En la cama, entre las sabanas y con una sensación increíble en el pecho. Aron jugaba con mi pelo, mientras yo le hacía cosquillas en el brazo. Después de haber estado toda la noche demostrándonos cuanto nos queríamos, dormimos un rato, pero al oír que los chicos ya volvían de fiesta, nos desvelamos.
Podría explicar nuestra primera vez juntos de muchas maneras, y es que fue algo tan especial e intenso a la vez, que tenía una mezcla de sentimientos muy extraña. Fue muy muy caliente, pero a la vez muy romántico, porque si, lo habíamos hecho sin control, pero diciéndonos todo lo que sentíamos el uno por el otro.
-Aron...
-¿Si?
-¿Por qué te habías vestido tan elegante si lo único que querías era llevarme a la cama?
-Eso ha sonado feo -hizo una mueca- No solo quería llevarte a la cama, había preparado cena y peli, pero es que no he podido resistirme.
-sonreí y me incorporé para besarlo- Pues tenía mucha hambre, me hubiera venido muy bien cenar algo para tener más energía.
-¿Más? -frunció el ceño- Hubieras acabado conmigo entonces.
-reí y golpeé su brazo- No seas tonto. No he sido nada bruta.
-Pues si no has sido nada bruta, me encantaría probarte siéndolo, porque no sabía que pudiera haber algo más salvaje que lo que hemos hecho tú y yo aquí esta noche.
-Aron, no hables así, me muero de la vergüenza.
-¿Así que ahora te mueres de la vergüenza? -sonrió divertido-
-Si. Mientras lo hago, todo me da igual y solo pienso en eso, pero después cuando lo recuerdo, me muero de la vergüenza.
-No deberías.
-No puedo evitarlo -sonreí-
Aun estábamos desnudos, y a pesar de estar amaneciendo, no teníamos la más mínima intención de salir de la cama.
Aron se incorporó conmigo y me recorrió el cuerpo con la mirada. Sus ojos brillaban, y una sonrisa asomaba mientras se mordía el labio. Con su dedo índice, comenzó a dibujar círculos por mi vientre, y después de un rato de mimos y cosquillas, me agarró un lado de la cara y me besó.
-¿Sabes que eres lo mejor que me ha pasado en la vida? -preguntó-
-sonreí- Exagerado -dejé un casto beso en sus labios-
-¿Piensas que es mentira?
-No, solo pienso que eres demasiado exagerado -hice una pausa y agaché la cabeza- Aron yo...
-¿Tú? -levantó una ceja-
-¿Te gusté? -me mordí el labio nerviosa-
Tenía que hacerle la pregunta, porque que yo lo hubiera disfrutado como nadie y no hubiera sentido algo tan increíble nunca, no significaba que él lo hubiera disfrutado igual. Estaba segura de que no le había decepcionado, por como su cuerpo encajaba perfectamente con el mío, pero aun así, sentía la necesidad de escuchar su opinión.
Frunció levemente el ceño y segundos después, me agarró la mano y la llevó a su pecho. Su corazón latía descontrolado y lo miré extrañada, buscando una explicación a su extraña respuesta.
-¿Sientes lo acelerado que va?
Asentí y tragué saliva.
-Pues esto lo provocas tú. Porque estoy enamorado de ti.
-sonreí- Eso lo sé, pero no es lo que te he preguntado.
-Ya, pero solo quería que supieras, que a parte de que eres una bomba en la cama, hacerlo contigo, que eres la persona de la que estoy enamorado, suma por mil, así que sí, me ha encantado.
ESTÁS LEYENDO
VAS A QUEDARTE. Terminada (Editando)
Novela Juvenil"Tuve miedo porque nunca pude reemplazarte, por eso supe que a nuestra historia le hacía falta una segunda parte" El tiempo fue el único que sanó el corazón de Megan, un corazón que tras el rechazo de Aron, quedó destrozado. La distancia marcó sus...
