𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒

𝐓𝐇𝐈𝐑𝐓𝐘 𝐄𝐈𝐆𝐇𝐓

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Eunsan ; Un verre de vin rosé.
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Sanha caminaba por las calles de aquella bella ciudad. ¿Quién no quisiera viajar a París? Y lo mejor de todo era que gracias a sus padres estudiaría allí en una de las mejores universidades, todo un sueño, ¿no? Aquella mañana había decidido recorrer un poco el lugar, temía perderse pero tenía un mapa y lugares señalados en su teléfono, todo saldría de acuerdo a su plan sin dudas. La mañana transcurría normal, ya había desempacado el día anterior y por ello no tenía preocupaciones más que empezar la universidad en unos días. Aunque sí había una pequeña preocupación, no conocía el idioma para nada, sabía que debía comenzar a tomar clases, pero primero necesitaba conseguir un trabajo que pudiera darle lo suficiente para subsistir y pagarle a un profesor particular. Odiaba ir con otra gente, nunca lograba obtener la atención del profesor y eso lo frustraba demasiado.

Caminó por diversos lugares, sin embargo no lograba hallar el camino a la torre Eiffel, todos decían que era de lo más hermosa, sobre todo de noche cuando se iluminaba. Llegó un momento en que no sabía cómo volver a donde comenzó, ya que no hallaba nada de lo que deseaba ver, prefería volver a su hogar y en otro momento ir con algún guía. Caminó algo desorientado, su mapa voló a quién sabe dónde mientras él comía algo, y su teléfono murió a medio camino, al parecer conectarlo y dejarlo sobre la cama no era buena idea. La noche se acercaba poco a poco y él seguía deambulando por ahí, sintiéndose un total idiota por su primer día en la ciudad, lo había arruinado.

La lluvia azotaba con fuerza y el sol ya había bajado, de modo que se quedó bajo una tela de un restaurante. Un joven peli-negro salió del lugar con unos amigos, sin embargo Sanha estaba tan devastado y preocupado por su terrible comienzo que ni siquiera notó que este pasaba su mano frente a su rostro. Los otros dos jovenes se habían ido en dirección contraria y Sanha sólo pudo levantar su rostro, no entendía ni una palabra de lo que aquel joven le decía. Su voz sumada al idioma es lo más hermoso que oí; pensó, pero sólo podía observarlo con una expresión estúpida en su rostro.

— N-No... Yo... Coreano... Perdido... En el agua. — Trató de decir en inglés. Su inglés tampoco era el mejor y mucho no lo comprendía, pero algo es algo.

— ¿Qué? — Dijo el mayor, riendo. Por fin alguien que hablaba su idioma, de todos modos se notaba que no era francés por sus facciones.

— Lo siento, no hablo ni francés ni inglés, es mi primer día aquí y aún no me acomodo. — Sonrió apenado.

— No te preocupes. ¿Estás perdido? — Cuestionó el peli-negro, sosteniendo un paraguas en sus manos.

— Sí, mi mapa voló por ahí y mi teléfono murió. Tengo mi dirección, pero ni idea de cómo llegar... Sólo quería visitar la torre Eiffel al menos y pues... Terminé aquí... — Observó el lugar algo confundido. — Donde quiera que sea aquí.

— Ven, te llevaré a la torre Eiffel y luego me dices dónde vives. — Sonrió, extendiéndole una parte de su paraguas.

Sanha se colocó debajo. ¿Cuantos coreanos te encuentras en medio de París? Era mejor aprovechar la situación. El peli-negro lo llevó hasta la torre y él tomó fotografías, era realmente hermosa, tal y como lo imaginó.

— Soy Dongmin, pero me dicen Eunwoo. — Sonrió.

— Soy Sanha... Sólo Sanha. — Rió y el mayor hizo lo mismo.

— Oye, ¿te gustaría una copa de vino rosa? — Habló y luego observó al menor. — Yo invito.

— Está bien.

Sanha aceptó, pero lo que no sabía era que luego de esa copa seguirían unas más hasta descubrir que iban a la misma universidad y vivían en el mismo edificio. Terminó teniendo a Dongmin como profesor de francés y guía, luego comenzó a trabajar junto a él hasta que el mayor lo invitó a salir como algo más. ¿Y ahí terminó esta historia? Claro que no, ellos se volvieron una pareja. ¿El destino? Pues no, esas cosas no existen, pero sí las coincidencias y a estos dos, una charla y "un verre de vin rosé", los llevaron a lo que hoy en día son.

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Malísimo, lo sé, pero es que amé el vino rosa y debía usarlo en algo, ahre xd.

Mucho amor❤.