Declaración.

413 36 16
                                    

-.Capítulo 36.-

Tomaron distancia viéndose a los ojos, sus respiraciones aceleradas eran notorias.

-¿Cry? -lo llamó Félix sin quitarle la mirada a sus ojos azules, sus mejillas aun sonrojadas por el alcohol y ese color rojo en su lado izquierdo del cuello. El chico de anteojos corrió la mirada para suspirar hondamente y cuando el sueco quiso tomar de su mano no pudo hacerlo -¿Qué pasa?

-Nada -musitó con un hilo de voz, miró como paso una y otra vez las palmas de sus manos por sus muslos como tratando de relajarse y eso era muy extraño, comenzaba a sentirse mal por haberse aprovechado de esa situación.

-Oye yo... -otra vez fue recibido por un beso del otro que lo tomó de la camisa para empujarlo hacia atrás quedando recargado en uno de los costados del sofá.

-Realmente ¿quieres hacerlo verdad? -añadió ya cuando estaba sobre él, colocó sus manos a los extremos de sus costados y se apoyó de sus rodillas.

-¡¿Qué?! -sus actitudes lo estaban desconcertando de sobre manera, en un momento estaba extasiado y por otro lado totalmente indiferente. El americano llevo sus manos al cinturón de su pantalón para comenzar a quitárselo. -Cry... no -intentó quitar sus manos, se incorporó un poco del sillón pero el otro continuó.

-Pensé que querías que lo hiciéramos -le quitó el cinturón negro y lo aventó al suelo, Félix siguió mirándolo a los ojos, permaneciendo en silencio.

-Es que... yo -ahora Cry movió sus manos para desabrochar el botón de su pantalón, no estaba seguro de que siguiera con esta situación, en vez de que le gustara se estaba sintiendo incómodo.

-Vamos a preguntarle a tu cuerpo que opina -bajo la cremallera provocando que el bulto en su entrepierna se percibiera aún más bajo su ropa interior, el sueco no quería mirar lo que estaba pasando. -Wow, al parecer tu amigo no es tan pequeño después de todo-soltó una ligera risa el americano y un momento antes de que Cry bajara su cabeza por completo para poder hacerle sexo oral lo detuvo tomando de sus hombros con fuerza.

-No -gruñó sonando como una orden, parecía excitado pero serio a la vez. El castaño se incorporó para lanzarle una mirada penetrante

-¿Por qué no? -no se escuchó que pronunciara una sola palabra, simplemente lo miraba a los ojos así que el americano lo interpretó de otra manera- Oh ya veo... ¿quieres hacerlo tú primero? -se incorporó hincándose en el pequeño espacio del sofá para comenzar a desabrochar el botón de su pantalón y descender su cremallera.

-Dije que no Cry -detuvo sus manos tomándolas de sus muñecas antes de que fuera más lejos.

-Entonces... -fijo sus ojos azules a los suyos pero el sueco no pudo sostener la mirada esta vez, corrió su rostro tratando de regular su respiración. Jamás pensó que una de sus fantasías se volviera realidad convirtiéndose en una pesadilla- Ok, quieres hacerlo de otra manera - estaba por cambiar de posición cuando Félix lo tomó con más fuerza. -Suéltame -le exigió rechinando los dientes profundizando su mirada hacia él que ya lo observarla.

-Maldita sea, no -le repitió soltándolo y Cry se acercó a su rostro, parecía que le daría un beso pero no lo hizo.

-¿Qué Félix?, ¿Acaso ya no te gusta la idea de hacerlo con un hombre? -llevó su mano derecha a su cabello castaño para hacerlo hacia atrás despejando su rostro- pensé que si te gustaba, a tu cuerpo no le desagrado la idea -justo en esa última oración el sueco lo empujo para quitárselo de encima provocando que cayera al otro extremo del sofá. Esa acción le dio tiempo para poder levantarse y volver a abrocharse el pantalón -¿Por qué me tratas así?, Tú querías esto.

.-We Might As Well Be Strangers-.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora