJoon cuando lo vio sentado en su silla giratoria masticando chicle.
El pelirrojo giró a ver a su menor.—Iremos a una cafetería para hablar tranquilamente, déjame ir por mi billetera.—Dijo y cuando JungKook asintió caminó rápidamente a su lugar.
—Seokie.—NamJoon sonrió espléndido.—Tengo tantas cosas que contar- ¡oh!—Se interrumpió a sí mismo.—¡Hola, JungKookie!—Saludó feliz y HoSeok recordó que no le había a nadie nada a NamJoon.
—Tendrá que ser luego, Namie, saldré a comer con JungKook.
NamJoon sonrió con picardia y le hizo un guiño.—Claro, yo te cubro.
HoSeok sonrió forzadamente y caminó a su menor para que caminaran a su destino.
Se encontraban dentro de una pequeña cafetería que se encontraba a unas cuantas cuadras del edificio donde HoSeok trabajaba, los dos ya habían pedido lo que iban a tomar y ahora solo estaban esperando a que estas llegaran, JungKook aún no había dicho nada sumergido en escoger las palabras correctas para pedir perdón por lo idiota que había sido.
HoSeok estaba siendo muy paciente con él, no había dicho nada desde que llegaron y se dedicaba a distraerse con cosas triviales como en contar las servilletas que estaban sobre la mesa o en observar cuántas personas se iban y cuántas entraban en el establecimiento.
—Hyung.—JungKook por fin habló.—Con un perdón no basta para recompensar el daño que posiblemente te he hecho.—Subió la mirada a HoSeok que lo miraba atentamente.—No hay excusas. Me dejé llevar por las opiniones de los demás sin pensar en ti, fui un egoísta.—Se aclaró un poco a garganta al notar que se le estaba formando un nudo.—Te amo.—Susurró.
—Si me amaras, nunca me hubieras dejado a pesar de lo que los demás creyeran.—Le dijo HoSeok con dulzura.
—Sí te amo, hyung, te lo juro.—JungKook se escuchaba seguro.—Pensarás que es estúpido que comenzara a amarte tan pronto, pero, sé que eres mi otra mitad, mi destinado.
El pelirrojo tomó su mano con delicadeza y le sonrió.—No, Kookie, un alfa no puede ser el destinado de otro alfa.
—Estoy seguro que es posible, hyung.—El más alto declaró serio.—Mi lobo siempre quiere gozar de tu olor, estar contigo.
HoSeok le miraba algo confundido y cuando iba a hablar la camarera llegó con sus bebidas.
El pelirrojo separó sus manos y permitió que aquella mujer dejara las bebidas en la mesa, se despidió con un "disfruten" y una corta reverencia dejando a los dos alfas nuevamente solos.
—En verdad lo siento.—Dijo HoSeok.—Y-Yo me siento muy herido.
JungKook tomó sus manos y dejó un beso en cada una de sus dorsales.
—Y no quiero nada con nadie.—Cerró los ojos recordando a TaeHyung, quería a su mayor, pero no estaba preparado para comenzar otra relación.—P-Pero podemos volver a ser a-amigos.
JungKook le miró un momento serio pero poco a poco una pequeña sonrisa de esparció en su rostro.—Te volverá a conquistar, hyung.—Besó de nuevo el dorsal de su mayor.—Te quiero conmigo para siempre.—Susurró.
HoSeok acarició los cabellos del menor y le sonrió.—Seamos amigos, ¿bien?.
JungKook sonrió y asintió, por ahora, tomaría la amistad de su hyung, pero él no iba a quedarse en la "friendzone" por siempre, de es estaba seguro.
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Gigil - Vhopekook
FanfictionHoSeok es un alfa, uno muy bonito. Gigil: El incontrolable deseo de apretar a alguien porque lo amas. ➤ ʜᴏsᴇᴏᴋ ʙᴏᴛᴛᴏᴍ ⊗PROHIBIDA LA COPIA DE ESTA OBRA. ASÍ MISMO NO AUTORIZO ADAPTACIONES⊗