Detrás de tu rostro

La avispa esmeralda

La avispa esmeralda, clava su aguijón en la cucaracha y su veneno provoca parálisis en esta, cuando es un zombi, el insecto queda en una especie de estado vegetativo, caminando lentamente, sin comer, sin reflejos y sin autonomía propia. Es guiada al nido de la avispa, otro proceso comienza, la avispa pone un huevo en el interior del insecto. Y de el sale una larva que crece y vive alimentándose de los órganos internos de la cucaracha, causándole a ésta una muerte lenta.

Me interese en ese animal por lo que me dijo Dante, me iba a quedar toda una semana, me hubiera quedado gustoso a vivir ahí, pero los espíritus aun estaban alborotados o eso pensé.

Me puse a investigar en los libros sobre seres come hombres, encontré varios, pero ninguno que se ajustara a Dante, estaba el wendigo pero estos tenían una apariencia demoniaca, y no tenían la facultad de cambiar de forma, los ghoul eran seres mostrosos, andaban en cementerios y demás, la verdad estaba en blanco, y algo me decía que no debía decirle de Dante a Hayate, además era confuso, el decía ser mas viejo de lo que era su cuerpo, no sabía si estaba frente a un caso de posesión, sabía que el no mentía por el anillo.

- Hayate, ¿los seres que comen humanos son necesariamente malos? Es decir algunos animales en algún momento lo han hecho.

- en mi experiencia esas criaturas son peligrosas y con poco razonamiento, ¿pero por que sigues con eso?

- solo curiosidad - él me miro raro, ahora iba a estar pendiente, él a veces era un poco metiche, pero algo en mi se agradaba con que alguien se preocupara.

Me quede casi una semana, quería quedarme mas tiempo pero ese día tuve una pesadilla, con ese niño de oscuridad, nunca había soñado con él, fue muy real, abrí los ojos y lo vi mirando por la ventana con sus ojos muertos, no me podía mover, lo peor es cuando abrió la ventana y se fue montando sobre mi.

- puedes seguir viviendo sin uno de tus dedos - me dijo con su voz aguda y tétrica, tomo mi mano y se metió en la boca el dedo donde llevo el anillo y mordió, desperté agitado y lleno de sudor.

De inmediato me sentí afiebrado y un terrible malestar se apoderó de mi, el sopor me hacía cerrar los ojos y me quede inconciente, podía solo sentir las cosas levemente, Hayate poniéndome paños de agua fría para bajarme la fiebre, hace tiempo que no me enfermaba, pero era agradable que te cuidaran, no desperté en un día y medio.

- tenías mucha calentura - me dijo dándome una sopa

- gracias, creo que es mejor que me vaya, ¿Hayate?

- si

- ¿qué sabes de los nigromantes?

- son seres detestables, toda la magia negra lo es, pero a ellos no los quieren ni en su gremio, les llaman carroñeros, son magos profanos que van contra el orden natural de las cosas, recuerda que por uno es que tenemos esas joyas, que a veces traen mas maldición que otra cosa - hizo una pausa y me miro de manera intensa - nunca tengas tratos con uno, deberías leer "el imperio de los nigromantes" de clark ashton smith para que veas por que son tan repudiados.

Mejor no le hablaba de Dante, me fui temprano al día siguiente, al llegar Andy se me lanzo, me había extrañado, pensé en como me acercaria a Dante, no quería pensar que lo había lastimado de alguna forma, y esperando se me pasaron mas días, total fue un mes, creí que podía ser gracioso llevarle un ramo de rosas rojas. Pero sabía cuanto odiaba ese color, tal vez lo notara como agresión, me decidí por capturar unas avispas esmeraldas y meterlas en un frasco, pero no me iba a visitar si yo no lo buscaba.

- ¿no te importaba que comiera humanos de esa forma? - me preguntó incredulo

- es que... pues... la avispa esmeralda, ella se reproduce de una manera muy cruel, pero es instintivo, ella no lo decidio, busque ejemplo en otros animales, aveces la naturaleza puede ser cruel, bacterias come carne, parásitos asesinos etc.