La Bruja y el Demonio

Capítulo 4

Inquietud

No se había dado cuenta de que estaba corriendo hasta que el aire comenzó a faltarle, tropezó un poco antes de detenerse por completo. Miró a su alrededor, confundido y agitado, una extraña sensación le invadía el cuerpo, en su interior algo parecía haber despertado, haciendo que su corazón se acelerara.

Y todo había comenzado con esa chica.

Haberla salvado de aquel auto había sido una completa tontería, le dolían varias partes del cuerpo y ahora tenía un feo corte en el brazo que lo molestaba bastante. Estaba sangrando y la tela de la manga de su sudadera se encajaba en la piel herida, lastimándolo, y encima estaba esa molesta sensación que lo inquietaba bastante. En cuanto tocó a la chica algo dentro de él se agitó, como si una fuerza invisible lo hubiese sacudido. ¿Qué podía significar? No lo sabía, era la primera vez que le ocurría algo semejante, nunca antes el tacto con un humano lo había afectado de ese modo. Se dio cuenta de que estaba temblando, se sentó en una banca cercana.

Ni siquiera estaba seguro de por qué la había salvado, ni siquiera lo pensó, de un momento a otro se vio a sí mismo arrojándose sobre ella para apartarla del camino de aquel auto. Se arrepentía enormemente de haber entrado en aquella librería, pero ¿cómo iba a saber que ella estaría ahí? La forma en que lo miró, casi parecía haberse dado cuenta de que él... no, era imposible, nadie tenía forma de saber aquello, su secreto. No había manera alguna en que ella supiera que no era del todo una persona común y corriente, pero por el miedo que vio reflejado en su rostro, lo confirmaba. Ella sabía algo, ¿pero qué exactamente?

En cuanto la miró directo a los ojos se dio cuenta de que ella tampoco era una chica normal, por ello se había alejado asombrado. No estaba seguro de lo que había visto o percibido ni cómo lo había logrado pero estaba seguro de que pudo ver un leve rastro de lo que era su alma. Sí, él había logrado ver el alma de aquella chica. ¿Por qué? Él no podía ver las almas de los humanos, ya no. ¿Por qué la de esa chica sí? Intuía que debía de haber algo en ella, algo que incluso explicara la forma en que lo había visto ella también.

Una parte de él deseaba alejarse, olvidar por completo a aquella chica y no saber nada de ella nunca más, sin embargo también deseaba averiguar más. ¿Quién era? ¿Por qué parecía haber visto lo que él ocultaba? Y lo más sorpréndete ¿por qué había logrado ver su alma? En verdad quería saberlo, pero para hacerlo debía de volver a verla. Pero lo mejor sería que esperara un poco, se encontraba demasiado alterado en ese momento,  lo mejor era regresar a casa y tratar de calmarse. Después debía de volver a buscarla. Al menos ya sabía que trabajaba en aquella librería, no debía de resultar tan difícil volver a encontrarla.

Aún temblando un poco se puso de pie e hizo una mueca de dolor, eso de ser un salvador si que podía resultar algo doloroso.