Capítulo 14: Una mentira inocente.

1.3K 94 13
                                    

Monica's Pov.

Mamá me abraza muy fuerte, más de lo que pensé que haría, y me susurra en el oído que me porte bien y me cuide. Mi papá y hermano se despiden de mí y este último me pide que le traiga algún videojuego. Chris sonríe y se despide de mis padres prometiéndoles que me cuidará muy bien y me ayudará en todo lo que pueda. Abrazo una vez más a mis padres y al final suspiro y antes de que pueda voltear, veo a Chris tomar el asa de mi maleta y llevársela.

-Diviértete-me dice papá y me empuja. Le hago una mueca y él ríe, mamá baja rápido y le dice algo a Chris porque el castaño niega con la cabeza riendo.

-Vamos, Moni.-Chris viene hacia mí y me da la mano, la tomo y dándoles una última mirada a mi familia subo al carro totalmente insegura si hacer este viaje es o no una buena idea. -¿Es la primera vez que viajas sola?

-No, he viajado sola antes, pero jamás a Estados Unidos, y menos con un chico.-susurré lo último y Chris al parecer me escuchó porque sonrío ampliamente.

-Bueno, siempre hay una primera vez para todo. Además tengo unos planes con los cuales estoy segura te vas a divertir.-Me miró unos segundos y luego subió y bajó las cejas con picardía. Le golpeé el brazo y él se carcajeó.-No hablaba nada con segundas intenciones, pervertida. Solo que aparte del itinerario que estoy obligado a cumplir sí o sí. No sé, pensaba que te gustaría pasear por la playa o ir a algún lado en especial.

-Ah, bueno. No sé realmente, pero la idea de la playa suena bien.-Sonrió ampliamente mostrándome la hilera de dientes blancos.

-¡Te veré en traje de baño!-exclamó con demasiado entusiasmo.

-Estás loco de remate.

-Me lo dicen seguido que ya no sé si tomármelo como una burla o un halago.

-Una mitad de ambos-sentí un leve golpe en mi pierna.

(...)

Llevábamos más de media hora en el aeropuerto y yo estaba más que aburrida, me celular estaba a punto de morir y mi mejor amiga llevaba quince minutos de retraso. Los chicos descansaban y no quería molestarlos, ellos se veían demasiado cansados como para ayudarme a combatir el aburrimiento.

Suspiré y me estiré sobre las sillas del aeropuerto de Quito, moría de hambre. Cuando estiré mi pierna, sin querer golpeé a Joel, quien abrió los ojos enseguida y se quitó los audífonos.

-Lo siento mucho, Joel-exclamé avergonzada por despertarle. El mexicano me sonrió y luego bostezó, dio una mirada rápida hacia su alrededor y luego posó sus ojos marrones en mí.

-Tengo hambre, ¿Vamos a ver que compramos?-asentí y se puso de pie enseguida, se abrió paso entre el montón de maletas y lego me ayudó a cruzar. Entrelazó nuestros brazos y me tendió un audífono inalámbrico, me lo coloqué y la suave melodía inundó todo mi ser.

Miramos todos los escaparates de las tiendas buscando algo llamativo para comer, Real Friends de Camila Cabello empezó a sonar y escuché a Joel tararear la canción.

-Mira aquí venden burritos-señaló el restaurante de comida mexicana.- ¿Te parece bien? ¿O buscamos otra cosa?

-Está bien.-Me sonrió y entramos, al sentarnos en la mesa Joel llamó a la camarera quien después de saludarnos nos dio todo el menú tan rápido que estuve a punto de pedirle que me lo repita, pero Joel se adelantó y pidió burritos, con algún refresco, la chica asintió y se retiró enseguida.

-¿Emocionada por viajar con nosotros?-Dijo y aprovechó que al lado de la mesa donde nos sentamos, había un cargador, rápidamente conectó su celular y se quitó el auricular, hice lo mismo y se lo entregué.

-Sí, y nerviosa, muero de miedo.-Admití, Joel rio y asintió con la cabeza.

