Unbreakable (Caskett)

Deseos

Autora: es cortito... Pero creo que os gustará, o eso espero ;)

***

Beckett sentía arder todo en su interior y sus ganas habían encendido la parte baja de su vientre mientras el escritor seguía jugando con su lengua sin ceder el mínimo espacio entre sus cuerpos, ni despegar sus enormes manos de ambos lados de la cadera de la capitán. Cuando ambas bocas se dieron un respiro para tomar aire, ambos ojos conectaron en silencio, esperando saber qué paso quería dar la otra persona mientras sus respiraciones seguían agitadas. Castle no pudo evitar mover sus manos levemente por su cintura hasta terminar en el trasero de ella, y sin decir ni una palabra volvió a atacar su boca mientras apretaba los glúteos con deseo. Beckett cerró los ojos y gimió levemente en su boca al notar el agarre y como se iba despertando la entrepierna del escritor, tiró de su pelo con suavidad pidiéndole más, y este no dudó ni un segundo en tomarla en brazos para llevarla a la cama. 

Castle la dejó con suavidad sobre el colchón y se mordió el labio observando el abdomen y las finas piernas de ella, hasta que finalmente terminó en esos ojos verdes avellana pidiéndole a gritos que volviese a su lado. La mirada de Beckett estaba encendida de deseo, y la del escritor se había vuelto negra por la pasión.

- Eres preciosa... - susurró Castle desde el borde de la cama mirándola tímido, pero travieso y con deseo - y no puedo esperar más a verte desnuda, Kate - siguió diciendo mientras se tumbaba con cuidado sobre ella - pero no quiero hacer las cosas mal... ni rápido... Contigo... Contigo quiero hacer las cosas bien - acarició sus labios con los dedos y buscó respuestas en su mirada.

- Si me estás pidiendo permiso... - comenzó a decir ella con una media, tímida y preciosa sonrisa.

- Sí - la interrumpió Castle sonriendo mientras dejaba un rápido y tierno beso en sus labios - algo así... - sonrió avergonzado - tengo miedo... - rió nervioso - la verdad que tengo miedo - escondió la cabeza apoyando su frente sobre el pecho de ella. 

- ¿Miedo? - preguntó Beckett acariciando el pelo de él con suavidad, buscando que volviese a mirarla y no se escondiese - ¿miedo a qué? 

Castle suspiró perdido en su pecho y finalmente levantó su rostro hacia ella. No dijo nada, se mantuvo durante unos segundos en silencio, solo observándola con una sonrisa tierna, pero sin perder el fuego de sus ojos. Beckett le cedió el espacio que necesitaba para hablar, pero lo llenó con dulces caricias sobre su mejilla, lentas, tiernas, dándole todo el apoyo que siempre se habían dado desde el primer día que se habían conocido. Su relación era especial, ambos estaban rotos, se comprendían, se cuidaban... y sobretodo, se habían enamorado sin darse cuenta, olvidándose del pasado y de las heridas. Castle respondió a su caricias besando su mano con ternura mientras no despegaba sus ojos de los de ella, sonrió y cuando creyó tener el suficiente aire en sus pulmones, besó sus labios antes de comenzar a hablar. 

- De no saber hacerlo bien... - confesó Castle besando su hombro y su cuello con cariño.

- ¿Te estás refiriendo al sexo? - preguntó Beckett confusa con el entrecejo fruncido.

- No... - Castle rió levemente - y sí, la verdad... - tragó saliva y sus mejillas enrojecieron levemente - no he tenido... Bueno, ya sabes, desde que mi mujer falleció - y terminó riendo levemente ante la cómica situación en la que se había metido él solo, pero para su tranquilidad ella también le acompañó en las risas - no, ahora en serio... Me da miedo, Kate - ella se puso seria de nuevo para escucharle atentamente - no quiero correr y que te asustes, quiero... quiero estar contigo - acarició su mejilla con ternura - quiero... quiero ir paso a paso... quiero...

- Yo también quiero - le interrumpió ella dejando un rápido e inocente beso en sus labios - y estoy preparada para todo... Pero si necesitas más tiempo, te lo daré, Rick... No tengo prisa, quiero estar contigo y seguir disfrutando de esto que tenemos...

Castle suspiró mirando al cielo y tratando de controlar sus impulsos más animales con ella. Beckett le siguió con la mirada deseando que quisiese seguir adelante con lo que habían empezado hacía unos minutos en esa pared de la entrada de su habitación; necesitaba sentirle dentro de ella, quería estar con él en todos los sentidos, pero también le iba a esperar el tiempo que hiciese falta.

- Las ganas que tenía de besarte eran infinitas, Kate... - confesó Castle mirándola a los ojos - pero las que tengo de hacerte el amor las triplican - recorrió con su mano una de las piernas de la capitán hasta llegar a su cintura. 

- Pues házmelo - respondió Beckett cogiendo el trasero del escritor con ambas manos mientras sonreía mirándole a los ojos. 

- No - respondió Castle negando con una sonrisa - no puedo... No quiero estropear la cita - terminó diciendo seriamente. 

- ¿Qué? - preguntó ella elevando su cuerpo levemente apoyándose en sus antebrazos. 

- Primero te llevaré a cenar - dijo él mientras le tocaba la nariz en un gesto tierno - y después te haré el amor toda la noche... Te lo prometo - Beckett sonrió y Castle respondió a esa sonrisa con un suave pero húmedo beso. 

Beckett rió cuando Castle comenzó a hacerle cosquillas mientras le robaba algún que otro beso. Y ahí Beckett supo que estaba completamente enamorada de él, y Castle supo que también lo estaba de ella. Rodaron ambos por la cama, en una lucha sin tregua plagada de risas, cosquillas, besos y caricias. 

- Te quiero - le confesó Castle cuando el pecho de ella subía y bajaba preso del esfuerzo por escapar de sus cosquillas. 

- Te quiero - le respondió Beckett de vuelta atrapada entre su cuerpo y sus brazos.

Castle sonrió como un bobo. 

No había respondido un "yo también", había dicho "te quiero".

Beckett le devolvió la misma sonrisa de idiota enamorada.