Capítulo 25

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– JAJAJA, no puede ser ¿En serio?– exclamó Sujin entre risas por la anécdota de Eunwoo.

– ¡No miento!– rió también– Nadie pudo sacar la cigarra de la habitación. Tuve que hacerlo yo, ellos solo gritaban, corrían y recuerdo como Sanha corría con un peluche en su cabeza para "esconderse"– hizo las comillas con sus dedos.

– De solo imaginarlo es gracioso, jajajaja– trataba de calmarse, pero era imposible y su cara empezaba a ponerse rojita de tanto reír, eso combinado con la linda sonrisa que poseía se veía adorable.

Algo de lo que Eunwoo se percató, pero no mencionó nada hasta más tarde, cuando ya se encontraban el la puerta de la casa de la abuela de Sujin y antes de que ella abriera con la llave que tenía él interrumpió su acto con sus palabras.

– Te ves linda así– dijo un poco bajo, pero percibido por la castaña. Ella lo miró confundida sin saber a qué se refería–
Ha-hablo de... cu-cuándo ríes así–

>>Él...¿Acaso acaba de... tartamudear?<< ¡Sujin estaba en un colapso mental!. Definitivamente desde que conoció a Eunwoo este se comportaba muy serio, caminaba y hablaba de una forma tan segura que parecía imposible que alguien como él podría tartamudear al decir un cumplido. Y no solo era un cumplido...ese era específicamente para Sujin.

>>¡Alto!, ¡¿Como se supone debo contestar a eso?!<< Perfecto, Sujin la "reina del ligue" estaba metida en esto. >>Quizá...¿Debería hacerle uno también?, ¿Pero que le digo?<<.

Una sonrisa nerviosa he incómoda se forma en la boca de Sujin y está alejó las llaves de la herradura– Y tú eres tan...tan...–>>¿Guapo, atractivo, ¡Perfecto!?<< – Limpio...–

¡Alguien dele un golpe a esta chica!.

– ¿limpio?– Eunwoo rió ante ese cumplido a la vez confundido.

– Si, tú...– puso la palma de su mano en el hombro de él– siempre usas ropa...limpia y-y bien planchada– dió unas palmaditas en el mismo hombro. Ella solo sé quedó ahí esperando respuesta y nada– ¿Eso fue horrible cierto?– acepto al fin.
El rostro de Eunwoo se ponía rojo, era como si contuviera la respiración– ¿Que pasa?, ¿Que tienes?– expresó Sujin algo preocupada.

En eso él dejó escapar la carcajada más larga y sonora que haya escuchado de él – JAJAJAJAJAJA, lo siento, lo siento– decía pero no dejaba de reír.

– ¡Hey!, No te burles, lo intenté– ella trató de sonar molesta pero la risa de Eunwoo era tan contagiosa que era imposible no soltar una sonrisita– ¡Ya, déjame!– esta vez lo empujó ligeramente y eso hizo que se tranquilizara...solo un poco.

– Sujin– la llamó y esa sonrisa perfecta no se borraba de su rostro– no tienes que decirme un cumplido de vuelta, jaja. Solo...acepta el que te dí y ya.–

– En ese caso– movía sus dedos algo nerviosa– Gracias...–

– JAJAJA–

– ¿Que?, ¿Ahora que?– dijo Sujin.

– Es que por ahí hubieras empezado, jajaja– esta vez ambos comenzaban a reír. Todo bien, todo tranquilo, hasta que entre risa y risa Eunwoo daba algunos pasos hacia enfrente quedando más cerca de la castaña, y más cerca.

Ellos se tranquilizaban, pero las sonrisas no se borraban de los rostros de ninguno, hasta que quedaron a unos pocos centímetros. La castaña comenzaba a asimilar la situación y su corazón se aceleró a mil por hora, pero no sé alejaba ni lo detenía.

¿Por qué?. Simplemente...ella quería que pasará.

Él ladeó un poco su cabeza disminuyendo la distancia hasta el punto que casi sentían las respiración del otro...

– ¿Sujin?– ellos dieron un  brinco hacia atrás separándose, Sujin miró hacia otro lado y Eunwoo se aclaró la garganta. Pero cuando ella se dió cuenta de que esa no era la voz de su abuela, sino más bien de un hombre, giró su cabeza a la puerta.

– ¿J-jeong?– su mirada era de sorpresa e incomodidad a la vez. Detrás de él se encontraba la abuela jalando un poco de su brazo, como si no lo quisiera dejar salir.

– Así que está era la razón por la que no querías que saliera– él vió a la abuela algo molesto y después el brazo que ella no soltaba, enseguida ella lo dejó ir y él acomodó su sacó de hombre de negocios, pesé a que aún era muy joven solía ser algo amargado últimamente, cuando antes no lo era.

Sujin giró a ver a Eunwoo y este parecía que acababa de ver a un fantasma. Sus ojos estaban abiertos al máximo, su boca un poco abierta por la sorpresa y su pecho subía y bajaba dando a entender que su corazón se aceleró. – amm, oye, ¿Estas bien?– ella lo jaló de la manga de su ropa y este parpadeó varias veces para regresar en sí.

– ahhh– era como si no tuviera palabras– ¿él es...es de casualidad...

– Soy su hermano– completo con su grave voz y dió un pasó adelante– su hermano mayor– okay, ahora sí se notó como Eunwoo tragó con dificultad.

– Perdón, abuela. Aún tengo cosas pendientes en la oficina, así que te veré después– dijo Jeong.

– Claro, hijo. Gracias por hacerte el tiempo para venir a visitarme– ella le sonrió y él lo hizo también, pero con dificultad.

– Sujin– llamó a su hermana y está solo se mordió el labio impaciente– Cuídate– soltó un suspiro y antes de irse miró detenidamente a Eunwoo– Tú...me pareces familiar, ¿Nos hemos visto antes?– interrogó.

Él tardó en contestar, algo que le pareció raro tanto a Sujin como a la abuela Kim– No, lo siento. Es la primera vez que te veo– dijo.

Jeong suspiró– De acuerdo, si así lo dices– bajó los escalones de la entrada– Me retiro, que pasen buena noche– se dió la vuelta no sin antes darle una última mirada a woo.

Todo se quedó en silencio por un momento, pero claro la abuela no tardaría en romperlo.

– ¿En serio no pudieron pensar en un mejor lugar para eso?– dijo la abuela. El pelinegro y la castaña se miraron y ruborizarón en breve– ¡Agh!, Estos jóvenes de ahora. Como sea, ya que se fue el ahora amargado de tú hermano, yo me presento– Salió de la casa y se acercó a Eunwoo estirando la mano– Hola, soy la señora Kim, abuela de Sujin.

– Es un gusto conocerla, bella dama– tomó su mano y en lugar de estrecharla depositó un dulce beso sobre esta–

>>¡Vaya!, Él debió haber tenido muchas pretendientes. Aunque es claro que aún las tiene.<<

La mayor de edad rió– pero que joven tan atento, por favor, puedes decirme abuela también– él sonrió y asintió– y para que lo sepas por mi parte tienes cualquier tipo de aprobación con mi nieta– Eunwoo abrió un poco los ojos sorprendiendo lo rápido que tomaba confianza la abuela– Y cuándo digo cualquier tipo, de verdad me refiero a cualquier ti-

– ¡Abuela!– exclamó Sujin.

Esta señora... tenía que volverlo raro.

Sin embargo eso no era lo que ocupaba la mente del pelinegro, sino el hecho de que ahora sabía quién era la chica de la que él dijo tantas mentiras a su hermano. Fue Sujin.

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¿Quién es tan mala para coquetear como Sujin?!

🙋. Soy un asco para eso, pero en definitiva ella me supera. Xd

&gt;&lt; Paint &gt;&lt; Cha EunwooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora