Autora: os dejo con un nuevo capítulo. De momento, tengo escritos otros diez capítulos más, así que aún queda cuerda para rato... Y luego bien se verá si el público pide más temporadas o no ;)
Súper monólogo de Beckett y más personajes que vuelven a la acción... Creo que os encantará. Ojalá sea uno de vuestros favoritos.
Por cierto, en mi vida escribí algo tan largo, al principio lo iba a dividir en dos, pero bueno, es mi regalo por estar siempre ahí. ¡Más de 2500 palabras!!!!
***
Beckett se revolvió entre las sábanas blancas de su cama farfullando en bajo por no poder dormir más, pero la luz proveniente de la ventana de su habitación no se lo permitía, aún así trató de resistirse a abrir los ojos, y primero se movió hacia la derecha, dándole la espalda a la luz tenue del sol, pero no funcionó. Después probó hacia la izquierda, pero recibió el impacto sobre su rostro, y bufó enfadada, hasta que finalmente aceptó la derrota y abrió los ojos notando el frío en sus piernas destapadas y el vacío en la parte del colchón que anoche había estado ocupada por otra persona. Se extrañó y buscó a Castle con la mirada, tratando de ver si estaba en alguna parte de su cuarto, apenas podía mantener los ojos abiertos, y su cabello despeinado y rebelde le caía por los ojos, por lo que sopló con fuerza apartándolo de su rostro a la vez que se apoyaba sobre sus antebrazos: ahí no había nadie. Cerró los ojos agudizando su oído, pero tampoco escuchó nada al otro lado de la puerta, solo el silencio ensordecedor de una mañana normal en su apartamento. Se giró hacia el lado de la cama donde debería estar Castle y tocó con suavidad el colchón, estaba frío, realmente frío, y una extraña sensación le invadió el alma, eso significaba que hacía mucho que Castle se había ido de su apartamento. Beckett cerró los ojos y suspiró, quizás se había marchado porque no soportaba más verla, ni sus mentiras, ni sus secretos, ni sus heridas. ¿Quién diablos iba a querer estar con una mujer tan complicada como ella? Y entonces, los recuerdos de la noche de ayer se agolparon en la mente de la capitán haciéndola sentirse fatal. Volvió a dejarse caer de espaldas sobre el colchón, con esa losa sobre su pecho y cientos de preguntas hablándole a voces en su cabeza. Giró el rostro hacia el sol que se colaba por la ventana, buscando su calor, y fue entonces cuando vio la nota que reposaba sobre la almohada en la que ahora deberían estar los ojos azules del escritor mirándola cariñosamente. Por un momento Beckett se lo imaginó ahí, sonriéndole de esa manera que solo él sabía hacer, con esa sonrisa que la derretía a cada instante, y quiso quedarse con ese recuerdo antes de coger la nota entre sus manos y sentarse en la cama para leerla.
"Necesitas tiempo". Solo eso. Nada más. Ni un corazón, ni un te quiero, ni un beso, ni un te odio. La capitán hubiese preferido leer te odio, eso habría dolido mucho menos que esas dos palabras. Porque... ¿Qué significaban esas dos palabras? ¿Qué no iba a volver en un tiempo? ¿Qué ella necesitaba cambiar para que él estuviese a su lado? Beckett giró la nota entre sus manos temblorosas buscando que hubiese algo más, lo que fuese, pero no encontró ni una palabra más por ningún rincón de ambos lados de la hoja. Para ser un escritor, había sido realmente pulcro en palabras.
Beckett volvió a dejarse caer sobre la cama, esta vez boca abajo, con la frente perdida entre su almohada, hasta que comenzó a golpear con sus puños a ambos lados de ella mientras la mordía enfurecida. Otra vez su pasado había vuelto para arruinarle la vida... Estaba claro que nunca la iban a dejar ser feliz. Y le dolió todo lo que había construido con Richard Castle a lo largo de este tiempo, se había enamorado de él, había confiado en él, pero eso no era suficiente, ella siempre iba a ser una maldita infeliz. Giró sobre sí misma hasta quedarse mirando al techo, las lágrimas amenazaban con salir de sus ojos verdes avellana, pero esas no eran de tristeza, eran de rabia. Volvió a golpear el colchón con su puño, tanto que incluso se hizo daño, pero no le importó lo más mínimo, era lo que merecía. Lo que había hecho en el pasado todavía la atormentaba, y por mucho que todo el mundo le dijese que no era su culpa, por muchas terapias que hiciese para cambiar eso, ella jamás iba a dejar de sentirse culpable. Y en parte, por eso, entendía que la vida no la dejase ser feliz, quizás era su castigo eterno por lo que había hecho, aunque hubiese sido sin querer.

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Unbreakable (Caskett)
FanficHistoria ambientada en los personajes principales de la serie "Castle", pero con tintes distintos.