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Al fin de unas semanas decidieron dar de alta a Marc, claro que bajo varios cuidados y recomendaciones.

Ya vamos rumbo a casa de sus tíos, junto a Santiago, quien maneja.

—Con todo esto, no me ha dado tiempo de preguntar qué hacían ustedes en Normandía. —indaga Santiago, observándonos por medio del retrovisor.

—Tú solo maneja —expresa burlón Marc.

—¿No me digas que olvidaste el propósito de tu viaje? Digo, no es para tanto, Tylor dijo que estabas en un muy buen estado, es más ni siquiera se logra explicar cómo es que no te quedaron otras secuelas.  —Marc solo me observa y sonríe —Bueno, supongo que es el amor —los tres reímos por el tono tan burlón de Santiago.

—Deja de hablar tanto y mira por dónde vas.

—Ya no te brindaré atenciones médicas.

—Aún no eres doctor, no seas fastidioso.

—Pero ya casi lo soy —dice con orgullo Santiago.

En unos minutos llegamos a casa, y al entrar está adornado con globos, y diferentes adornos que se usan en las celebraciones. Marca se queda pasmado y le da un apretón a mi mano, gira en una sonrisa hacia mí. Y todos los presentes, incluyendo mi tía Aurora, y el hecho de que esté presente sí es una sorpresa para mí, abrazan a Marc y le saludan.

En unos minutos ya estamos todos sentados disfrutando de una plática llena de risas y alegría.

—Debemos salir de aquí —me habla Marc en un susurro.

—Pero es tu fiesta, además no puedes andar así por así en las calles.

Hace caso omiso a mi solicitud y toma mi mano, guiándome hacia la parte trasera de la casa. Estando ahí, se pone justo enfrente y toma mi rostro con sus manos.

—No hay otro lugar en el que me sienta en calma, feliz, eufórico y de lo más ansioso — ensancha su sonrisa — que a tu lado Fiorella. Eres mis ganas de vivir. Sabes, ahora que estuve en esa condición, puedo afirmarte que no mienten en las películas, con el hecho de que aunque una persona esté inconsciente, puede escuchar la voz de los de su alrededor cuando hablan.
Y escuchar tu voz, era lo qur me daba más ganas de abrir los ojos para poder verte, y abrazarte para que no lloraste por mi culpa.

Mis lagrimas no pueden evitar salir y el pasa su mano por mejilla, retirando mis lágrimas.

—Marc, sé que fue mi culpa. Si yo no hubiese corrido de esa manera, si tan solo me hubiera detenido a escucharte.... Si tan solo... —mi voz se quiebra por el peso de la culpa e impotencia.

—Shhh —me acoge entre sus brazos —estoy aquí, y puedo verte, hablarte, sostenerte y volver a sentir tu olor —aspira el olor de mi cabello —Mm delicioso —río inconscientemente —Te quiero Fiorella. Te quiero como un jodido loco, uno que haría lo que fuera para protegerte de lo que sea, uno que quiere estar a tu lado y sostenerte.

—¡Fiorella! —escucho la voz de mi tía Aurora. Me limpio las lágrimas que aún reposaban en mis pómulos. —Oh, disculpen. Solo que quedé en hacerles una video llamada a tus padres e un par de minutos, y quiero que estés presente.

—Claro tía. —sonrío, pero es una sonrisa con mi pecho presionando de la emoción y alegría de tener a Marc a mi lado. Caray, cómo no enamorarme de él, cómo huir de algo de lo que estás completamente prisionera, cómo huir de algo de lo que no tengo ni la más pequeña intención de dejar.

Los tres entramos a la casa. —Marc, tienes que descansar —él asiente y le ayudo a llegar a mi cama, o bueno el cuarto que he estado ocupando —descansa, ya vuelvo. —le doy un beso en la frente y al apartarme él me toma de la mano. —ya vuelvo —sonrío. En parpadear me jala hacia él y quedo a centímetros de su rostro, y hace sobresaltar mi corazón.

—Ese no es un beso —no pierde más tiempo cuando sus labios están sobre los mios.
Extrañaba tanto la textura suave y dulce de sus labios, la forma en que se siente mi corazón, que late tan fuerte y rápido. Aprieta mis labios y los muerde suave y delicadamente y luego deposita un corto beso.
—Creo que eso me alcanza hasta que vuelvas. —sonrío bobalicona y totalmente enamorada de él.

....

Después de hablar con mis padres y hermanos, me siento aún mejor. Pues no habia querido tener mucha comunicación con ellos para evitar cualquier regaño o que quisieran que volviera inmediatamente, pero con migo tía a mi lado ellos están bien. Y más por mi padre, que quiere que pase el mayor tiempo con mi tía Aurora. Y para ser sincera, le he tomado bastante cariño, es una persona genial, desde cualquier punto de vista. Verla, conocerla me da ganas y motivación de ser una gran mujer como lo es ella.

Ahora que salió Marc, solo nos quedan un par de días en Normadía.  Hay sido una gran experiencia, a pesar de que no solo pasaron cosas buenas, ha sido uno de mis grandes sueños cumplidos al lado de una persona, que jamás esperé tener a mi lado, jamás pensé que me haría tan feliz el estar queriendo a alguien. Cada segundo a su lado es más valioso que cualquier cosa material, y si algún día él ya no quisiera estar conmigo, lo que aquí he vivido me alcanzará para seguir y seguir sonriendo por quien me ha mostrado ser cuando está a mi lado.

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Hola mi gente hermosa, no es un capítulo largo, pero me gustó mucho escribirlo.
  En el próximo capítulo tendremos el final...

Los aprecio mucho, gracias por dejarme entrar a su imaginación. Éste corazoncito de cactus se siente muy feliz.

¡Feliz Navidad un poco atrasadas, pero acá están!

Muchos besitos al aire.😚😚😚

Click Chic | COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora