Gigil - Vhopekook

Terminamos.

HoSeok se encontraba leyendo unos cuantos papeles mientras NamJoon estaba frente a él recargado es su escritorio, mirándolo sin decir nada.

—¿Ya me dirás?—El omega rompió el profundo silencio que había en la primera planta del edificio.

—De verdad no sé de que hablas, Nam, me encuentro bien.—Contestó el alfa mientras volteaba a ver al alfa con una sorisita que mostraba sus hoyuelos.

NamJoon mantuvo una mirada neutra.—Mentiroso.

HoSeok resopló.—Bien, Kook no ha hablado conmigo desde hace unos 12 días, ¿feliz?

—¡Ahí el problema! ¿Qué sucedió esta vez?

—Te prometo que no encuentro que es lo que hice mal, según yo, íbamos de maravilla.

Ambos se sumergieron en el silencio otra vez.

—Seokie.—El omega habló haciendo que el alfa le prestara atención bajando los papeles.—¿Ya tuvieron sexo?

Más silencio.

Poco a poco el color carmesí comenzó a invadir el rostro del alfa.

—¡Nam!—Levantó la voz.—Te he dicho que dejes de preguntar esas...—hizo una pequeña pausa.—Valgaridades.—Susurró avergonzado.

—¡Por Dios, Hobie!—El omega también elevó la voz.—Te he dicho miles de veces que...—Tomó aire.—¡EL SEXO ES NORMAL!

En ese momento, unos trabajadores que se dirigían a la hora de comer estaban saliendo del ascensor y al escuchar el grito comenzaron a reír levemente.

HoSeok se puso más rojo, ¿acaso eso podría ser posible?

—No puede ser.—Se deslizó en su silla tratando de verse menos.—Eres un sinvergüenza.

NamJoon asintió pareciendo orgulloso.—Pero en serio, Hobie, ¿qué edad tiene JungKook? Puede que esté molesto porque necesita un buen polvo.

HoSeok meditó, podría ser. JungKook era un niño, con necesidades básicas como el sexo, ¿cierto?

—Quizás...

—Aunque.—Escuchó la voz de Nam.—¿Quién le daría a quién?

Buen punto.

JungKook le había llamado, después de tanto tiempo lo citó en un parque cerca del edificio donde se hospedaba.

Pensó bien el asunto del sexo con su menor, podría intentarlo, JungKook era perfecto para llevarse su primera vez. Ese día tocaría el tema.

Se colocó unos pantalones de chandal y una camisa larga, blanca y holgada. No tenía porqué ir elegante, era un parque después de todo.

Llegó al lugar a la hora indicada encontrando al alfa menor en una banca, parecía pensativo.

HoSeok sonrió ante la imagen, Kookie era muy tierno para él.

—Ya sé quién le dará a quién.—Pensó.

Se acercó lentamente por detrás de JungKook para no ser escuchado, tapó los ojos de este con sus dos manos.

—¿Quién es?—Canturreó con una sonrisa.

El menor tomó las manos de su hyung y se levantó volteando a mirarlo con un rostro serio.

—¿Dónde te habías metido, mocoso?—HoSeok hizo un mohín.—¿Porqué no contestabas mis llamadas?

JungKook no contestó, en cambio se dedicó a observar las facciones del mayor, HoSeok bien podría ser un omega.

—Hyung, quiero hablar con usted.