No sabía si estaba de broma, o de verdad pensaba que eso me iba a contentar.
- Dante no me voy a quedar a dormir aquí - le dije dejándome caer en la cama, si que era suave, tenía que admitir que la habitación era hermosa, como un mini palacio, ahora que lo pensaba estaba agotado y quería dormir.
- no es para tanto, piensa en ellos como maquinas, no sienten nada - me dijo acercándose y acariciándome la cabeza con cierta ternura - mi amor, dormiremos estos días los dos en el mismo cuarto, no tienes que temer.
¿Mi amor? Eso hizo latir rápido mi corazón, yo lo abrace y acomode mi cabeza en su vientre, claro que me había convencido, una cosa era que yo me pasara su cuarto de vez en vez y otra que durmieramos como si fuéramos pareja.
- te estaba manipulando - me dijo Diego cruzándose de brazos.
- si, lo hacía, era un manipulador implacable, pero lo hacía por que de verdad quería que me quedara - le dije haciendo que arrugada la cara de nuevo, Diego me haría una recriminación.
- ¿qué te gusta en un persona? - le preguntó con un reproche en la mirada.
- ¿de que hablas?
- dejando aún lado el físico, por que si, aunque debo admitir que el hombre no es feo, que tiene buena apariencia, según lo que me cuentas has tenido mejores, tan solo Paul, entonces no es su apariencia.
- ¿a donde quieres llegar?
- estamos hablando de un hombre que se hizo pasar por tu amigo y logro que le contaras tu pasado, tus traumas y los uso en tu contra para meterse en tu cabeza, ¿qué te enamoro de él? - sabía que hablaba mas su resentimiento, yo había descrito un intenso amor por Dante, y de seguro no entendía por que, a decir verdad tenía un poco de razón, pero yo también era un oportunista, así que no me podía quejar, sacar ventaja de la debilidad del otro, sólo me había visto superado por un ser mas maquiavélico.
- explicártelo, es tanto como preguntarte, por que me amabas cuando yo te maltrataba y por que volviste conmigo después de haberte expuesto en un vídeo, casi te matan por mi culpa, ¿podrías responderme?
Diego callo y ladeó la cabeza, sabía que era mi entrada para seguir con la historia.
Dormimos juntos, tenerlo a mi lado, casi no me molestaba los ruidos que habían por los pasillos, sabía que eran esos seres así me sentía en un película de terror, ma abrace a Dante y me dormí, me gustaba su cuerpo entre mis brazos.
Me desperté con los pájaros en la mañana, tenía que admitir que era un lugar precioso, ¿como sería vivir ahí? Sin muertos, de manera normal.
Por la puerta entró la avispa con una bandeja de comida que puso en mis rodillas.
- ¿esto lo preparo un zombie? - le pregunte con asco, por que ya me había llevado un pedazo de fruta a la boca.
- lo preparé yo, creí que te daría asco lo otro - se veía mejor cuando usaba ropa informal, parecía mas joven y mas relajado - quiero mostrarte el castillo - me dijo
Me duche y tenía razón el baño era fabuloso, pero todo se enturbió cuando salí y vi a una de esas cosas puliendo los marcos de las pinturas.
- ¡no me agradan esas cosas! - me quejo
- tranquilo, silo ignorarlos - me dijo abrazándome por la espalda, tenía esa colonia que me encantaba.
ESTÁS LEYENDO
Detrás de tu rostro
ParanormalAkira Ayamo esta establecido en Inglaterra, ve pasar su vida inmortal aburrido hasta que conoce a un hombre que fisicamente es insignificante pero que oculta un secreto y una personalidad muy distinta. "Todo hombre es como la Luna: con una cara oscu...