Chocolate y Menta ~Omegaverse (KookJin)

Capítulo 45: Familia Jung-Kim.

(Sin editar)

Al día siguiente.

Jimin despertó bastante adolorido aún. Talló sus ojos y enfocó su mirada tratando de descifrar el lugar en el que estaba. Era una habitación individual, así que supuso que lo habían trasladado. Suspiró, sintiendo dolor en su cara, aún sentía un ojo hinchado y sus labios resecos por las heridas. Escuchó la puerta de la habitación abrirse y vió a su doctor.

-Cómo te sientes, Jimin?- le preguntó amablemente, mientras revisaba sus signos vitales y anotaba algo en unas hojas.

Jimin lo miró con recelo, no recordaba al doctor, no recordaba nada de las cosas pasadas, de hecho. Lo que sí recordaba era su conversación con Yoongi del día de ayer. Sólo asintió, mirando a aquel beta que lo estaba atendiendo.

-Tu cuerpo, se siente bien? Tienes alguna molestia que te parezca extraña? -preguntó queriendo hacer hablar al omega.

-Estoy adolorido. Me duele la cara, me cuesta hablar. Las costillas...y un dolor punzante en el vientre. Nada de eso me deja moverme- comentó con un tono de voz completamente plano- quiero ver a mi alfa, doctor- pidió en un susurro.

El doctor anotó todo lo que su paciente le decía y sonrió ante la última petición- Jimin, necesitas descansar y no exponerte a emociones fuertes por el momento, está bien?- le preguntó y notó como el chico asentía- iré a buscar a tu alfa- le índico.

-Doctor...-le llamó, notando como este giraba hacia él- cómo me veo?- le preguntó con sus ojos acuosos.

El beta sonrió- te ves fatal- le dijo amablemente y con una sonrisa- pero no te preocupes por ello, se nota que ese alfa te ama, no importa el como luzcas- dijo y le guiño un ojo, esperando darle algo de confianza. Salió de la habitación, hacia la sala de espera, dónde sabía se encontraba el alfa de Jimin.

-Yoongi-ssi- le habló alfa- Jimin quiere verlo, esta en la habitación 303, en el tercer piso-le comentó.

Yoongi le miró y asintió, notando que el doctor quería decirle algo más- pasa algo?- preguntó.

-El amaneció bien, adolorido aún. Ya sabes, costillas rotas y golpes por su cuerpo- comentó diciendo lo de siempre- sigue sintiendo dolor en su vientre, Señor Min- comentó algo preocupado- veremos como avanza, puede que el aborto y los golpes, hayan dejado más secuelas de las que esperábamos- comentó y tomó el hombro del alfa- lo siento- dijo dejando al hombre, para seguir con su trabajo.

Yoongi caminó cabizbajo hacia el ascensor, esperando a qué se detuviera en el piso. Las palabras del doctor que atendía a Jimin, calaron hondo en él, pensando en lo peor.

Cabía la posibilidad, y era los más probable, de que Jimin quedara infértil. Su lobo ahogo un gemido de dolor de tan sólo pensar que no podría tener sus propios cachorros. Mentiría si dijera que no le importaba en lo absoluto.

Amaba a Jimin, de eso no quedaba duda y nunca la habría. Pero si esa sospecha llegase a ser cierta, ambos sufrirían las consecuencias. El ascensor llegó y subió a este presionando el botón del piso tres. En un minuto estuvo en el piso, bajando del ascensor y mirando el número de cada puerta por la que pasaba, hasta que llego a la de su pareja. Golpeó la puerta y sin recibir una palabra a cambio, solamente entró.

Jimin observó en dirección a la puerta, tratando de sonreírle a su alfa, pero más que una sonrisa, parecía una mueca, ya que el dolor que sentía por las heridas aún estaba latente.

-Jiminnie- susurró Yoongi sonriéndole- cómo te has sentido?- le preguntó acercándose a él y tomando su mano.

Jimin asintió, devolviéndole el agarre. Sintió el olor de su alfa y se sintió seguro.