Capítulo,9.

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     Aunque parezca incierto los meses han pasado muy rápido, me estoy mirando en el espejo y veo el reflejo de mi rostro y cuerpo estoy mas cambiada, será por el embarazo, deseo poder ver la carita a mi bebé como será, pero se me parte el corazón de pensar que para darle una vida mejor tenga que estar separada de él de lo único mas hermoso que me a dado la vida, mis manos pasan una y otra vez por mi tripa, siento más molestias y dolor apenas puedo caminar de lo hinchadas que tengo las piernas, mi tía viene todos los días a verme trayéndome buenas noticias, eso me levanta mi autoestima pero sigo sintiendo el sufrimiento de dejar a mi hijo y marcharse sin el muy lejos, mis ojos se ponen rojos siento como me escuecen por esta maldita vida que tengo.

Rachid pasa, me mira me dice que me tape que tenemos que ir de visita, le contesto que apenas puedo moverme, me grita diciéndome cosas feas y con su mano ya alzada, se para en seco, saco mi cabeza de entre mis doloridos brazos, levanto mis ojos y me alegro que Ibrahim esté en la puerta.

- hola Nora que tal estas, como va mi primer nieto, da guerra, me pregunta mi suegro con una amabilidad, la que le falta a su hijo.

-bien Ibrahim, me encuentro cansada, pero bien hiba ahora a preparar la cena.

- no te preocupes tu relájate, descansa ya se está encargando Safe y Amina, les diré que te suban algo de comer.

- si claro padre, como si no tuviera piernas para bajar ella.

- Rachid, no as escuchado lo que he dicho?-le responde Ibrahim a su hijo en tono serio y alto sin apartar los ojos de mi.

- si padre, le escuchado.

- pues Nora se quedará en su habitación hasta que traiga al mundo a mi nieto, si le ocurre algo será culpa tuya, entendido Rachid.

- Si. De dos zancadas se va, pero no si antes echándome una mira de odio.

-gracias Ibrahim,.

- hija no me las des, te dije que te cuidaría y protegería del atontado de mi hijo.

Asiento con mi cabeza, me entra sueño decido echarme un rato.

Me encuentro profundamente, siento un olor fuerte abro mis ojos, en menos de un segundo Rachid me a cojido de mi cabello echándome la cabeza atrás, susurrandome al oído en tono de advertencia, que aunque me protega su padre no me lo crea tanto, cuando nazca su hijo volveré a mis que haceres, me suelta con tanta fuerta que mi cara acaba golpeándose contra el suelo, a continuación me agarra con sus sucias manos la cara y me la estruja metiéndome su lengua, acaba pegandome un empujón,  cada vez siento mas repugnancia, lo odio me da asco que me toque hasta que me mire.

Intento levantarme del suelo sintiendo un fuerte dolor  en mi tripa que hace que me doble, me sujeto a un mueble, como puedo llego hasta la puerta, gritando con todas mis fuerzas pido ayuda, sube Amina la pobre está muy nerviosa, detrás Ibrahim, el pobre al verme me dice que me lleva a un hospital, mi suegra se niega, él insiste pero al final acabo convenciéndole que llame a mi tía Naima.

Mi suegro sale en su busca, entre mi cuñada y mi suegra me ayudan a tumbarme, como no mi suegra dando órdenes, no se como la pobre de Amina la puede aguantar, es tan buena la pobre.

Los dolores van en aumento, siento que mi hijo ya viene de camino, hay mucha gente en la habitación pero solo mi cuñada me agarra de la mano pasándome paños fríos por mi frente yo le aprieto más su mano cada vez que me viene un dolor fuerte, según he leido a escondidas claro, son contracciones grito del dolor, de pronto siento la voz de mi tía y de la partera diciendo que sobra gente, y los echa a todos a fuera, solo quedan  Haya, Naima y Habiba.

No puedo soportar los dolores son muy fuertes, hago todo lo que me dice Habiba que empuje que ya ve la cabeza del bebé, con todas mis fuerzas empujo hasta que sale mi bebé, siento su llanto y sonrio cuando me lo ponen encima es una niña preciosa, la llamaré AMAL, que significa esperanza.

La miro la toco le beso su pequeña carita, mientras siento un fuerte dolor de tenerme que separme de ella, la envuelme en unos trapos y me ponen al otro niño un varón, es hermoso también pero no es mio, veo como Habiba trata de tranquilizarme mientras termina de coserme y curarme, las demás me lavan y ella se va antes de que empieze a pasar gente  llevándose a Amal.

Naima y Haya se quedan conmigo dándome ánimos, susurrándome que todo saldrá bien, siento como Habiba está hablando a fuera, tragándome mi sufrimiento pongo las mejores de mis sonrisas inventando una felicidad que no existe, pasan todos en pelotón, el primero Rachid que coje a su hijo en brazos y con su voz ronca, todo orgulloso enseña a su hijo.

Mis ojos se encuentran con los de mi tia, parece que todo a salido bien y no se an dado cuenta que ese niño ya tiene unos días de nacido, pero sin poderlo remediar suelto una lágrima de pensar que mis brazos están vacios, siento un pinchanzo en mi corazón porque me falta Amal mi verdadera hija.

♥AMOR REGALADO, AMOR COMPRADO♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora