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13 de diciembre del 2018

Shannel

Venezuela. País del pana y las arepas. Sus hermosas playas y ciudades, campos verdes y frondosos, las montañas tintadas de nieve blanca con un frío abrasador. Esa Venezuela que tanto extraño desde que la dejé hace dos años y medio. Eso sin contar todo lo que extrañe a mi pesada y empalagosa familia.
Tanto tiempo a pasado desde que los abrace que todavía no puedo creer que este empacando para viajar rumbo a Mérida.

—¿Cuál, el verde o el negro?__ pongo al frente la pantalla los dos abrigos sin saber cuál elegir.

—Umm... El negro sin duda__ se decide Amber. Menos mal y ella me ayuda a empacar desde la tablet por videochat, sino sería una indecisión por mi parte.__ Sabes, todavía no puedo creer que vayan a venir. Los extraño mucho no es lo mismo sin ustedes__ hace un puchero que me causa gracia así que me río en su cara virtual__ ¡No te rías Shann'!

— Ya, ya, perdón. Es que me da risa cuando intentas ser adorable__ me carcajeó al igual que Amber ya que esa es una de las cosas que tenemos en común. No servimos para ser tiernas

—Lo sé. No me combina, o eso es lo que dice Diego__ se encoje de hombros sin quitar su sonrisa.

Frunso el ceño sin entender.

—¿Quien es Diego?

—¿Qué?__ pregunta acomodándose un mechón de cabello.

Umm… Esta nerviosa. Mal inició) sospecha Pepe grillo rascándose lentamente la barbilla.

—¿Qué quien es Diego, Amber?__vuelvo a preguntar, pero la rubia se queda callada__ Amber…

Meto presión esperando a que hable.

—Diego... Es mi nuevo vecino, se acaba de mudar de Apuré__ casi que susurra sin mirarme a los ojos__ O mira también empaca gorros ¿ No crees?

( En serio que es pésima para cambiar temas) bufa riéndose del pobre intento de la rubia.

—Están saliendo ¿verdad?__ no tengo duda.

— ¿Quienes?

— No te hagas la loca, Amber. Tú y el llanero están saliendo o acostándose, así que responde o yo misma me averiguó__ la amenazo sin pelos en la lengua. Escucho como suspira; y yo ruego a Dios, a la virgen María o cualquiera de los toches santos a que me este equivocando.

—Bueno… Puede ser que hemos salido un par de veces.

—¡No!__ exclamo sin poder contener la decepción.m.

—¿Por qué no?

—Porque no y punto. Tú no puedes salir con él__ la señalo acusándola

—¿Por qué?

—Porque estas enamorada de Edward…

—Ay. Shannel__ suspira dramáticamente y yo me pongo aún mas nerviosa.

¿¡Qué coño hiciste, Edward ?!

—¿Sigues queriendo a Edward?

Cruzó los dedos rezando a cupido para que haga su magia y diga que si.

—Sí. Obvio que sí__ siento que vuelvo a respirar__ Todavía lo quiero y no sabes cuanto. Pero ya me canse. Me harte de perseguirlo y que él pase de mi. Dos años Shannel, dos años y medio enamorada de alguien que no me corresponde; siempre trate de guardar esperanza de que algún día me miraría no solo como su amiga. Pero nunca paso y… Derrepente llega Diego, me trata bien, se fija en mi, me invita a salir, yo le gusto, él me gusta y porque no intentarlo. ¿Por qué no dejar el masoquismo y darle una recompensa a mi corazón?

Hoja En BlancoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora