Gigil - Vhopekook

Un alfa molesto

—Debo irme, bebé.—Susurró TaeHyung acariciando el hombro de HoSeok quien estaba acostado en la cama.

El alfa hizo una mueca cuando el delta no le contestó, olfateó el aire y al no detectar el aroma de HoSeok se alarmó.

—Bebé, amor, despierta.—Lo movió más rápido y escuchó un quejido que lo hizo tranquilizarse un poco.

—Déjame.—Susurró HoSeok y se acomodó de nuevo.

TaeHyung lo miró decaído, se acercó a darle un beso en la mejilla y se bajó de la cama para salir del departamento aún confundido por no lograr detectar el olor de su delta.

Cuando HoSeok escuchó que la puerta se cerró, se levantó de la cama y se dirigió al baño. Cuando salió ya aseado caminó a la cocina y se acercó al refrigerador buscando algo que comer, encontró un platón repleto de frutas distintas y lo sacó junto a un bote de yogourt, sirvió unos cuantos trozos de fruta en un tazón y sirvió un poco de yogourt sobre ellos. Se sentó en una de las sillas que había frente la barra y comenzó a comer.

Al terminar su desayuno guardó y limpió todo lo que había utilizado. Miró a su alrededor, en realidad, el departamento de TaeHyung era muy limpio, todo estaba perfectamente arreglado y en su lugar; escuchó como sonaba un teléfono dentro de la habitación y observó que era colocado a un lado de la puerta, se acercó y contestó.

—Buenos días, señor Kim.—Una voz femenina se escuchó.—Disculpe que le moleste pero, su pareja no me comentó si debía dejar entrar a alguien hoy y no sé si deba permitirle la entrada a un muchacho que intenta subir.

—Ah, pues... ¿quién es?—Preguntó HoSeok intrigado.

—Dice que su nombre es Jeon JungKook.

HoSeok abrió un poco los ojos sorprendido.—Déjalo subir.

—Por supuesto.—Dijo la mujer y colgó la llamada.

El delta suspiró, ¿no se enojaria TaeHyung?, no, ¿porqué demonios le importaría lo que piense ese imbécil? se recargó en la puerta principal cruzandose de brazos y miró al techo. No supo cuánto tiempo estuvo distraído cuando escuchó que tocaban, se separó de la puerta y abrió encontrándose con la mirada preocupada de su menor.

—Hyung.—Susurró JungKook antes de abalanzarse a él y envolverlo en un fuerte abrazo.

HoSeok también lo abrazó colocando sus brazos en el cuello del contrario y recargo su rostro en su hombro tratando de evitar las lágrimas que amenazaban salir, aspiró su aroma y sintió que una pequeña porción de felicidad regresaba a él.

—Kookie, sacame de aquí, por favor.—Susurró el mayor.

JungKook subió una mano a su cabellera y le acarició intentado que se calmara.

—Tranquilo, hyung, estás bien.

—No, Kookie, no lo estoy.—El delta se separó y lo miró a los ojos.—Me siento muerto por dentro, mi lobo... no está.—Cuando mencionó lo último su voz se quebró y las lágrimas comenzaron a bajar por sus mejillas.

JungKook acercó sus manos al rostro del pelirrojo y quitó algunas lágrimas con sus pulgares.—Es... es normal cuando sucede la transición de alfa a delta, solo necesitas cuidados de tu...—Tragó saliva y un nudo comenzó a formarse en su garganta.—...tu alfa.—Dijo dolido.

HoSeok bajó la mirada y puso su frente en el pecho de contrario aún llorando. JungKook se sintió mal al ver a su mayor en tal mal estado, cerró la puerta tras él y caminó con Hoseok hasta el sofá de cuero que había dentro del departamento, se sentó en él y dirigió a su hyung justo a su lado para que este recargara su rostro en su hombro. Lo tomó de la cintura y la acarició para tratar de calmarlo causando un escalofrío en el delta.

—¿Te lastime?—Preguntó JungKook viendo el rostro de HoSeok.

—Es solo que... TaeHyung fue un poco rudo y tengo algunas marcas que aún duelen.—Mencionó el pelirrojo con una mueca de dolor.

JungKook frunció el ceño.—¿Qué? Déjame ver.

HoSeok iba a responder de forma negativa pero JungKook no le dejó cuando alzó su camiseta para ver su torso.

El alfa abrió en grande los ojos cuando miró las marcas moradas por todo el torso del mayor, logró observar marcas rojizas en la cintura y le dolió ver la marca de TaeHyung entre el cuello y hombro de HoSeok.

JungKook sintió la rabia acumulándose en su ser. HoSeok logró captar el inconfundible olor de alfa enojado y trató de bajar su camisa, lo cual fue imposible cuando JungKook gruñó y sostuvo su mano sin ser tan rudo.

—¿Qué le estás haciendo a mí delta?—Se escuchó una tercera voz dentro del departamento que solo logró que el olor a alfa molesto se intensificara.

Estaba echadota en mi sillón sin nada que hacer, así que me dije a mí misma: "mi misma, ¿porqué no actualizas esta cosa?"

¡Y AQUÍ ESTÁ SU NUEVO CAP, BUAJAJA!