Estaré A Tu Lado ( Yoongi Y Tu )

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Narra T/N

Más afectada de lo que pensaba, contemple cómo el Porsche negro desaparecía entre el tráfico. Había pasado toda la noche imaginando cómo me sentiría si volvía a encontrarme con Yoongi. Estuve ensayando frente al espejo sonrisas y saludos con gesto indiferente, para intentar disimular lo que se apoderaba de mi con solo pensar en él.

Rose me rodeó los hombros con el brazo, obligándome a caminar.

--Yoongi sigue aquí, ¿lo has visto? —pregunté tras tomar aliento Rose asintió—. ¿Qué sabes de la gente que estaba con él? —volvi a preguntar con curiosidad.

Ros: No mucho, los he visto un par de veces —respondió y guardó silencio sin intención de seguir hablando.

—¡Vamos, tú siempre lo sabes todo de todos! —exclame al cabo de unos segundos.

Ros: ¿Y desde cuándo te interesa a ti la vida de los demás? —replicó algo incómoda.

—¡Por favor! —rogue

Ros: Está bien. —Se rindió ante mi expresión suplicante—. Ya conoces a Taehyung — asinti— El que conducía el auto y el chico con el pelo castaño son sus sobrinos, creo que también tienen una sobrina pequeña, pero no estoy segura. Su padre es economista o algo así, y su madre piensa abrir una librería en el pueblo dentro de unos días. se mudaron aquí buscando un ambiente más tranquilo, y para estar cerca de su familia.

—¿Familia? —repiti

Ros: Sí, el chico más alto y la chica morena son sus sobrinos también, es hermano de su padre . Estos llevan aquí más tiempo, creo que vinieron en Navidad, pero no se les ve mucho. El chico es algo rarito y asusta un poco —dijo—, y de ella no tengo la menor idea —relató como si estuviera leyendo el artículo de un periódico.

—¿De dónde sacas toda esa información? —intervine impresionada.

Ros: Si pasaras tanto tiempo como yo en la consulta de mi padre, tendrías un máster en cotilleo. Te enteras de todo lo que pasa en el pueblo.

—¿Crees que Yoongi está aquí por esa chica morena? — volvi sobre el tema obsesivamente.

Ros: Tú misma lo dijiste, exótica y con piernas kilométricas —replicó. Guardó silencio unos instantes, intentando ignorar la expresión compungida que tenia—. Déjalo ya, ___, y no te mortifiques. Se te acabará pasando, siempre se acaba pasando —fue todo lo que consiguió decir antes de entrar en clase de Francés.

X: Señorita Park, señorita Jung, llegan tarde —se quejó el profesor desde la pizarra.

Ros: Lo sentimos, señor, ___ sufrió un pequeño…

X: Estoy al corriente, señorita Jung —interrumpió el profesor— Ocupen sus sitios, por favor. Bueno… ¿dónde estábamos?… Ah, sí, los grupos para el trabajo. Señor Kim, nos quedaba usted por emparejar, vamos a ver… —Consultó una lista que tenía sobre la mesa—. Park, Jung, ustedes trabajarán con él.

Pasé un mal rato tratando de concentrarme en la clase de Francés, no porque no supiera el tema que estaban dando, sino porque mi mente estuvo la mayor parte del tiempo recordando el encuentro con Yoongi . No conseguía apartarlo de mis pensamientos.

Cuando la clase terminó, todos abandonaron el aula en estampida, excepto Rose y yo, algo más lenta a causa de mi cojera. Salimos al pasillo y una voz chistó a nuestras espaldas.

Taehyung nos esperaba con los brazos cruzados sobre el pecho y la cadera despreocupadamente apoyada contra la pared. Se acercó hasta nosotras con paso seguro,me miró, estudió mi rostro, y después posó sus ojos en Rose con bastante interés.