IRRESISTIBLE ©️✔️

Capitulo 46

CAPITULO 46

Ellie

La miré fijamente por lo que parecieron unos largos segundos. Una sonrisa realmente maliciosa se había formado en su rostro.

Entendí todo de golpe. Parker no era el acosador, él solo era un peón del mismo. Mi papá también lo era. Tenía delante a la verdadera asesina de Zoe. En aquel momento quise desmayarme o algo así. No estaba preparada para tanto drama.

Entendí las miraditas furtivas que Alessia me había dado, sí, definitivamente me estaba diciendo que ella había matado a mi mejor amiga. Moví mis manos intentando desatarlas. No tenía ni la más mínima idea que como saldría de aquí y eso sin duda me preocupaba como la mierda. Pero de algo estaba segura, necesitaba ganar tiempo. Así que, pregunté:

― ¿Por qué haces esto?

La miré fijamente buscando algún rasgo de humanidad en su mirada. Sus ojos eran tan azules como el cielo, eran fríos, calculadores, sin una pizca de ninguna emoción. Eché un rápido vistazo a Enzo quien estaba mirando la escena complacido. Maldito, desgraciado.

― ¿Por qué no hacerlo? ―Fue su respuesta. En sus labios se formó una maliciosa sonrisa mientras elevaba ambas cejas y se cruzaba de brazos.

Reprimí el sollozo que amenazaba con salir de mis labios. No me mostraría débil delante de aquel monstruo. Mis manos estaban atadas con una especie de cadena, mis piernas igual. Tenía sangre alrededor de mis labios y rostro. Mi estado realmente era deprimente. Pero no me rendiría tan fácil. Esto apenas estaba comenzaba y Alessia muy pronto se daría cuenta de eso.

Miré nuevamente a mi lado donde aún, estaba en el suelo el cuerpo inmóvil de Elisa. Recordé lo sucedido minutos antes y no pude evitar sollozar. Posiblemente la habían violado y toda la sangre entre sus piernas era solamente un indicio de lo rústico que ese cerco había sido.

Gritos se escucharon al otro lado del lugar. Sabía lo que estaba sucediendo allí más sin embargo me obligué a mantener una expresión neutra. No le daría el gusto de verme asustada. Eso nunca. Estaba segura que Zoe no se mostró así, entonces yo no sería la excepción.

―Eres un monstruo.

La luz que entraba por la ventana le daba directo en el rostro a Alessia. Su cabello rubio estaba húmedo dándole un aire libre de preocupación. Sus labios se curvaron en una sonrisa mientras se inclinaba para quedar mucho más cerca de mí.

―Te encantan los monstruos. Tú eres uno.

Trague grueso y aparté la mirada de sus ojos. Ella tenía razón, era un monstruo. Era una persona sin escrúpulos. En un movimiento bastante rápido y ágil sostuvo mi rostro entre sus manos y me obligó a que nuestros ojos se encontraran nuevamente. Solo encontré crueldad en aquellos ojos azules.

― ¿Todo esto lo haces por ella?

La sonrisa del rostro de Alessia se borró quedando solo una mueca. Había dado en su punto débil. Más sin embargo ella rápidamente se recompuso y miró mis pechos expuestos, relamió sus labios, el deseo claro en su rostro.

―Te mataré.

Elevé la barbilla a modo de desafío, a estas alturas me importaba muy poco mi vida, así que sin una pizca de miedo dije:

―Hazlo...

Pero ella no lo hizo. Simplemente arrastró una silla que estaba a nuestro lado y tomó asiento. Cruzó sus piernas y me miró fijamente.

―Antes necesito que me digas unas cuantas cosas.

Una risa seca salió de mis labios. Estaba muy loca si pensaba que le daría alguna clase de información.