Detrás de tu rostro

Virgen

Se tocaba mucho el vientre, va pasando de los 5 meses, ya usa ropa holgada, se que se va a enojar cuando lo vea pero de verdad quería que viniera.

Se hallaba ocupado en el computador, había vuelto a llamar el médico de porra.

- no me gusta que te miren por la calle - le digo frunciendo el seño - deberías volver a vestirte de idiota

Tocaron a la puerta y el supo de inmediato de quien se trataba por que me miro mal.

Hace tiempo no lo veía así que lo apreté con fuerza cuando lo vi, él me correspondió.

- te extrañe papá - me dijo Ángel entrando, mi hijo se arroja a mis  brazos y yo lo estrecho, no importa la edad que tenga, ellos son mis bebes, puedo ver a Dante fulminandome con la mirada no le hace nada de gracia que tenga trato con mi antigua vida y me lo dejo claro cuando empezamos esto, Ángel se separa de mi pero no parece molesto, se que mi hijo mediano es mas racional y menos dado a dejarse llevar, mira a Dante con curiosidad pero jamás lo ha visto así que no lo reconoce.

- él es...

- Paolo Vilichi - se presenta la avispa dando un nombre falso, Ángel es cordial y Dante también le sonríe eso significa peligro, no esta contento pero es incapaz de dar una expresión sincera y eso lo hace a veces imposible de leer.

Preparo algo para almorzar, comemos en la mesa y le pregunto a mi hijo como están las cosas en su trabajo, me menciona algunas cosas de las que entiendo poco, pero la avispa si y dentro de poco estaban hablando de una manera suelta, se ponían a debatir sobre experimentos y sus connotaciones morales, los empecé a ver hablar, no me había dado cuenta de que tienen un ligero parecido en el modo de hablar, por lo menos como era Ángel antes.

Mi hijo se va a quedar un par de días, Dante fue un dulce completo con él, eso lo hace cuando esta mas enojado que nunca, al anochecer duró una hora hablando con el pordiosero y su hijos.

- todo bien - le digo refiriéndome a si esta cómodo

- claro - dio por terminada la llamada y me llamó para que me sentara a su lado - papá yo entiendo que las cosas se terminan pero lo que mama nos contó de como sucedió..., ¿era necesario ser tan brusco? - se que no lo entiende, nadie lo entiende, pensé en callarme pero decidí desahogarme con mi hijo.

- por que no le dijiste a mamá eso, estoy seguro de que hubiera entendido...

- se que él me habría esperado no quería eso, el anillo me dejo en claro que no me quería cerca

- ¿aun sientes eso? ¿cuanto mas lo sentirás? Es decir, él aun piensa en ti y te llora - siento un nudo en la garganta, no quiero hacerlo sufrir, se que Ángel me lo dice para que vuelva con Diego, se que me perdonara si vuelvo ahora, aunque parezca pedante de que el grado de dependencia que tenía de mi.

- todavía lo siento pero aunque no fuera así tengo una responsabilidad con... Paolo, esta... embarazado - le confieso haciendo que descomponga la cara cuando se da cuenta de la situación, por que podría dejar a Dante por Diego pero no a mis hijos, aun si los pudiera ver cuando quisiera eso no lo es lo ideal quiero estar con ellos siempre a cada paso y es evidente que la avispa no va a renunciar a ellos para que yo me los lleve con mi ex, y lo entiendo ninguna madre lo haría.

- tu...

- no, no deje a tu madre por él, lo conocí cuando llegue aquí

- no pensé que tuvieran algo, es que no me lo presentaste como nada, ¿cuanto tiene?

- 5 meses y un poco mas - me hace una mueca indicándome que no pierdo el tiempo, luego suspira - te dejo para que descanses.

Pongo un escudo en la puerta de mi hijo, que insólito que deba proteger a mi hijo, de la futura madre de sus hermanos.