El amor de mi ex

10

Iván abrió los ojos, la luz del sol entraba con fuerza por la ventana, tenía que ser bastante tarde. Estiró el brazo hasta la mesilla de noche en busca del móvil y en su lugar encontró un vaso, miró sorprendido y vio que había una pastilla y una nota.

"Tomate esto y come algo, no pude hacerte el desayuno que se me hizo tarde."

Cogió la pastilla y procedió a tragarla con ayuda del agua. Tomó el móvil y eran las doce y media. Se sentó con cuidado en la cama para ir al baño, realmente habían disfrutado de la noche, le dolía todo el cuerpo horrores, esperaba estar mañana mejor, pero hoy no podía ni con su alma.

Pidió una pizza para almorzar, ni de coña iba a estar de pie cocinando ni loco. Se puso el DVD de El Señor de los Anillos, pensaba pasarse tirado en el sofá todo el viernes, así que la trilogía le ayudaría a pasar el rato.

Al día siguiente sintiéndose mejor, se puso de limpieza, dejó su cuarto brillando, así como el salón-cocina y el baño. Mientras cogía las cosas para ir a la lavandería abrió la habitación de Moi. Estaba hecha un desastre y olía al sexo de aquella noche, asqueado abrió la ventana para que se aireara, quitó las sábanas de la cama para también llevarlas a lavar y con vergüenza limpió esa habitación como había hecho con la suya. Cuando volvió de la lavandería, hizo la cama de Moi y cerró la ventana de la habitación. Estaba limpia y olía bien. Se apoyó en la puerta pensando.

"Es la segunda vez que nos acostamos. Hemos disfrutado de ambas experiencias mucho. Sé que estoy pillado por él. ¿Pero qué coño está pasando por su mente? Las dos veces comenzó él. Es más, parecía celoso y desquiciado por John, aunque no entiendo porque si él estuvo con aquella tía. Y ahora que caigo, desde ella, no ha traído a nadie más aquí. No me siento preparado, me gustaría salir con él, pero si me rechaza sería horrible y no quiero perder su amistad. Si confieso mis sentimientos todo se irá a la mierda. Aparte, sé que no quiere ninguna relación, solo divertirse y tener experiencias nuevas, ya ha estado enamorado de Laura y ahora no quiere sentirse así de nuevo."

-¡¡¡¡¡¡¡Aaaaaaahhhhh!!!!!! -Soltó un grito de frustración mientras se tiraba del pelo, estaba desquiciado y su mente no le ayudaba nada de nada.

-Solo me queda esperar su vuelta, a ver cómo se comporta él, para hacer lo mismo.

Escuchó su móvil y fue corriendo a buscarlo. Sonrió cuando vio quien llamaba, y con voz dulce contestó.

- ¿Siiii?

-Hola, Iván, esto...mmmm...joder que mal. Ian me contó lo que pasó...bueno lo que te hice. Verás lo siento mucho. Estoy muy avergonzado, en serio.

- ¿Entonces, lo que me dijiste no es verdad? -Le preguntó con tono triste y dolido para vengarse y burlarse de él.

- ¿Qué te dije? ¡Sabes que tengo novio! mierda que hice, lo siento.

-Entonces ¿no soy tu mejor amigo, al que más quieres? -Ya no puede contener la risa.

-Serás cabrón, que susto, claro que lo eres y por eso te llamo. ¿Te vienes al cine y cena esta noche con nosotros? te invito, como disculpa por lo plasta que estuve.

-Sí, vale. Nos vemos a la hora de siempre en el cine. No hace falta que me invites, gracias a ti me pasó algo bueno cuando te fuiste, así que estoy más que pagado.

-Tú y esa capacidad de ligar hasta estornudando, me pone celoso de forma extrema. Hasta esta noche. -Colgó con una carcajada.

Se duchó con tranquilidad y se puso unos vaqueros negros ajustados y con algunos rotos. Imposible encontrarlos de otra forma. Se puso una camiseta negra de Juego de Tronos y las botas negras sobre el vaquero. Desodorante y el pelo, más largo de lo que a su familia le gustaba, se lo recogió en una media coleta.

Llegaron los tres casi a la vez a la puerta del cine. Fue una noche tranquila y lo pasó muy bien. Los tres tenían el mismo humor y gustos, así que disfruto mucho y consiguió olvidar sus preocupaciones y relajarse.

Ya era domingo y se levantó temprano, estuvo liado con las cosas de clase y aprovechó para adelantar trabajos, apuntes y temario. Tenía que seguir sacando las mejores notas posibles, sus padres estaban así satisfechos y le dejaban espacio. Aunque suponía que ese año tendría que volver a casa para pasar Navidad y año nuevo. Aunque Reyes obviamente no. Las clases comenzaban aquí antes, ya que no existía ese día tan maravilloso en EE. UU.

Mientras se preparaba unas papas sancochadas con pescado y ensalada, escuchó un ruido tras él y asustado se dio la vuelta.

- ¡Joder! que susto. Volviste pronto. ¿Has comido? Dúchate si quieres, que te da tiempo y podemos compartir de esto, hay suficiente para los dos. -Fue a seguir preparando la comida, pero Moi no hablaba y le miraba intensamente sin moverse. - ¿Pasa algo? no dices nada, solo me miras.

-Estoy muy decepcionado conmigo mismo. -Dijo dejando salir el aliento como con tristeza- No he comido, así que sí, me ducho y ya vengo a ayudarte con lo que sea.

- ¿Por qué esa decepción?

-Después te digo. ¡Joder hermano! volviste a lavar mis sábanas y hasta limpiaste mi habitación, eres un colega increíble mil gracias -Le grito desde su cuarto donde dejó la mochila, se quitó toda la ropa y la tiró al suelo hecha una pelota. Cogió la ropa y la toalla y salió hacia el baño.

-No podía dejarla como estaba. Apestaba y bueno...ya sabes la ensuciamos los dos -Cuando lo miró y vio que estaba completamente desnudo no pudo evitar sonrojarse y le dio la espalda rápidamente para que no se diera cuenta. Que hambre de Moi le dio de repente, tenía mejor pinta que lo que estaba preparando.

-Tienes razón, pero no todo el mundo lo haría, así que gracias. Ya salgo. -Y se fue al baño sin percatarse de lo que causaba en su amigo.

-Huele todo de muerte. Cada vez cocinas mejor. Me estás quitando el puesto de cocinillas.

-No es para tanto, hoy te dejo el de freganchin, así que no te preocupes. -La media sonrisa le salió.

-Como ordenes, veo que estás bien.

-Sí, claro. ¿Por qué no iba a estar bien? -Preguntó sin entender.

-Con todo el esfuerzo que hice el jueves contigo, esperaba que aún te temblaran las piernas algo. Se ve que tengo que poner más esfuerzo. -Sonrió de medio lado, con gesto lobuno, acercándose a Iván mirando sus ojos con intensidad mordiéndose levemente los labios. 

Continúa>>>