Lo aparte, había dejado que el beso durara demasiado y yo no quería eso.
_ ¡Basta!_ dije cuando recuperé el aire que me faltaba. _ No quiero nada de... esto._ movi las manos para indicar la situación.
_ ¿A qué te refieres?_ dijo. Tenía los labios ligeramente mas rosados de lo normal y no puedo concentrarme cuando me mira de esa forma tan dulce.
_ A lo que tu quieres, no permitiré que juegues conmigo. _ digo lo mas calmada que puedo, mis nervios comenzaban a notarse.
_ ¿Y tu no lo quieres?_ Rick se acercó a mi sonriendo picaramente.
_ No, solo quiero que me lleves a casa._ digo y empiezo a caminar.
_ ¡Deja de hacer eso!_ me grita porque estaba bastante lejos ya._ ¡Deja de dejarme con las palabras en la boca y huir de mi!
_ ¡No estoy huyendo se ti!_ grite de la misma forma que él pero sin dejar de caminar.
_ Si alejarte de mi cada vez que tenemos esta conversación no es huir, entonces dime que es._ extrañamente ya esta caminando a mi lado, me detuve a mirarlo.
_ Sólo estoy aplazando esta conversación para cuando me sienta mejor._ digo algo borde. Él me toma del brazo e impide que continúe caminando.
_ Déjate de tonterías Mad, si nunca te sientes bien para hablar. ¿Me tienes miedo? _ me pregunto preocupado, raramente parecia preocupado por mi respuesta. No respondí._ Claro es eso._ dijo decepcionado soltandome.
_Solo llevame a casa.
Vamos al estacionamiento y subimos a su auto. Decido sentarme en el asiento del pasajero y de vez en cuando veo las miradas de frustración y confusión en los ojos de Rick por el retrovisor.
Fue un viaje mas silencio que en un funeral y yo me sentía confundida con todas las preguntas que pasaban por mi cabeza. Al llegar a mi casa no me despedí de él, por alguna razón todas nuestras conversaciones terminaban en esto, varios dias sin hablarnos y en total confusión.
Tenía el presentimiento de que mañana no podría mirarlo a la cara.
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_ Tienes una cara horrible. _ me dijo Mel.
_ Gracias._ sonrío sin ganas. Habia pasado la peor noche de mi vida, las pesadillas volvieron y no me dejaron dormir pero también me la pase pensando en las cosas que me había dicho Rick y en mis sentimientos por él.
Termino de bajar las escaleras para ir a desayunar.
_Tu cara es horrenda. _ mamá me recuerda lo mismo.
Gruño en respuesta a su comentario.
_¿Qué hay para desayunar mamá? _pregunta Melody.
_ Jugo de manzana y tostadas._ dice mamá y la observo. Tiene unas notables ojeras y se ve muy triste y cansada, esta peor o igual que yo.
_ ¿Y los huevos? _ se queja Mike.
_ No hay huevos hasta nuevo aviso. _ anunció.
Eso significaba que nos estábamos quedando sin dinero.
_ Puedo volver a trabajar._ sugiero.
_ De ninguna manera, tú a tus estudios y yo a lo mío como quedamos.
Eso no cambia que necesitamos el dinero. Quiero ayudarla, necesito ayudarla pero necesita más apoyo moral que económico.
_ De acuerdo. _ digo para no discutir y escucho el exclavon del auto de Wendy._ Adiós mamá.
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Un amor... que cayó del cielo
Teen FictionMaddy Jones es una chica aficionada a la lectura, sarcastica, orgullosa y prejuiciosa. A ella le a tocado vivir una vida limitada y madurar antes de lo debido. Conoce a Rick un chico engreído, orgulloso y que ademas de todo esconde secretos. Rick a...