Novios Falsos NUEVA VERSIÓN. Finalizada.

Capítulo 32: Like I love you

Cómo te amo.

Joel pestañea repetidas veces para comprobar si lo que ve es correcto o es una alucinación por pasar varias horas frente al televisor jugando, escucha la risa de la chica y sabe que no es para nada un juego.

Y en cierta forma, le desagrada.

Mónica, ella luce... extraña.

No sabe si esa sería la palabra correcta para describirla pero tampoco quería usar otro término por lo que no dijo nada.

La chica lucía un nuevo corte de cabello, y oh, un nuevo color también. Unas mechas doradas, se veía bonita pero él se había acostumbrado a la chica castaña, y verla ahora, sonriéndole y a la espera de alguna reacción por parte del rizado le ponía...

Nervioso o ¿ansioso? No lo sabía pero estaba claro que al rizado le disgustaba el cambio radical de su amiga, su bonito cabello largo, había quedado reducido a más de la mitad, es más, el nuevo corte se asemejaba a una melena.

Estaba enojado, sin decirle nada, abrió la puerta de su habitación y salió dejando a una confundida Mónica y una apenada Fernanda, Joel pensó lo peor, quizá Renato le exigió a la chica que se haga ese cambio extremo o porque así estaba en el contrato, o tal vez Chris tuvo algo que ver, él tal vez le dijo algo que hizo que su amiga se cortara el cabello. Sea como sea, ellos no tenían ningún derecho a exigirle algo a la muchacha, ella ya hacía mucho y no era justo.

Abrió de golpe la puerta de la habitación del mánager y este lo miró confundido.

-¿Por qué le pediste eso?

-¿El qué, Joel?

-¡¿Por qué le pediste a Mónica que  cambiara su imagen?! - El mayor le miró sin entender, claramente estupefacto cuando procesó lo que Joel le dijo.

-¿Qué Mónica qué?

-¿No fuiste tú?- Joel sintió impotencia, ¿Chris era capaz de eso con tal de salvar su imagen? - Maldito idiota.

Renato intentó detenerlo, sin éxito obvio, por lo que se apresuró a correr tras el menor.

-¡Joel, espera! -incluso Mónica gritaba, Renato la vio pero no dijo nada, importándole más que sus artistas no se mataran.

Y quizá lo que hizo que Joel se enfade aun más, era que su amigo, estuviera hablando tranquilamente con Sasha, importándole poco la castaña y sus sentimientos.

-No le voy a pegar- Le dijo a Renato, el hombre le miró desconfiando. -Estoy enfadado pero no le pegaría, solo quier hablar con él.

-Joel, escúchame un momento, mi cambio, fue porque yo quise, nadie me obligó.

-Eso es lo que más me duele.-Murmuró y le miró a los ojos. -No cumpliste tu promesa.

-Joel, yo-

-Chris, tenemos que hablar.-Y sin más cerró la puerta en la nariz de su mánager, y a la que consideró, una amiga.

Christopher colgó la video llamada y vio el rostro tenso de Joel, este no le miraba a la cara, como si estuviera conteniéndose para no golpearlo.

Joel no era alguien violento, de hecho, él tenía un don mayor, las palabras, y hería con la verdad. Y Christopher estaba al tanto de eso, era su amigo después de todo, aunque al inicio no se llevaran.

-Ella está mal.

Lo encaró, el castaño bajó la mirada.

-La están lastimando.- El mayor no respondía, solo se limitaba a mirar hacia otro lado, sintiéndose culpable. -La estás rompiendo.