Dejé que Jeon me guiara por los pasillos que me daban vueltas. Era raro como la marihuana me habia quitado toda la idiotez del alcohol pero ahora estaba doblemente mareado y con una erección en mis pantalones. Aquella confesión de Jungkook me había dejado caliente, excitado. Había aceptado enseñar a alguien, y ese alguien era yo.
No me sorprendí cuando nos subimos a un auto con chofer pues el castaño estaba drogado y no podía conducir así, cosa que me pareció bastante madura, aunque me sorprendía ver así a Jungkook. Si bien los Sinners simepre estaban bajo el efecto de alguna droga, Jeon tenía la fama de ser el más tranquilo respecto a eso, pero que se hubiese fumado un porro a este horario, era un poco extraño. Por lo que ambos estábamos bajo el efecto de la marihuana así que nos sentíamos igual de mareados. Pero mi mareo venía junto con las toneladas de nueva información que había llegado a mí. El hombre de cabello corto, uniforme y semblante serio nos saludó con una pequeña sonrisa. Era atractivo, y me generaba un aura de tranquilidad.
Le dio una pequeña lista al conductor y este salió del coche asintiendo. Pude llegar a ver el nombre de algunas pastillas y de un par de galletas para cuando la droga bajara, seguramente para que el efecto se fuera un poco más rápido. Habia sido sólo un par de caladas, por lo que no iba a ser tanto. Sirvieron para contrarrestar un poco el efecto el alcohol y ahora por alguna razón tenia ganas de reír.
Me senté, acomodando mis pantalones los cuales me molestaban en la entrepierna. Escuché una pequeña risa._Te la chupé hoy, Jimin. Y ya estás así otra vez.
Bien. Era Jungkook, podía manejarlo. No iba a dejar que supiera todo lo que provocaba en mí tan servido en la mesa.
Reí lijeramente, fingiendo desinterés y tratando de actuar al menos un poco normal._Es que...- no le digas - toda la situación, las charlas, los...castigos.
Y no era del todo mentira, porque todo lo que había visto y oído allí arriba habían sido de mucha ayuda para mi mente y mi repertorio de escenas en mi imaginación. Aquellos sujetos no se ahorraban los detalles a la hora de contar las veces en las que habían hecho correr a sus sumisos o como debían atarlos a un caballete porque no podían mantener sus piernas abiertas. Era algo un poco distinto, una especie de otro nivel, como si fuera algo que aún nos faltaba. Y no es que las ganas escasearan, sino que no estaba seguro de que Jungkook dispusiera de algún caballete o cruz en su habitación.
Lo dudaba.
_¿Hicieron alguna escena?- preguntó, en un tono neutral que no me gustó porque no podía reconocer ante quién me encontraba. Si Nochu me ordenara en ese mismo instante que se la chupara lo haría sin dudar.
_No, solamente castigaron a una...¿Brat? Y eso me dejó un poco...no sé. Nunca había visto nada en público mas allá de un beso.
Fui bajando la voz a medida que lo iba diciendo, dándome cuenta del ambiente que estaba creando y de la mirada que me estaba dando Jeon. Casi viendo cada parte de mi cara hablar, examinando, tratando de ver que es lo que sucedía dentro mío.
_¿Y a tí te gustaría?¿Una escena en público?
Asentí.
_Me gustaría verla...participar, aún no estoy seguro...- y lo pensé mejor- Señor.
Jungkook sonrió, asintiendo levemente al ver mi sumisión. Estaba aprendiendo cada vez mas rápido cuando actuar de forma sumisa y cuando simplemente ser el presidente Park. Allí, entre las bajas y pequeñas paredes del automóvil estaba apresado ante la mirada de mi, en ese momento, Dominante.
_Una escena pública puede llegar a ser muy gratificante, Pet.- afirmó, y no supe si lo hizo desde el lado de la enseñanza, la dominación o la experiencia.- Las personas que te están viendo se sienten igual que tú, con ese placer que se le escapa de las manos en cada castigo, en cada nalgada, o en cada vez que no permito que te corras.
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Losing It [PJM × JJK]
Fanfic"¡Hey! ¿Quieres algo rápido? ¿Un polvo de una noche o unos días? ¿Grandes o pequeños? ¿Perro o Gato? ¿Duro o suave? ¿Arriba o abajo? ¿Cama o piscina? ¡Losing It lo tiene para tí! Todos tus gustos y fetiches cuando quieras, donde quieras ¡Y con quien...