Novios Falsos NUEVA VERSIÓN. Finalizada.

Capítulo 20: No somos exclusivos

La extraña sensación le envolvía el cuerpo, los cálidos brazos del muchacho alrededor de su cintura y el dulce perfume que emanaba le hicieron perderse unos segundos antes de volver a la cruda realidad.

Él solo la abrazaba porque necesitaban pruebas que confirmarán su relación, además, las fans habían pedido una foto de los chicos y de Mónica junto a ellos. Intentó calmar su respiración cuando lo sintió cerca, pudo sentir su aliento en su cuello y las grandes manos apretar su cintura, un toque inocente pero si hablamos de intenciones...

Tragó duro cuando tuvieron que entrelazar las manos y sonreír a la cámara, la parte racional fue desplazada por los estúpidos sentimientos que se emocionaron al ser consientes de quien la tocaba. De su aroma y su cálido cuerpo contra el suyo. El lado más torpe de su ser tomó el control y se dejó llevar cuando las fanáticas empezaron a gritar:

《Beso, beso, beso》

Y aunque ella mismo le prohibió al muchacho besarla, ya era demasiado tarde para que reaccionara y en ese lapso sintió los suaves, cálidos y regordetes labios del chico contra los de ella. No se movieron, solo los presionó y se matuvo contra ella unos pocos segundos antes de apartarse y besarle en la frente. Eso bastó para que las fans suspiraran de amor por ese gesto tan delicado y dulce por parte de su ídolo.

Cuando dejaron la terraza, el castaño sintió la tensión volver al cuerpo de Mónica, ella se soltó de su agarre y caminó detrás de Renato, y perdiéndose en la habitación segundos después.

Las cosas no mejoraron al regresar, Zabdiel se excusó con que tenía que ver a una amiga y sin más se fue del departamento dejando atrás a un furioso y nervioso Christopher quien, no tenía ni idea de con lidiar con la situación.

Intentó hablar con la castaña apenas entraron, pero ella fue rápida en encerrarse en la habitación y ponerse los audífonos. Su mente aun reviviendo el fugaz beso y los vídeos en Instagram no ayudaban en nada. Mucho menos esa tipa que les había metido en todo este lío haciendo comentarios ofensivos en las cuentas fandom contando a viva voz que la relación era falsa y ella era la verdadera novia de Christopher Vélez.

No bastaron más de unas horas para que la cuenta en la red social fuera cerrada y las fans pudieran respirar tranquilas y disfrutar del romántico momento.

Un sube y baja de emociones, la debilidad ante la atención y el giro sorpresa que tomó su vida después de convertirse en una figura pública. Veía a cientos de chicas etiquetarla en las redes sociales imitando sus fotos, sus outfits y hasta su corte de cabello y maquillaje. Antes, jamás alguien la hubiera tomado como inspiración para vestirse o maquillarse.

Ahora cientos de adolescentes la admiraban por ser novia de su ídolo favorito y confiaban en que, si una chica como ella logró atrapar a un Cnco, ¿por qué ellas no podrían?

Simple: No tenían un contrato, ni mucho menos una mentira encima.
Y mucho menos, no poseían ese diablillo en su hombro izquierdo diciéndole que esta era una buena oportunidad y no debía despreciarla.

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No pensaba racionalmente cuando, aprovechando que Zabdiel avisó que llegaría muy tarde esa noche por lo que no le guarde comida. Mónica guiada por el resentimiento al sentirse usada. Se acercó al cuarto del castaño con nada más una camiseta algo larga que dejaba ver una parte de su hombro desnudo.

Cuando el chico abrió la puerta se quedó helado, examinó a la muchacha de pies a cabeza. Tembló al ver la blanquecina piel de su cuello y esos bellos ojos azules. Abrió la boca para decir algo pero todo murió cuando la chica puso un pie dentro de la habitación, el chico retrocedió por puro instinto. Se sentía como un adolescente a punto de tener su primera vez, inexperto, torpe y ansioso.

