Capítulo,27.

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A veces el destino nos pone en situaciones muy difíciles, estoy observando a Yesvi un hombre para mi hermoso pero no me gusta su manera de ser, el que me mienta y a su vez me diga que lo perdone que no volverá hacerlo, acto seguido continúa mintiendo, no me explico por que lo hace, pero a veces desaría poder quitarle esa máscara que lleva para que se mire en un espejo y pueda ver lo que es realmente, lo que la gente ve y no habla, ese sería su verdadero rostro.

Me siento muy disilusionada conmigo misma, procedemos de dos culturas muy distintas pero a la vez tan iguales en nuestra manera de actuar, e intentado acloparme a esta sociedad que me ha dado muchas oprtunidades, lentamente voy cumpliendo con mis espectativas, pero todo no se puede tener, lo único que puedo hacer es soñar si se puede e incluso me hace hasta feliz.

Sentada aparte de toda la gente observo a mi esposo que no para de hablar con hombres, con algunas de ellas incluso tontea se le ve a dos a leguas, no las culpo,si tan solo con dedicarte una sonrisa con sus ojos marrones mirándote con ternura caes totalmente rendida a él, agachazo mi mirada y me pongo a jugar con mis dedos entrelazados sobre mi regazo, veo que alguien se pone a mi lado ofreciéndome una copa, alzo mi vista y veo un hombre rubio, ojos verdes claros, alto,corpulento, me ofrece una copa que yo amablemente se la rechazo, él sigue insistiendo me siento cohibida decido levantarme para marcharme, este señor se pone delante mio cortándome el paso, doy un paso atrás el otro hacia mi hasta que me topo con un mesa, lo miro a sus ojos me asusta de la manera que me mira, con su dedo índice me topa me cara, siento mucho asco y le doy un bofetón éste a su vez me agarra de mi nuca y me besa, me suelta violentamente y al momento está en el suelo, Yesvi le ha pegado un puñetazo, la gente nos mira mi rostro toma color estoy aborchornada, no me lo pienso salgo huyendo de la sala hacia el holl, intento encontrar la salida quiero salir de aquí, ya fuera en la calle respiro hondo, no hay parte de mi cuerpo que no tiemble mi respiración se va apaciguando hasta que siento unas manos en mi hombro, doy un chillido del susto, Yesvi se echa a reir y sin pensarlo me abrazo a él, entiendo que está mal lo que hago pero necesito sentir su calor, su protección, el no hace ni el minimo moviento para tocarme, acto seguido me separo de él, le pido disculpas y me monto en el taxi, ya dentro del vehículo no puedo seguir conteniendo este dolor, comienzo a llorar desconsoladamente, llegando a casa, pago mientras el pobre taxista un hombre de color mayor me abraza consolándome, un poco mas tranquila le doy las gracias al taxista y paso hacia dentro.

Ya no aguanto más el rechazo de Yesvi, se que dí mi palabra que estaría a su lado un año pero no puedo soportar el ver como toca, besa, dedica sonrisas, le ofrece a cualquier mujer algo que a mi me niega, algo que tanto deseo, poder sentir una caricia, sus besos, incluso que me haga el amor, ya no aguanto más, voy hacia el armario donde tengo una caja con todas las fotos y cartas que recibo de Naima y donde guarde este maldito papel, cuando llego al armario abro el cajón y todo está revuelto, mi ropa incluso y algunos papeles, comienzo a ponerme furiosa, agarro el maldito papel comienzo a leer, lo vuelvo a leer hay líneas que no entiendo, las leo más detinidamente, mi mandíbula se tensa, un odio comienza a fluir por mis venas, en ningún apartado pone que Yesvi me ayudará a traer a mi hija, tan solo que me da una buena suma de dinero a cambio de permanecer un año viviendo con el cumpliendo con las estipulaciones que el presenta.

Agarro un perfume y lo estrello contra la pared haciéndolo añiscos,- maldito seas Yesvi Nizar, maldito seas, todo este tiempo me ha estado engañando y yo como una imbécil, estúpida atolondrada me estado creyendo sus mentiras.

♥AMOR REGALADO, AMOR COMPRADO♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora