LUA [EN EDICIÓN]

CAPITULO 28

Don va en cabeza con Max a su derecha Logan a su izquierda, detrás van un séquito al menos veinte moteros más, todos serios, todos luciendo chaleco y parches, aparcan a un lado de la casa y vienen andando hasta la puerta, le esperamos Mist en cabeza, Róta a su derecha y yo a su izquierda ya que Gunnr se ha ido.

No parece sorprender a nadie mi posición o al menos lo disimulan bien, nos saludamos como corresponde y pasamos a dentro, vamos derechos al despacho y ahí nos encerramos los seis.

- Te veo bien Max – dice Róta mirando al SA de Don.

- No me quejo – dice asintiendo, veo como me mira y vuelve a asentir, imito su gesto y ya está todo dicho, se que es su manera de agradecer su rescate.

- Sentaros – dice Mist señalando los sofás, voy a por un par de botellas que hay en un rincón con unos cuantos vasos para beber whisky, sirvo a cada uno y me siento a un lado de Mist.

- Bueno, por donde empezamos? - pregunta Don.

- Cómo se ha quedado todo en Chicago?, algo a tener en cuenta.

- De momento las cosas están tranquilas, aunque no creo que tarden en empezar a moverse, saben que fuisteis vosotras las que vaciasteis las cuentas y os cargasteis al viejo, es cuestión de tiempo que asalten una de vuestras sedes en busca de respuestas – dice Logan.

- La que tienen más cerca es la de Iowa y ya están prevenidas, son prácticamente intocables, no me preocupan – dice Mist.

- Bien, aunque eso no los detendrá mucho tiempo – dice Don – entonces pasemos al segundo punto de la reunión, Grek – coge su vaso y se lo bebe de un trago – según lo que hemos oído está de vuelta por las Vegas, algunos rumores lo sitúan ahí.

Miro a Mist interrogante, porque ellas ya debían saberlo y han mandado a Gunnr en su búsqueda y me han dejado a mi aquí atada de pies y manos, veo como hace un ligero gesto con su mano como pidiendo que espere y no salte, así que respiro por la nariz dejando que se inflen mis fosas nasales y no digo ningún improperio por el momento.

- Algo habíamos escuchado, pero no está confirmado de momento, algunas putas de la zona lo sitúan en California y otras en plena Las Vegas, hemos mandado a Gunnr a encontrarlo si está allí, nos avisará en cuanto lo localice.

- Es nuestro Mist – dice Don.

- Era Don, era nuestra sangre la que derramó, ahora su sangre nos pertenece y ni tú ni nadie puede cambiar eso – veo como Don agarra su vaso con demasiada fuerza y comienza a resquebrajarse.

- Es nuestro – repite Don apretando los dientes – no olvides que la primera sangre que se derramo con todo esto fue la de mi hermano – dice alzando cada vez más la voz.

- Y una mierda para ti y para tú club, es nuestro y me da igual lo que pienses – veo que Don se va a poner de pie y lo hago yo poniéndome en medio de los dos presidentes sin saber a cual de los dos dirigirme primero.

- BASTA!!!!!, pero que coño os pasa?, la puta sangre que derramo ese hijo de puta era la mía, aquí la ÚNICA, oísteis bien, la ÚNICA que va a derramar su sangre soy yo, lo tenéis claro!! – veo que me miran los dos con ganas de saltarme al cuello, pero levanto un dedo y les mando esperar, primero uno y después el otro – yo pertenezco a las Valquirias! Mi padre era un Cobra, mi sangre es mezcla de los dos clubes así que soy la más indicada, si a eso le añadimos que fue a mi a la que disparó ya tenemos el boleto ganador.

Veo como me miran ambos pero ninguno dice nada, cojo la botella y me lleno otro vaso, me lo bebo y lo dejo de un golpe sobre la mesa.

- Os entiendo a los dos, pero entender que es mi vida con la que jugó, que es a mi padre al que consiguió que mataran y es a mi madre a la que obligó a huir, además de dispararme a mi, por lo tanto creo que soy yo la que tiene que derramar su sangre, si no estáis de acuerdo decirlo ahora.