Me sentía extasiado, tener a Altaïr en mis brazos se sentía rico, tenia un cuerpo deseable, su piel olía también o era el agua de la alberca, quería hacerlo mio, quería recostarlo contra una pared y partirlo en dos, mis dedos se metían entre sus nalgas.
- ¡separense en este instante! - nos grito Dante al pie de la piscina, estaba furioso, yo me sentí como a quien descubren engañando a su pareja, yo le quite las manos de encima a Altaïr pero él no me las quitó a mi, me siguió abrazando con fuerza, y pegándose a mi.
- ¿por que no te largas? ¿no ves que estamos ocupados? - le dice retándolo
- sabes perfectamente que puedo verte desde mi habitación, salte de ahí, ¡no me desafies! - esto se iba a poner feo, fui yo quien se apartó y salió del agua.
No iba a enfrentarme a Dante por un acoston sin importar que tan hermoso fuera Altaïr, llegue al la habitación seguido por Dante que estaba echando chispas.
- mañana en la tarde nos vamos - me dijo de manera sería mientras sacaba algunas cosas del cuarto
- ¿a donde vas? - le preguntó, de verlo tan enojado se me paso la borrachera.
- voy a dormir en otro lado - me dijo dándome un empujón para salir
- ¡amor por favor! - le digo abrazándolo, sobre todo no quería dormir solo en ese castillo, sentía que me estaban abandonando por infiel, aunque entre él y yo no había nada.
- si quieres que me calme mas te vale que me dejes solo - me lo dijo sin levantar la voz, recuerdas que te dije que cuando Dante estaba realmente peligroso y con instinto asesino era cuando te dabas cuenta que se portaba tranquilo, si lo toreaba mas iba a salir lastimado, me aparte y lo deje salir.
Recoste mi cabeza en la puerta y escuche los pasos apresurados, al parecer en el pasillo.
- ¿estas feliz? - le reclamó la voz de Dante
- ¿muy celoso? - le responde de manera retadora.
Me asomó brevemente entre abriendo la puerta, ellos discuten un buen rato.
- ni siquiera te gusta, solo lo haces para molestarme - arremetió la avispa
- pues ya vi por que lo metiste en tu cama no lo hace nada mal - le respondió retándolo mas, veo que Dante tiene ganas de abofetearlo
- apartate de él - le advierte
- no puedes decirme que hacer ya soy adulto, ¿o es que crees que es la primera vez que cogemos? - le responde de manera cínica haciendo que su padre le de la bofetada que le quería dar hace un rato, Altaïr miente, no llegue hacerle mucho, veo como el rubio agacha por un momento la cabeza, su labio inferior tiembla por la ira.
- ¿por que lo trajiste? - le preguntó con la voz quebrada y con un deje de reproche en la voz.
- quería que viera el castillo - le dijo Dante bajando la guardia un poco.
- ¡no me avisaste que venias! ¡y encima lo traes! - le reclamó dando la sensación de que quiere llorar, y entonces lo entendí, ellos no se estaban peleando por mi, eso hizo que se me bajara el ego.
- ¿enserio? - me preguntó Diego alzando una ceja
- dos tipos interesantes, se estaban peleando por mi.
Pero resulta que no era así, el único que estaba siendo peleado ahí era Dante, según lo que había visto antes la avispa lo evitaba, no lo culpo, el chico era insoportable, me había dicho que pocas veces iba al castillo, y cuando lo hacia era por poco tiempo, esta vez Dante no solo se iba a quedar por tres días, si no que no le aviso sabiendo que no estaría, se perdió día y medio con su papá y para rematar me lleva con él para quitarle mas tiempo, me di cuenta de lo que realmente quería Altaïr, él quería a su papi.
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Detrás de tu rostro
ParanormalAkira Ayamo esta establecido en Inglaterra, ve pasar su vida inmortal aburrido hasta que conoce a un hombre que fisicamente es insignificante pero que oculta un secreto y una personalidad muy distinta. "Todo hombre es como la Luna: con una cara oscu...