Código York . (Capitán américa )

Capítulo 12: Malas noticias, Buenos ratos.

Hola a tod@s, espero que les este gustando la novela tratare de seguirla continuamente, pues pronto iniciaran una serie de acontecimientos muy importantes en la vida de la protagonista.Me gustaría saber que opinan de la novela. Muchas gracias por los votos  y por los comentarios, especialmente por leer.

Cuando llegue a casa sentía dolor de cabeza, no era normal que Lucy actuara de esa forma. Además venían ocurriendo cosas inusuales . Trate de tranquilizarme recordando lo que me había dicho mi hermana y allí recordé algo que me había dicho: ¡Había olvidado el cumpleaños de mi tía!

Tome el teléfono y telefoneé a mi hermana, la línea no timbro más de dos veces cuando contesto.

-¡Jess!- salude frenética.

- Hola Vero- note que hablaba con pesar.

- No te escuchas nada bien, si estas molestas por que no llame a la tía Bonnie en su cumpleaños, no te mentiré, lo olvide por  completo- me adelante al sermón.

Obtuve un “¿Qué?” Por respuesta. Claramente no sabía de lo que hablaba. Intente de nuevo.

-Olvide llamar a la tía Bonnie como me habías dicho.

- No es eso- dijo ella, evasiva.

- ¿Entonces?- silencio, escuche un suspiro cansado- ¿Qué sucede?- pregunte aún más asustada.

- Es papa- dijo finalmente.

- ¿qué sucede?- repetí atónita ¿Papa? Pero ¿Qué pudo haberle pasado?

- La última cosecha no fue nada favorable Veth, ha pasado por grandes pérdidas para la propiedad y papa está enfermo, en cama- dijo en voz baja como para que Cris no escuchara.

- ¿Es muy grave?- dije aferrándome más al teléfono.

- No, solo un malestar debido al estrés, en cuanto a las perdidas monetarias, escuche que hablaba de millones.

- No puede ser- no sentía alientos, estaba realmente impactada. En las cosechas no nos había ido tan mal desde la avioneta deportiva que había caído en los frutalesy en consecuencia dañando los cuando Jess y yo éramos niñas.

- No sé qué hacer Veth- la voz de mi hermana se escuchaba con auténtica angustia.

- Si quieres puedo viajar y ayudar en la propiedad.

- Eso sí que no- me corto con brusquedad- siendo sinceras, no sabes nada de trabajo de campo hermana.

Suspire, tenía razón, pero debía de haber una manera de ayudar.

-Hare turnos extras, reportajes dobles, lo que sea Jess pero en cuanto tenga el dinero se los enviare.

- Gracias linda- dijo con ternura mi hermana- en cuanto a mama y a papa, no les digas que te conté, no querían decirte nada para no angustiarte.

- De acuerdo. Te llamare más tarde.

- Adiós- ambas colgamos la llamada.

Me deje caer en un sillón, cansada, ahora si era oficial, el dolor de cabeza iba a matarme, cerré los ojos y me sobe las sienes. Inmediatamente me quede dormida.