Ghost Drivers "Dioses de la muerte"

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"El dolor te hará más fuerte, la traición más inteligente, las desiluciones te harán hábil y cada experiencia más sabio"

Abrió los ojos lentamente y gruñó, le dolía todo el cuerpo, se retorció y volvió a cerrarlos.

-¿Baekhyun?.

Se arrastró y parpadeó lentamente, tenía la boca seca y los músculos entumecidos, se removió y levantó un poco la cabeza.

Apretó los dientes y movió los brazos, sentía el cuerpo pesado como si estuviese arrastrando un saco lleno de piedras con cada movimiento.

Abrió los ojos una vez más, parpadeando repetidamente para poder enfocar la vista, esperó unos segundos y sonrió leve hacia Chanyeol, el lobo no se veía mucho mejor que él.

Se pasó la lengua por los labios y suspiró, sentía la boca tan seca que bien su lengua podría convertirse en una lija, suspiró y se arrastró hasta quedar sentado, se llevó la mano a la frente y soltó un poco de aire, estaba sudando y tenía calor por lo que lo que fuese que llevase el dardo era fuerte, lo suficiente para incapacitarlo un par de horas.

-¿Cuánto tiempo llevo inconsciente?.

-No lo sé, desperté un par de horas antes, pero estoy seguro de que hemos dormido un buen rato.

Asintió y miró alrededor, estaban en una celda, parecía antigua, los barrotes habían comenzado a oxidarse y olía a humedad.

-¿Dónde?...¿Sabes dónde estamos?.

Chanyeol miró alrededor y negó. -No sé exactamente dónde estamos, pero seguimos en el complejo, si algo aprendí de Shin es que le gusta tener cerca a sus presas por lo que estaremos en alguna sala que yo no conozca.

Asintió e intentó incorporarse, Chanyeol nego y lo señaló.

-Yo de ti intentaría esperar un poco, lo que nos inyectaron es algo fuerte, espera y recobrarás un poco las fuerzas.

Bufó y se sentó, no podía creer que había sido superado por un maldito dardo, había entrenado durante años con distintos tipos de venenos y era inmune a una gran mayoría y sin embargo lo habían derribado con tres pinchazos.

Miró hacia los lados y suspiro, No tenía ni la más mínima idea de cómo iban a salir de ahí, estaba demasiado atolondrado como para hacer uso de su don y no había nada con lo que pudiese forzar la cerradura.

Escuchó un crujido y se tumbó, si por el momento no podía defenderse sería mejor que aún creyesen que estaba inconsciente.

-¿Tú sabes lo que está pasando?.

-No, el alfa dio una orden y la cumplimos.

-Pero es Chanyeol...

-Junmyeon...

-No pudo haber hecho nada tan malo, no es santo de mi devoción, todos lo saben, pero confío en él, es uno de los nuestros.

-¡Oh vamos tio!.-Rió.- El niño bonito nunca fue de los nuestros.

Se contuvo para no saltar ante lo que estaba escuchando, no podía creerlo, Shin estaba poniendo a su gente en contra de Chanyeol, los estaba engañando y ellos le creían fielmente.

-Yo creo que está pasando algo...

-Sí, que han dejado kao al único chico apetecible de por aquí.

Contuvo un gruñido, sino estuviese tan cansado sacaría las manos por los barrotes hasta coger por el cuello al maldito tigre, el hombre no pillaba las indirectas.