Árbol De Cerezo (YoonSeok/SOPE)

Capítulo 30

Ho-Seok trabajaba arduamente para poder pagar el arriendo del apartamento donde estaba viviendo y también, poder pagar su carrera universitaria y escuela de baile. Era agotador para Ho-Seok, pero lo importante de todo es que el chico se encontraba ahora feliz porque podía hacer lo que más le gustaba junto a las personas que amaba y lo amaban.

Su vida era agitada, pero llena de felicidad y amor, sus días estaban cargados de cosas bonitas. Su país y la gente que rodeaba al joven Jung lo hacían sentirse vivo de nuevo. También hay que recalcar algo sumamente importante y era Min Yoon-Gi, ese chico que lo llenaba de besos, caricias y palabras bonitas todos los días; ese chico que es capaz de entrelazar sus manos en la calle, que claro, la pareja era demasiado discreta en los sitios públicos, pero eso no quitaba que no pudieran tomarse de las manos o utilizar ropa de pareja sin importar qué. Era notorio que algunas de las personas que pasaban por el lado de ellos, los miraban, algunos con mirada de "qué tierno" o "qué bonito", otros con cara de desprecio, pero a ellos les valía. A Ho-Seok algunas veces le daba temor e inseguridad, pero al sentir el agarre de Yoon-Gi y la sonrisa tierna que le regalaba sumando esa mirada que decía "estoy aquí para ti. Lo estaré siempre" hacía que sus miedos se fueran y disfrutara de sus paseos por la ciudad.

Ya había pasado un año y medio desde que Ho-Seok había dejado su hogar y el joven extrañaba muchas cosas de aquel sitio y las personas que lo conformaban, pero muchas veces había llamado y sólo su madre y hermana quienes le habían brindado todo su apoyo desde siempre, le contestaban y le daban ánimos, cuando preguntaba por su padre ellas sólo le decían "dale más tiempo", pero ¿hasta cuando? No se sabía, sólo se sabía que dejaría que el tiempo corriera y este mismo le ayudara.

- ¿Qué sucede, Hobi? -preguntó Yoon-Gi quien estaba sentado junto a Ho-Seok compartiendo una tarde de películas en el apartamento del menor.

- Es solo que extraño a mi familia... extraño a mi padre.

- Ay, Hobi, no te preocupes, si quieres pido permiso en el Instituto y a Seok-Jin para faltar un tiempo y compro los primeros tickets para viajar hoy mismo a Alemania si así lo deseas.

- No es eso, es la razón de que ya haya pasado un año y medio y mi padre aún no quiera saber de mí. Sí, él es un padre severo que cometió errores, pero es humano y yo también cometí errores con él, es mi padre y no debí ser tan duro al hablar o defenderme. Le debo una disculpa.

- Hobi, mírame -Yoon-Gi se acomodó en el sillón para poder tomar las manos de su pareja y mirarse fijamente -. Tú has intentado por todos los medios acercarte a él y él no aparece, ni siquiera da una señal de que quiere verte. Debe ser que él también quiere tomar su tiempo para reflexionar y, si no es así, pues el tiempo se encargará de hacértelo saber, pero no te atormentes más, mi chico de sonrisa brillante.

Ho-Seok asintió sonriendo. Yoon-Gi se acercó poco a poco a los labios de Ho-Seok para unir los suyos. Los labios de Yoon-Gi hacían que la seguridad de Ho-Seok regresara, era como él lo describió muchas veces, el invierno abriéndole paso a la primavera. Los labios invernales de Min hacían que la primavera en los labios de Ho-Seok, reaccionara. Era algo extraño para muchos como esos cortos y sencillos besos eran descritos de tan bonita forma por parte de Jung. Nadie nunca lo sabría porque nadie había esperado por esos labios tanto como los espero Ho-Seok.

Yoon-Gi comenzó a sonreír a mitad del beso cuando sintió que sus besos tenían un toque salado y era causa por las lágrimas que bajaban por las mejillas de su pareja. Yoon-Gi sonrió por la razón de que sabía que esas lágrimas sólo significaban que su novio estaba feliz, de que su novio lloraba de felicidad porque esas palabras que él le daba siempre lo reconfortaban. Min comenzó a hacerle cosquillas a Ho-Seok sin interrumpir aquellos besos. Las cosquillas ocasionaron que ambos cayeran del sillón, Yoon-Gi quedando sobre Ho-Seok.

- Esta posición se presta para muchas cosas -dijo Yoon-Gi.

- ¿¡Qué!? -Ho-Seok y su cara de asombro era lo más divertido de observar.

- Para hacer ejercicio, no seas tan mal pensado, Hobi -Min rió y posicionó cada una de sus manos al lado de la cabeza de Ho-Seok y separó un poco las piernas de su novio para unir las suyas y comenzar con una flexión de codo.

- No estaba pensando n...

Los labios de Ho-Seok fueron callados por los labios de su novio. Cada flexión de codo equivalía a un beso.

La pareja que formaban estos dos era la más bonita de todas. Ambos se amaban desde muy jóvenes, ambos querían darse todo desde chicos, pero el tiempo habló y los hizo conocerse bajo ese árbol; árbol que vio como ambos luchaban por querer ser correspondidos el uno por el otro; árbol que vio su unión; árbol que veía como aumentaba su felicidad.

Yoon-Gi hacía feliz a Ho-Seok, Ho-Seok hacía feliz a Yoon-Gi...

"Dejar que el tiempo hable es una de las mejores opciones que se podrían elegir en esta vida. Nuestro destino está escrito, sólo se deberían cambiar algunas cosas, no todas.

-J..."