Código York . (Capitán américa )

Capitulo 3: el mensaje de Tex.

Cuando abrí los ojos, eran las diez y media de la noche, no hubiese reaccionado de no ser,  por el escandaloso sonido de mi teléfono que vibraba entre el bolsillo de mi abrigo. Me levante entumecida y me estire cuando tome el teléfono, éste había dejado de sonar.

Mire la pantalla y me encontré con un mensaje de Lucy.
Preocupada abrí el mensaje y lo leí, decía:

-Lucy: Verónica, tengo una mala noticia... Mañana no puedo asistir a la rueda de prensa en la torre Stark, no sabes cuanto lo siento, te debo una explicación y una disculpa. Suerte mañana.
Tex. 

Antes de que yo pudiera escribir una respuesta, Tex rápida como el rayo, envió otro mensaje hablando sobre la edición de la portada y demás que ella lo haría todo pero que no podía ir a la rueda de prensa. La verdad era que ¡a mi lo que menos me interesaba era la portada! No quería ir y mi única salida era Tex y justo falta.
No tenía otra opción tenia que ir a la torre Stark mañana temprano.

Después de eso tome mis cosas, me puse el pijama y me fui a la cama.

Ya había amanecido y hacía un día hermoso en la gran manzana, respire hondo y con la poca fuerza de voluntad que me quedaba me fui a darme un baño.
Al sumergirme en la tina llena de agua caliente suspire.

Mire el reloj y se  había hecho extremadamente tarde "Genial", pensé, mientras corría por toda la habitación  como loca buscando cosas como, mi teléfono, mi cámara y mi cuaderno de notas.

No comí nada, aunque el estómago me rugía de hambre.

Llegue al metro como pude, sin embargo, por más que tratara, mi cabello estaba hecho un verdadero desastre y la coleta alta qué antes llevaba, paso a ser un moño flojo que me recogía la mitad del cabello.

Lo desagradable fue  cuando vi a un chico de  ensueño, alto, castaño, ojos azul marino,  fortachón, me miro fijamente mientras a mi se me escurría la baba por él y le sonreí, justo es ese instante, el vagón dio una fuerte sacudida y tropecé, casi me caigo, lo que produjo la risa del chico, mientras yo me ponía nuevamente en  pie, cuando  me gire él ya no estaba y me vi reflejada en la ventana, ¡por dios,  estaba  hecha todo un espanto!
Finalmente la torre Stark, suspire hondo y lo único que hice fue caminar con  paso decidido a la entrada.

Entre y me encontré con una sala dispuesta para la conferencia, atestada de sillas vacías, mire a mi alrededor esperando ver a más personas, pero no vi a nadie.
Escuche un sonido cerca al pódium donde stark daría su conferencia y me gire sorprendida.
Nada.
El ruido se repitió solo que esta vez logre ver una sombra por el rabillo del ojo.

-¿Quien anda ahí? – pregunte nerviosa.

No escuche respuesta.

- Salga ahora o... -titubeé - llamare a la policía.

- ¡Woo! Calma linda.- dijo una voz completamente masculina y burlona.

Luego vi una figura salir detrás de una puerta corrediza de cristal.

- ¿Acaso usted es...? – Dije sin creérmelo- ¿Tony Stark?

- Exactamente, el mismo que canta y baila.

- Ya, permítame presentarme mi nombre es Verónica Mcgouth. -dije extendiéndole mi mano mientras él se acercaba para estrecharla.

- Un gusto señorita Mcgouth, aunque lamento decirle que ha llegado en un momento poco oportuno, para usted.

Sentí una punzada dolorosa recorrerme la espalda, recordé lo que dijo Jack " a Stark le gustan las fiestas y... las mujeres".

- No le entiendo.