-Es normal, al menos los primeros días vas a sentirte perdida, es como si no encajaras en ese lugar-empezó a relatar suavemente-Hay personas que te harán sentir muy mal, otras te apoyarán, hay de todo en el mundo del espectáculo. Pero después de todo, te acostumbras, quizás será difícil al inicio pero con el tiempo empiezas a darle la importancia que se merece a esos haters –me sonrió.-You can do it.

-Eso espero, Joel. Solo que pasar de ser ignorada por todo el mundo a que ahora varias personas empiecen a criticarme me da miedo, sé que solo soy la novia de Chris, pero el hecho de que quizás no soy lo suficientemente buena para alguien como él me da terror.

-Oye no, no vuelvas a decir eso. Nadie es mejor o peor que nadie, ignora esos comentarios son emitidos por personas que no tienen nada que hacer, sé fuerte, y no dejes que esos malos comentarios cambien tu forma de ser. Si algo molesta más a las personas es que finjas ser alguien que no eres. Me caes bien cómo eres Mónica, no me gustaría verte cambiada solo porque quieres ser mejor para Chris.

-Pero...

-Aun no termino-me callé y el rizado siguió hablando, esta vez sin mirarme.-Sé cómo te sientes, me pasó igual, pensaba que quizás estar en Cnco era mucho para mí y alguien más se lo merecía. Pero luego entiendes que es tu esfuerzo, y tuve a muchas personas que me ayudaron con eso.-Me miró-Si alguna vez sientes que vas a cambiar porque estás abrumada por el mundo de la farándula, dímelo, y te prometo que te ayudaré a superarlo.

-¿Lo dices en serio?

-Sí, quisiera que llegáramos a ser buenos amigos, me hace falta una mejor amiga.-sonreí y asentí.

-Sus pedidos-comentó la muchacha y luego de dejar nuestros platos y refrescos se fue.

-Le escribí a Renato, él sabe que vinimos a comer, y nuestro vuelo se retrasó así que estaremos aquí por mucho tiempo.

-¡Ay no! Me aburro-dije y mordí mi comida, Joel se carcajeó.

-Bienvenida al club, aunque es peor cuando tu teléfono se apaga.

-Me pasó ya.-El rizado volvió a reírse. 

-Lo sé.

(...)

-No me trajeron nada para comer-se quejó Christopher mientras nos veía llegar, Joel lo ignoró y se acomodó en un asiento junto al que yo tomé y me extendió de nuevo el audífono, lo tomé y esta vez una canción de Ed Sheeran sonaba.

-Pero si estabas dormido como iba a saber yo que querías comer-comenté mientras conectaba mi celular al cargador, no me había dado cuenta que debajo del asiento habían interruptores hasta que regresamos y los vi.

-Bueno, tienes razón. Y para variar se supone que ya debíamos irnos, pero el vuelo se retrasó media hora más. Que injusto.

-Si sigues así pensaré que no te gusta estar en Ecuador.- él empezó a jugar con mis dedos.

-Claro que me gusta, solo no me gusta esperar, y menos en un aeropuerto con un vuelo que se retrasa.

-Dios mío que llorica.

-Cuando te pasa eso tantas veces terminas hartándote.-dijo y colocó mi mano sobre la suya, la diferencia era muy notable.- Mi mano es más grande.

-Eres más alto que yo, obviamente tu mano será más grande.

-¿Cuánto mides? Te me haces muy pequeña.-se mofó y le golpeé.-Yo un metro ochenta.

-Mido quince centímetros menos.

-Eres enana entonces.

-Tú tampoco eres muy alto.-me remedó y luego apretó mi mano con fuerza, chillé y empecé a retorcerme, aunque no dolía demasiado.

-Retráctate.

-¡Ay! Duele, duele. ¡Ay, maldito!-cuando me soltó se rio y yo solo pude esconder mis manos.

-Una pequeña mentira-murmuró, luego miró al techo del aeropuerto.

No pregunté qué quería decir con eso por lo que preferí seguir escuchando la música de Joel y esconder mis manos de Chris. Terminamos abordando el avión sin Fer porque los problemas con su familia debían ser muy serios como para que cancelara y pidiera disculpas a última hora.


23/06/2023

Novios Falsos NUEVA VERSIÓN. Finalizada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora