¿Yucatán?

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México y el eslavo se dirigían a la sala donde se haría la reunión.
Era de noche y la lluvia solo se calmó un poco. Ambos entraron a la gran sala encontrando solo a los amigos del mexicanos.

¿Qué onda putos?— saludo México alegremente, pero desvió la mirada cuando Argentina y Chile le miraron con preocupación.
Che ¿Como te sientes?—

—Como la verga.—

—Estoy hablando enserio.— le reprendió Argentina, más países habían llegado al lugar y Rusia fue a caminar un rato por los pasillos.

Estoy bien, neta, lamento haberme comportado como chamaco, ¿Meper d0nas?— le sonrió mostrando todos sus dientes.
Che, está bien, ahora vente para acá, tenemos que decirte algo.— dijo Argentina devolviéndole la sonrisa.

En si, en mexicano había mejorado de sobremanera, al no hacerle caso a sus pensamientos sobre USA por estar con sus hijos y con Rusia obviamente.
Más al estar con el poste andante, había ganado un lugar en su corazón tan pronto como lo conoció.

Le ayudaba inconscientemente, sus pequeños cumplidos hicieron que volviera a tener esperanza en él.

A volverse a enamorar.

Mientras tanto, Rusia se había encontrado con cierto país, ahora se miraban con odio y desgano.,

Se lo que intentas hacer...— hablo USA rompiendo el silencio.
Intentas enamorar a México para darme una paliza ¿No es cierto?— Rusia solo comenzó a reír.

No todo gira alrededor tuyo capitalista, si yo me quedo con México no será para atacarte, será para cuidarlo, algo que tú no hiciste.— lo miro desafiante.

¿Qué te hace creer que tendrás mejor oportunidad que yo? Él hará lo que yo quiera, soy su dueño y te consta.— Rusia comenzó a caminar hacia él lentamente.
El no es un objeto, es un país fuerte, capaz de levantarse aún cuando sea lo último que creas...— sus ojos miraban se forma amenazante al país que tenía enfrente.

—Y es que yo tengo algo que tú no..— hablo Rusia estando frente a frente.
Tengo el apoyo de toda su familia, yo no sería capaz de herirlo y ellos lo saben, te jodes capitalista...— y Rusia se fue en dirección a la gran sala, dejando solo a USA.

[...]

La ONU había llegado, estaban a punto de comenzar la junta, así que Rusia se sentó a un lado de México, notando una sonrisa en él.

La junta dio paso a diferentes temas, tales como la inmigración, economía, la paz en ciertos países y como algunos habían avanzado de manera notoria.

En la mitad de la junta, la puerta fue abierta y cerrada de la misma manera, todos los países miraban al suelo, Rusia y México no sabían de que se trataba así que no le dieron tanta importancia.

¡Papá!— se escuchó el gritó del niño, pues al parecer ya se habían arremolinado unos 10 países y le obstruían el paso.

Rusia se levantó al reconocer la vocecilla chillona de Yucatán.
Se abrió paso con facilidad entre todos los países y vio como el pequeño le extendía los brazos para que lo cargara.

No tardó mucho en hacerlo, notando las miradas sorprendidas de todos, importándole poco cargo a Yucatán y este lo abrazó por el cuello para después regresar con México.

Yuca, te dije que te quedarás con tus hermanos.— le dijo con una voz suave el mexicano.
Queria verlos.— sonrió.

La junta siguió normal, claro como algunas miradas de ternura hacia Rusia, era gracioso ver a un gran país como él abrazaba a un estado dormido en su pecho.

Todo iba bien, hasta que México sonrió un escalofrío por todo su cuerpo y seguido de esto, un sentimiento de terror.

Sinaloa....— susurro.


"FELIZ" RusMexDonde viven las historias. Descúbrelo ahora