-Quería disculparme por mi actitud hoy- ronroneó la chica mientras se sentaba a horcajadas sobre el chico que tragó duro ante la cercanía.

-N-no, y-yo l-lo siento... -maldijo mentalmente por el tartamudeo, Mónica sonrió por eso. ¿Así que eso era tener a un chico en la palma de su mano, eh? Le gustaba la sensación.

-Fui impulsiva, y no supe contener mis celos- la mirada del castaño se desvío la su pecho, más cerca de su rostro. Luego volvió a la boca de la chica cuando su cerebro procesó la frase.

-¿C-celos?

-Ajá. Pensé que de esta relación podríamos terminar como en las películas ¿sabes? Pero esto es la vida real, esas cosas no pasan.

-P-podría pasar, esas cosas suceden. -se atrevió a colocar una mano en la cintura de la chica mirando sus lindas piernas.

-No, pues hay un problema.

-¿Cuál? - se acercó al rostro de Mónica dejando de la lado su timidez y recordando que él no era un jodido virgen y sabía muy bien cómo complacer a una chica. -¿Puedo? - susurró cerca del cuello pálido, miró los ojos de la chica esperando por permiso. Ella asintió y despacio posó sus labios húmedos en el frágil cuello.

Dejó un pequeño beso y la vio tragar saliva, nerviosa. Río contra su cuello y abrió la boca para dar paso a su ágil lengua. La oyó suspirar, la muchacha se aferró a sus hombros cuando él tomó una porción de piel y la succionó despacio, no queriendo dejar marca.

-¿Puedo poner mis manos aquí? -La chica se tensó cuando Christopher le mostró el área. Asintió despacio y fueron largos los segundos que tardó el muchacho en poner sus manos en el trasero de la chica y apretar levemente. Jadeó. Estaba yendo demasiado lejos y ese no era el plan. Estaba asustada, y quizá fue en ese momento en el que dejó de oír a ese diablillo que le decía que hacer y escuchó sus propios pensamientos.

Empujó al chico lejos cuando este tenía su lengua recorriendo su cuello y con torpeza salió de la habitación dejando a Christopher totalmente confundido y duro.

Christopher por obvias razones la buscó, cuando reaccionó del shock se levantó con esa incomodidad entre los pantalones y tocó la puerta. La muchacha se tensó cuando supo que era él. No quería llegar tan lejos, solo quería darle una pequeña lección pero las cosas se le fueron de la mano. Quizá las caricias se sentían bien o una parte en el fondo de su ser quería experimentar lo que tanto comentaban sus compañeras.

Y se sentía muy bien.

-Mónica-se oía desesperado. -Por favor. No puedes dejarme así... esto... duele un poco y si me ayudaras fuera genial. Si no quieres hacerlo con penetración, hay... hay otras formas... sólo... ayúdame.

-N-no, no puedo, lo siento, no quise...

-Por favor.

-Tu tienes novia. -Soltó y eso congeló al muchacho. -No estuvo bien esto, lo siento.

-Solo esta vez. Solo esta vez. Lo prometo.

-Tu novia...

-No es mi novia exactamente, no estamos en una relación en sí. No... somos exclusivos ¿sabes?

¿Verdad o mentira?

-La conocí en un bar, ella tenía novio y pasó. Así que nuestra relación es solo de sexo, la quiero sí, pero ella tiene a otro.

¿Manipulación? ¿Falacias? ¿Ceder?

-Por favor.

-No se como hacerlo.-susurró, el castaño agradeció el sepulcral silencio porque de lo contrario no la hubiera oído. -Y me da miedo.

-No necesito tenerte así ¿sabes? Con que me ayudes con tu boca o las manos basta si no quieres hacerlo de la forma común.

-Chris...

-Es fácil... es mucho más fácil. Por favor. Y... no duele. Creo.

¿Christopher Vélez rogando por ser atendido por qué no quería correrse solo usando su mano? Esto era nuevo.

Casi gimió de alivio cuando la llave de la puerta fue removida y la puerta entreabierta. Casi, porque enseguida besó a la muchacha con despero.

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23/06/2023