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Nos fuimos sin esperar respuesta agarrando camino a la hacienda donde sería la gran fiesta.
Luego de minutos cantando y tomando bebidas preparadas llegamos al lugar.
Varias camionetas ya estaban ahí lo que indicaba que los invitados habían llegado ya.
Los muchachos se bajaron, nos ayudaron a bajarnos y entramos los cuarto como perras empoderadas.
Los hombres nos veían con deseo, y las morras con envidia.
Agh es lo que no me gusta de esto, los narquillos siempre se traen a su viejas de esquina y nada más viene a hacer el riduculo frente a todos creyéndose la mera verga. Weeey nosotros somos la mera verga que les pasa jajaj.
Caminamos hasta la mesa principal, donde se sientan los lideres del cartel de Tijuana, los del cartel de Juárez (o sea nosotros) los de Sonora que en esta ocasión no habían venido pues se encontraban en Italia arreglando un pedo o algo así. Y pues obviamente el cartel de Sinaloa.
Era tradición que todos los años nos sentáramos juntos, pero esta vez no tenía ganas de pelear ni verles la cara a las morras ni a Cornelio así que les dije a los hermanos Guzmán que si podíamos sentarnos solo nosotros, a lo que sin pensarlo rápidamente accedieron.
-Ahora si Gala Amapola Casillas Mendoza, ¿que se trae uste con el Vega ese eh?.-me pregunto Alfredo
Me puse nerviosa y seguramente roja
-eh mmh nada, no pasa nada.-respondí y me reí poco.
-no te hagas te conocemos desde que tienes  10 años, cuando llegaron y las abrazarnos parecía que nos quería volar la cabeza, luego cuando nos saludo tenía marcas de uñas en sus manos, así como le haces tu.-levantó mi mano girándola dejando ver mis recientes marcas de uñas postizas clavadas en mi piel.-Y luego cuando Aurelio nos presentó a la cara de chango aquella y dijo que era su novia en tu carita chula se notó el agüite. Confía en nosotros.- me dijo.
Suspire pesadamente
No tenía caso mentirles pues tarde o temprano terminarían sacándome la sopa, así que preferí ir contándolo ya.
-Hace unos meses Vega se quedó en mi casa porque como saben había muchos pedos en ese entonces en Obregón, y se supone que sus hermanos se quedarían también pero al ser menores la Señora Luna prefirió que se fueran lejos por un tiempo, y no se donde están, lo único que se es que Cornelio se negó y como es el próximo heredero de todo era mejor que desde Juarez controlara todo a la vez que se mantenía en un perfil bajo. El primer día que estuvo ahí, nosotros pues.. mnm..-no encontraba la palabra para decirlo.
-Hicieron el delicioso.-completo la frase Alfredo haciéndonos reír a todo provocando que de todas las mesas nos voltearan a ver.
-Si pues, tuvimos relaciones y al día siguiente escuché como hablaba con un vato de que estaba bien buena y que iba a terminar rendida a sus pies y bla bla...-Cuando dije eso sus caras se encendieron y estaban apunto de pararse a hacerla de pedo pero los pare.
-todavía no termino de hablar mbeeeee.-renegué haciendo que se sentaran otra vez
-Entonces decidí hacer una venganza para ver quien termina hasta los huesos por quien, y empezamos con un juego de sedúceme te seduzco te dejo caliente y así un buen rato hasta que...-dude en decirles lo que había sucedido después pues los conocía y no quería mas pedos ahorita.
-¿y después que Amapola?.-pregunto Iván.
Volví a suspirar y conté lo qué pasó aquella noche
-Pero una noche, mmmh, estaba en mi cuarto cuando sentí como alguien tapaba mi boca y comenzaba a forcejaren para violarme, intente defenderme como me enseñaron, lo sofoqué pero después me hizo oler un paño con una sustancia que no conocía pero me hizo perder el control de mi cuerpo. Estaba consciente pero no podía moverme, solo podía gritar. Aquel viejo se me encimó y empezó a arrancarme la ropa y lastimarme hasta que.-cerré los ojos con fuerza al recordarlo.
-Entonces recordé aquella vez, cuando mataron a Doña Ximena y yo entré en una especie de shock, entre el miedo y la desesperación, y luego caí desmayada.-mis ojos me ardían por las lágrimas.
Abrí los ojos y los mire hechos furia, nunca los había visto tan enojados desde la vez que mataron a Ximena.
-¿Quienes eran?.-pregunto con voz dura Alfredo
-No supimos de quien era gente, después de eso desperté en una camioneta con Vega, el me había salvado, y a partir de ahí nos hicimos más y más cercanos, me olvidé de ese estúpido plan de venganza y creo que a partir de ahí comenzó a gustarme.-mencioné con pena, pero ya no me prestaban atención, seguían pensando en el viejo aquel.
-Vega y yo los matamos a todos, bueno supongo que ese ya debe de estar muerto, ¿cuanto puede durar una persona sangrando y sin comer?.-pregunte con la intención de que se rieran un poco, y funcionó
-¿Porque no nos lo dijiste antes?.-pregunto Iván ahora
-porque los conozco y sabría como se pondrían, y por primera vez quería cobrar venganza  por mi propia mano, y así lo hice. 
-Un día desperté y estaba la vieja operada sentada en la silla de Doña Ximena y no hay nada que me emperre más que ver a alguien con sus cosas. Entonces la enfrente y Don Aurelio me golpeó y luego corrí a brazos del indio perro para sentirme más segura, según.-me reí con tristeza, hasta ahora comenzaba a darme cuenta de que sí me dolía.
-Y lo vi con la cara de chango, y pues desde ahí no me llevo muy bien con ellos, y me acaban de hacer darme cuenta que de si me gusta aquel perro infeliz.-terminé de hablar
Vaya, que gran capítulo de la Rosa de Guadalupe jajajaj
-Estas pero jodida Amapola.-dijeron a la vez JAJAJA ME CAGA DE MIEDO QUE HAGAN ESO

La Barbie [Cornelio Vega] TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora