-Levántate.-escuché como me dijeron
Inmediatamente abrí los ojos sentándome en la cama tratando de procesar información.
Cuando estuve bien despierta mire a quien me había hablado, era otro hombre que no conocía.
-Que bonitas piernas tienes plebe.-me dijo acercándose a mi clavando su mirada en mis piernas.
-aléjate.-le dije levantándome de la cama intentando estar lo más lejos posible de él.
-No creo mamacita, estuvimos esperando mucho para que esto sucediera y nos vamos a quitar el antojo.- dijo acercándose a mi, camine hacia atrás hasta quedar pegada a la pared.
No espero mucho y se pego a mi besando mi cuello
-ALÉJATE.-le grite entre llantos
No hacía nada más que llorar
No me hizo caso así que junté todas las fuerzas que me quedaron y con mi rodilla golpeé su miembro haciendo que quedara arrodillado en el piso quejándose del dolor.
-de esta no te escapas pequeña zorrita.-dijo parándose
Después llegó Leonardo, el muchacho que me amordazó la última vez en la bodega seguramente alertado por los gritos.
Me miro llorando y a él gordo tocándose su parte con cara de dolor y supongo que imagino lo que acaba de suceder.
Camino a él y lo noqueó de un golpe en la mandíbula haciendo que se cayera al suelo.
-¿estas bien?.- me pregunto acercándose a mi
Negué con la cabeza tratando de evitar que las lágrimas salieran de nuevo.
El me miraba apenado y con lastima, me veía fatal.
-ayúdame a salir de aquí por favor.-le susurre bajito, sentía como si las paredes escucharan.
-No puedo hacerlo, me descubrirán.-me dijo quedando frente a mi
-por favor.-le dije
-por favor.-repetí arrodillándome a sus pies para suplicarle.
-párate.-me dijo.
Me paré lentamente, vi como levanto su camiseta dejando a la vista su pistola, la saco de su cintura y la cargó
-disparame.- me dijo dándome la
-¿eh?.- dije confundida.
-Vega no está, y se que puedes con los hombres de aquí, confío en ti.-me dijo extendiendo su mano para que la agarrar.
-Pero...-No me dejo terminar
-Pero nada, yo veré como me las arreglo, disparame y diré que me escapaste, y para cuando Vega llegue tu ya estarán lejos. Afuera está mi camioneta, llévatela.-dijo dándome las llaves también.
-Pero tu...-iba a volver a hablar pero me interrumpió de nuevo.
-Yo estaré bien, ahora tu, corre.-me dijo poniéndose la pistola que tenía en la mano en su muslo y con mi temblorosa mano dispare haciendo que cayera al suelo
-CORREEEE.- me grito
Vi la puerta abierta y no dude en salir corriendo, no conocía esta casa así que no sabía a donde iba, corrí y corrí hasta que sin quererlo tropecé haciéndome caer por las escaleras, cayendo en los pies de una persona.
-Mira nada más que tenemos aquí, ¿acaso pensabas escapar, mi amor?.-escuché su voz
-CONTESTAME.-me grito pateando con fuerza mi abdomen.
Al momento que me golpeó sentí como algo dentro se desprendía.
Después empecé a sentir como por mis piernas corría sangre como si me hubiera echo pipí.
-AYÚDAME.-le grite sollozando del dolor.
Mi grito alertó a la señora que me había subido las pastillas quien al verme tirada sangrando corrió hasta mi y se arrodilló metiéndose entre mis piernas.
La sangre que salía era demasiada, y el dolor lo era también, me sentía débil y sabía que caería inconsciente cuando menos lo esperara.
-Joven, esta niña a sufrido un aborto.-fue lo último que escuché antes de caer desmayada.
(...)
Me desperté otra vez en el cuarto donde anteriormente había estado, traía una pijama nueva y mi estómago dolía muchísimo.
Me senté con cuidado quejándome del dolor que sentía en mi parte baja, había perdido ya la noción del tiempo, las ventanas estaban cubiertas por unas pesadas cortinas negras así que no tenía idea si era de día, o era de noche.
Mi cabeza punzaba y mis ojos ardían de tanto haber llorado.
Me iba a parar cuando escuché como abrieron la puerta, y entro Cornelio con un plato con comida.
Inmediatamente me hice bolita en la cama tratando de mantenerme lo más alejado que podía de él, y al parecer se dio cuenta porque dejo el plato que tenía en el buró y camino con pasos lentos hacia mi.
Ahora su cara estaba más blanda, ya no tenía esa mirada de odio, pero aún asustaba.
-tranquila, no te haré daño, ya no más.-me dijo sentándose a los pies de la cama.
Quito la cobija con la que me estaba cubriendo y acaricio mis piernas lentamente.
-¿Por qué no me lo dijiste?.-me pregunto suavemente, hasta me sorprendí con el tan calmado tono d e voz que me habló.
-¿Decirte qué?.-le conteste en voz bajita
-Que estabas embarazada.-me dijo tomándome de sorpresa.
ESTÁS LEYENDO
La Barbie [Cornelio Vega] TERMINADA
Fanfictionp r i m e r a t e m p o r a d a Desde niña conoció las armas Desde niña miraba a su padre siempre lista pa accionar Buena pa las cosas de la mafia Forma parte de una aristocracia Con orgullo porta el apellido de Casillas le heredo Tiene act...