Hasta que me Empalague de Ti [BL]

Capítulo 14

24 de Diciembre....

Con la mano sobre la manija en la puerta de la entrada principal de la pastelería... intento animarme a entrar a este lugar, pero después de lo que me había sucedido ayer temía el hecho que Milandri-san ya no quisiese hablarme y mucho menos si yo no me atrevía a dirigirle la palabra entre tanta gente, así que dudo mil veces girando temblorosamente la mano.

"Mejor me voy", pienso para mis adentros, pero de pronto la puerta se abre parando en seco mi cobarde escape.

— Sabía que eras tú Kibari (en Italiano) — dice Clara muy sonriente, me sostiene del brazo obligándome a entrar junto a ella, pero todo se paraliza cuando siento la mirada de Milandri-san sobre mí.

"Justo la persona que menos quería ver", mi corazón se acelera.

Él estaba sentado en una mesa grande que habían armado para que todos los trabajadores en la pastelería pudiesen estar juntos, al lado suyo guardaba un asiento vacío, por los nervios tragaba saliva unas diez mil veces, pero afortunadamente Clara me obliga a sentarme a su lado.

A lo largo de la pequeña velada pude notar que los intentos de Milandri-san por acercarse a mí eran fallidos, siendo que yo esperaba que en algún momento se acercara un poco, pero no podía evitar desviar la mirada para no verlo directamente a los ojos por la vergüenza, y cada vez que la cruzábamos por alguna razón no podía evitar reírme falsamente de cualquier cosa para disimular ante todos que nada había sucedido entre los dos.

— Y bien Kibari ¿qué piensas hacer mañana en navidad? — pregunta Clara muy emocionada, pero antes de que pueda dar una respuesta Milandri-san interrumpe.

— Los dos vamos a ir a Roma — dice dejándome consternado.

"¡¿Cuándo decidimos eso?!"

Y antes de que pudiese retractarme de la nada Clara mira amenazadoramente a Milandri-san lo cual causa una gran tensión entre los empleados quienes para cambiar el humor de Clara y la tensión del ambiente entre miradas deciden hacerme un bombardeo de preguntas....

—Kibari ¿qué te paso? ¿Por qué desapareciste estos días? — preguntan todos en grupo — Le preguntábamos al jefe y se ponía tenso.

— eeeee tuve algunos problemas en mi trabajo — miento.

— Pero de seguro se solucionaron ¿verdad?

— eeeee Claro, no eran tan graves, solo tenía que enviar muchos correos y eran demasiados — digo tratando de disimular una risa pero podía sentir como la mirada de Milandri-san caía sobre mi.... "Mentiroso"de seguro estaría pensando eso para sus adentros.

— Kibari ¿Cómo solías ser en tu trabajo cuando estabas en Japón? — pregunta Julio.

— Eeemmm? Eee la verdad....creo que era muy enojón y muy perfeccionista, pero al venir acá siento que me volví más rebelde ahahaha — respondo.

— ¿Y en qué trabajabas? — Pregunta Federico (un mesero).

— Antes de venir acá estaba trabajando como secretario personal de mi jefe y como el manager del grupo musical de su nieto, bueno sigo haciéndome cargo a la distancia de algunos de sus asuntos, si no fuera por él no estaría aquí estudiando un postgrado.

— Vaya!!! Eres increíble — dice Lucio (otro mesero).

— hahaha Gracias.

— ¿Y tienes familia? — Pregunta Clara, inmediatamente Sergio se acerca un poco ya que nunca se había atrevido a hacer esa pregunta.

— Solo tengo a mi hermana — respondo algo nervioso.

— ¿Y tus padres? — Sigue preguntando Clara.

— ....Ambos están muertos — al decir esto todos en la sala se quedan mudos... — no es necesario que se disculpen — comento nervioso por la tensión que se había formado.

— Lo siento — dice Milandri-san.

— Perdón, no debí preguntar... pero dime ¿Qué edad tiene tu hermana? — dice Clara animadamente intentando romper rápidamente con el ambiente que se había formado. Aquello era muy típico de ella cambiar con tanta facilidad cualquier tema que resultase desagradable.

—Ella tiene 8 años — respondo algo tímido.

— ¡¡¡Waaaau deben llevarse con muchos años!!! — Dice Clara sorprendida.

— ¿Y cómo se llama? — aprovecha Milandri-san para preguntar.

— Se llama Momoka.

— ¿No te pone triste estar tan lejos de tu hermana? — dice Clara.

— Claro que sí, pero ella vive con mi tía...es algo complicado jeje — digo intentando disimular una risa.

~~~~~Música~~~~~Música~~~~~música~~~~~

De pronto me levanto avergonzado, por el tono de mi celular.

— Perdón, olvidé apagar el celular — Me disculpo, me retiro rápidamente del salón y voy a la cocina.

— ¿Hola?

— oh! Kibari ¿cómo te va? — Se trataba de mi jefe.

— Todo bien, gracias. Dentro de un mes acabo con la defensa de mi proyecto y todas las legalidades concernientes al curso ¿Y cómo está Tay (Nieto del presidente y sobrino de Kibari)?

— No sé, sería bueno que llamases más a menudo a Yuki-san (la chica que remplaza a Kibari), no he visto a mi nieto debido a mis viajes, desde que te fuiste ha sido complicado manejar todo, realmente eres inhumano ¡¿Cómo pudiste lidiar con tantas responsabilidades tu solo?! hahahaha

— Sí, quisiera volver lo más pronto posible.

— aaaaa.... Sobre eso.... ¿no te gustaría hacer otro curso más?

— No jefe, quiero volver a mis labores lo más antes posible.

— aaaa no te desesperes, pensé que quizás pudieses quedarte por un tiempo más.... Ya que... bueno siempre quisiste ir a Italia y me gustaría que disfrutes de tu estadía.

— Si, me gusta Italia pero tengo que volver.

— ¿Es por la custodia de tu hermana?

— No....

"Y sí.... Solo tengo miedo de lo que pueda pasar mientras me quedo aquí"

— ¿Por qué te quedaste callado?

— No es nada jefe

— Ah! Quisiera que revises las cuentas que mandé a tu correo y hagas las planillas.

— Sí, las haré hoy.

— ¿No vas a hacer nada mañana en navidad?

— Eh? .....mmm lo había olvidado — digo recordado que Milandri-san planeaba llevarme a roma.

— Deberías olvidarte por un momento del mundo y comenzar a disfrutar.

— Igualmente señor — me burlo irónicamente soltando una pequeña risa. Mi tío del otro lado de la línea hace un áspero sonido de inconformidad avergonzado porque le había atacado en un punto débil.

— ....Espero las planillas para dentro de tres días

— eh? ¿Tanto?

Cuelga!

— ¿Jefe? — insisto.

"mmmmm que inteligente... como siempre cuelga cuando sabe que voy a contradecirle".

Doy un largo suspiro y pienso para mis adentros... "Si Milandri-san supiese al menos la mitad de mi vida real, no quisiera ni saber de mí, pero que rayos! ¡¡¡Como si le importara!!!"