Datos ; Wos

Siete.

Siete:

Venus.

— Me duele la cabeza de tanto pensar.—Escuché a Valentín hablar en voz baja, sonreí y me apoyé en la mesa riendo un poco.

Estaba en su casa, ayudándolo con las materias que no entendía nada y mientras él hacía los ejercicios, yo lo miraba sin decir nada, observando sus movimientos y lo tierno que se veía concentrado con sus lentes de estudio.

— ¿Querés parar? Yo también me canse.—Hablé cerrando un ratito mis ojos y haciéndole un puchero para que diga que si.

— Si, por favor.—Abrí los ojos cuando me respondió y sonreí preparándome de la mesa.

— ¿Miramos una peli?—Pregunté subiendo una ceja y agarrándolo de la mano para que me siga hasta el sillón.

Últimamente era una acción que tenía muy seguido, agarrarlo de la mano o de la muñeca para llevarlo a algún lugar de la casa mientras él me seguía con la mirada en el piso.

— Mejor miremos los Simpsons o Gravity Falls, ¿Te gusta?—Preguntó atrás mio, sonreí y asentí con la cabeza rápidamente.

— Me encanta.

— Esta en Netflix, ¿La vemos?—Habló con una sonrisa en su cara, sonreí y me giré para mirarlo, su pelo estaba despeinado y seguía con los lentes puestos.

Lo tomé de las mejillas mirándolo a los ojos, me gustaba que cuando hacía algo así él me miraba con intriga y sin saber lo que iba a hacer yo. Dejé un beso en su nariz y asentí con la cabeza.

— Veni.—Lo llamé para que me siga hasta su sillón, me senté y esperé a que el prenda la tele así podíamos ver mis dibujitos preferidos.

— Venus...—Me llamó, lo miré y subí una ceja para que siga hablando.—Tengo Netflix en la pieza y, coso, no sé.—Habló tímido, trabándose en algunas palabras, me daba ternura verlo así, con miedo a que yo lo empiece a joder hasta que sus mejillas no den más de rojas.

— ¿Qué querés hacer en tu pieza?—Subí y bajé las cejas con diversión mirando lo rojo que se ponía, negó con la cabeza y yo largue una carcajada.—Bueno Valen, si querías hacerme algo no hace falta que metas como excusa Netflix.—Seguí jugando, largó un quejido y bajó la mirada cuando no pudo esconder más lo tímido que se había puesto.

— N-no Venus.—Habló negando con la cabeza ligeramente y apretando sus labios.—Basta no me hagas esto.—Se quejó acomodando sus lentes nervioso y largó un suspiro.

Me reí parándome del sillón y caminé hasta llegar a él y mientras me seguía riendo lo agarré de las mejillas, fijándome en lo rojas que estaban. Sonreí divertida cuando se quiso liberar de mi agarre así no lo veía.

— Eu...—Pronuncie riendo un poco, dejé un beso en la punta de su nariz así se calmaba, al parecer funcionó porque sus ojos azules me miraron, aunque sus mejillas estaban igual de rojas que recién, tal vez un poco mas.—Pero si me duermo no es mi culpa.—Hablé para hacerlo reír.

Largó una risita y asintió con la cabeza mientras largaba un suspiro.

Saqué mis manos de sus mejillas y lo seguí cuando el empezó a caminar hasta su pieza, subimos las escaleras y entramos por una puerta que estaba pintada de un color azul llamativo.

— Em... si queres prende la tele y acomodate, yo voy a buscar algo para comer.—Me habló cuando ya estábamos en su pieza, sonreí y asentí con la cabeza.

Me quedé mirando toda su habitación, parecía demasiado oscura y las paredes eran casi negras, aunque entre luz por la ventana no cambiaba mucho la diferencia, pero me gustaba, además había olor a perfume de hombre, de Valentín, y eso me daban ganas de quedarme mucho tiempo acá.

Prendí la tele cuando dejé de curiosear, puse Netflix y cerré las cortinas así no molestaba la luz, a mi también me gustaba la oscuridad, aunque solamente cuando estaba acompañada de alguien porque sino era re cagona para esas cosas. Me senté en la cama, y al notar que era demasiado cómoda me tiré de espaldas. Fua Valentín tenía terrible cama.

— Hice sanguchitos y me di cuenta de que no te pregunté si eras vegana o comías carne, perdón si queres te preparo otra cosa o compramos algo...—La voz de Valentín hablando medio rápido y nervioso hizo que lo mire y sonría con ternura.

— No Valen, esta bien.—Hablé con voz suave, sonrió y asintió con la cabeza un poco aliviado.—Veni tonto.—Me reí cuando se quedó parado sin saber que hacer.

Volvió a asentir con la cabeza caminando hacía la cama y recién me di cuenta que tenía una bandeja con sanguchitos y dos vasos de chocolatada. La apoyó en el colchón y cuando se sentó miró la comida, después a mi.

— ¿Te gusta la leche? Es que hice chocolatada.—Habló haciendo una mueca, entonces me di cuenta de que era super inseguro en algunas cosas.

Lo quedé mirando con una sonrisa en la cara al darme cuenta en lo mal que había sonado su pregunta, al menos para mi que tenía la mente súper chancha.

— Mmm... si me gusta la leche.—Hablé mordiendo mi labio y en un tono medio sexual.

Divertida por la situación, me reí.

Sonreí cuando de quedó pensando en algo con el ceño fruncido y después sus mejillas empezaron a ponerse rojas cuando se iba dando cuenta a lo que me refería. Acomodó su pelo nervioso y miró para abajo, escondiendo sus mejillas.

— Y-yo me refería a esta leche.—Susurró en un tono súper bajo y nervioso, sonreí todavía más.

— ¿De qué otra leche estaríamos hablando Valen? Sos un atrevido que mal piensa todo.—Lo jodí riendo un poco, se pasó otra vez la mano por el pelo y negó con la cabeza intentando calmarse.

— Basta.—Se quejó mirándome todo rojito, lo miré con una sonrisa en la cara y al darme cuenta de que se quería reír, le piqué la cara con un dedo.

— Ah y si querés reirte.—Dije subiendo las cejas, mordió su labio y sonrió aguantando su risa.—Dale, bobo, reite.—Le piqué mas la cara.

Y esta vez si logré una carcajada de su parte, se río por un ratito mientras yo contemplaba el sonido de su risa y lo miraba con una sonrisa.

— No se puede hablar serio con vos Venus.—Dijo después de reírse, con una sonrisa que delataba que segundos antes se río.

— Es que me gusta molestarte y verte rojo.

🌸🌸🌸
es re densa Venus

editado: perdón pero me olvidé de decirles q subí una nueva historia jeje :) me re gusta, se llama 24 horas y va a estar muy buena 💗