Capítulo 4

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Llegué a casa y dejé la mochila a un costado de la entrada, en esos ganchos que mi padre había colocado el invierno pasado. La sala era un verdadero desastre con todos nuestros abrigos desperdigados por los sillones.

_¡Papá! Llegué ¿Necesitas ayuda?

_¡Jimin, hijo! Ven, ¿Puedes traer esto del super? Tu madre llega un poco mas tarde del trabajo hoy y no tengo para la cena.

Me dirigí a la cocina donde se encontraba mi padre haciéndose uno de sus famosos batidos. Estaba obsesionado con esas cosas.

_Toma, prueba.

No quería. Acercó el demonio a mi rostro y me dieron ganas de vomitar. Tenía un color anaranjado muy horrible, con pequeños trozos de verduras aún flotando por allí.

_¿De qué es?- pregunté, haciéndome el interesado. Tomé con una falsa sonrisa el vaso y automáticamente me produjo arcadas.

_Este tiene radicheta con calabazas, coliflor, zanahoria, cebolla morada y un poco de nuez mozcada. Venga, prueba.

_E-eh...paso mejor, que después no te queda nada a tí para la cena.

_¡Cena! Casi me olvido, ten- dijo entregándome una pequeña lista- Ve al super de la esquina y traéme esto, luego pasa por la verduleria ¿Sí? Tienes dinero en la mesa de la cocina

Asentí saliendo de allí lo más rápido posible, antes de que mi padre se arrepintiera y me diera de probar su batido nuevamente. No señor, claro que no.
Hacía frío afuera así que tomé mi bufanda que está mañana se me había olvidado, cerrando la puerta con mi propio juego de llaves. Este tenía un pequeño dije de TheSmiths, lo cual lo diferenciaba de los otros. Hubo una epóca en que todos se confundían de llaves así que así fue más fácil. Papá tenía un llavero con mi foto y mamá un dije de Union Good.

Caminé unas calles abajo y pronto comencé a divisar el mini mercado, ese que estaba abierto las 24 hs. Mi instinto de consumidor me pedía entrar allí sólo por las miles y miles de bebidas energéticas que allí se vendían, pero no. Primero cena.
En la otra calle, estaba el mercado. Rápidamente fui directo a las góndolas donde se encontraban los productos que papá me pidió, conocía el lugar desde pequeño, así que fue sencillo. Pagué y me dirigí a la verduleria.

_Jimin ¿Está bien así?- me preguntó Charles, el hombre que atendía allí desde que tengo memoria. Toda mi ciudad me conocía, desde bebé.

_Sí, sí, claro - pagué justo y me despedí con una reverencia, cuando sentí la característica vibración en mi bolsillo.
En el camino, saqué mi movil. Venga, Jimin, debes contestar.

"¿Deberia darme por ignorado?"

Aún no había respondido el anterior mensaje, aunque no le había dejado el leído. Realmente no sabía que hacer ¿Cómo se supone que alguien habla con una persona con la cual quedas justamente para tener sexo? ¿Cómo es el juego previo? ¿Cómo es la seducción? ¡No sé nada de eso, joder!

"Lo siento, recién llego a mi casa. Fue un día largo"

Y es que era la verdad, y aún ni siquiera llegaba del todo a mi hogar. Salí en cuanto entré. Aunque si realmente soy un tipo sin tiempo ¿Cómo se supone que haga un espacio para él?
Se supone que debemos conocernos, hablar, saber si hay alguna posibilidad...

No.

No, Jimin, no. Sí el sujeto entró a tu perfil, si te envío la solicitud, si te envío un mensaje, y si fue todo mediante una aplicación EXCLUSIVAMENTE para el uso sexual...seguramente quiera follar.

Losing It    [PJM × JJK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora