𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒

𝐎𝐍𝐄

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Eunsan ; I don't like Binwoo!
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Sanha observaba serio aquella escena, esa escena de su hyung favorito jugando con Bin. Se dejó caer sobre la mesa mientras que los demás caminaban por el lugar haciendo bromas y hablando por sus micrófonos. Myungjoon, quien había notado que algo no andaba bien con el castaño, decidió tomar partido en la situación. Tomó el micrófono de Jinwoo y bajó de la plataforma, parándose frente a las fans. Vió aquella escena, ya se imaginaba por que Sanha no estaba tan inperactivo y alocado como siempre solía actuar. Pero no se quedaría así, quería molestar al menor y hacer que de una vez Dongmin notara lo que sucedía.

— ¡Sanha-ssi! — Gritó, llamando la atención de todos menos del menor, quien seguía tirado sobre la mesa con un osito de felpa en sus brazos. — ¡Sanha! ¿Qué te sucede?

No hubo respuesta, este sólo miraba absorto sus zapatillas rojas con blanco mientras jugaba con su osito bajo la mesa. Dongmin y Bin se miraron entre sí, quizá ya habían notado todo o quizá aún seguían en su mundo de bobadas, por lo cual no entendían lo que sucedía a su alrededor. Myungjoon se acercó un poco más al menor y volvió a acercar el micrófono a sus labios.

— ¡Sanha-ssi! ¿Qué opinas del Binwoo? — Gritó, golpeando el suelo con su pie derecho.

— ¡No me gusta el Binwoo! — Gritó esta vez el castaño, ya irritado por la insistencia de su hyung.

Al notar lo que dijo, volteó a ver a los demás. Jinwoo y Minhyuk ahogaban pequeñas risas bajo sus manos, Bin rascaba su nuca con nervios y Dongmin sólo lo veía sin expresión alguna. Genial, gracias a Myungjoon estaba pasando una vergüenza terrible. Las fans gritaron, Sanha sólo quería salir corriendo, de modo que volvió a su posición anterior con sus mejillas rojas.

Al final del evento, tomó su abrigo y pidió ir junto a Jinwoo y Myungjoon, no quería toparse en ningún momento con Dongmin. El camino fue eterno, el mayor sólo hablaba con Bin mientras hacían bobadas. ¿Acaso no podía estar tranquilo un segundo? Se colocó sus audífonos y se quedó profundamente dormido.

— Sanha... Sannie... Beagle, despierta, te dolerá el cuello si sigues durmiendo aquí. — El castaño abrió sus ojos y vio a Dongmin, sosteniéndo sus audífonos.

(Rayos, otra vez esos dos me dejaron dormido aquí.)

— Hyung, ¿llegamos hace mucho? ¿Ya eligieron los cuartos? — Habló, tallándo sus ojos.

— Pues llegamos hace una hora y quedamos en que tú dormirás conmigo. ¿Estás de acuerdo? — Sonrió.

— Em~... Supongo que sí. — Se encogió de hombros y salió del auto seguido del mayor.

No habló con él en lo que restó de la tarde. De noche cenó junto a los demás, tomó una ducha, se cambió y se fue a dormir, no quería tener que hablar con el peli-negro. Se envolvió entre sus sábanas, las luces se apagaron y el mayor entró con cuidado, pero Sanha no estaba durmiendo aún. Cuando el menor sintió que Dongmin se había quedado dormido, se acercó para corroborar que su teoría fuera cierta y fue tomado por sorpresa del brazo, cayendo así junto al mayor.

— ¿Te gusta el Binwoo? — Preguntó riendo.

— No me gusta el Binwoo. — Dijo el menor, serio, y eso fue suficiente para que el peli-negro posara sus labios sobre los de él. Obvio, con los otros cuatro espiándolos y dándose golpes entre sí para ver mejor.