《ᎪՏᎬՏᏆΝϴ ᎠᎬ ᏞᎪՏ ᏟᎪͲᎪᏟႮᎷᏴᎪՏ 》 ||ᑭᗩᖇᏦ ᒍᏆᗰᏆᑎ & ᗰᏆᑎ ᔑᑌᏀᗩ|| ϴᎷᎬᏀᎪᏙᎬᎡՏᎬ ||

🔪capítulo 2🔪

Enmascarados

Una risa socarrona salió de su garganta mientras ejercía presión sobre el cuchillo en mi cuello.

-por favor.. no- rogué con mi voz temblorosa. En un gruñido me volteó hacia su cara y me tiró al piso.

Tenia cabello castaño brillante una camisa azul llena de sangre, botas y pantalon negro. Su cara tapada por una máscara extraña.

Retrocedí con la ayuda de mis manos, mi respiración fallaba y no podía gritar.

Avanze hacía atrás hasta que mis manos tocaron la sangre en el piso, del cadáver de ChanYeol.

-lindo conejito, te metiste en el lugar equivocado- susurró con burla, arrodillado sobre una pierna- eres muy lindo, tal vez pueda incluirte a mi colección-

Extendio su mano hacia mí, tratando de tomar uno de mis pies.

Cerré los ojos poniéndome en posición fetal, estaba asustado, cada segundo que pasaba era una cuchilla de agonía en mi pecho.

Por su olor pude deducir que era un omega, tenía aroma a mar y pigmentos de piña. Tal vez pudiera golpearlo para escapar.

Todo pensamiento salió disparado de mi mente cuando arrojó en mi dirección un cuchillo que quedó clavado en la pared.

Toqué mi mejilla, el arma Blanca me hizo una fina cortadura en mi cachete derecho.

Sentí una gota de sangre bajar hasta mi mentón, perdiéndose en el piso.

Soltó una risa sádica, mis lágrimas se deslizaron violentamente por mis mejillas.

Pero una voz profunda detuvo el momento.

-Jin, ya basta- ordenó , el muchacho volteó detrás suyo, yo no podía entender nada.

Dos hombres estaban parados en el marco de la puerta, pero no tenían sangre.

-vete Suga, este es mío, lo vi primero- exclamó empuñando más fuerte el cuchillo.

Uno de los muchachos, que tenía una máscara que aparentaba ser antigua, los ojos remarcados con negro y debajo de estos hacia la ilusión de que se desprendía un líquido , los labios remarcados y alargados como una larga sonrisa, acompañado de una cruz en la frente.

El otro, era un chico peli blanco con antifaz negro y que tenía plumas extravagantes en su frente más simple y tenebroso. Me miró a los ojos, y yo también. Sus pupilas parecían agujeros, eran tan oscuros y profundos; como si te invitaran a hundirte en ellos y descubrir que albergan.

Pronto me percaté que estaba en frente de tres, posibles, asesinos seriales.

Parecía que estaba en el borde de un acantilado, muy cerca de la muerte. Pero mi destino no dependía de mí, era lo más frustrante y estimulante que sentí en mi vida.

-dije que basta, fuera de aquí- el tono de su voz causó escalofrío en mi sistema, mis piernas temblaban. En silencio, el muchacho en frente mío se paró y se fue

El tal Suga utilizó la voz de mando, era un alfa.

Por el miedo en mí no pude sentir su aroma. Pero era lo que menos me preocupaba en este momento.

-Jeon, encárgate de Jin- habló al otro muchacho a su lado, el cual desapareció sin decir una palabra.

Pronto nos quedamos solos.

Traté de regular mi respiración, pero me estaba ahogando con mi propio aroma, la habitación estaba impregnada con olor a uvas.

No me atreví a mirarlo, solo observaba sus botas mientras controlaba mi llanto.