Atormentado Amor

24|La dama de rojo

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Paige

Terminé de revisar el documento en PDF que me fue enviado mediante correo electrónico con el propósito de obtener información referente a Nathan Castillo ya que, el muchacho afirma conocerme desde mi etapa de universitaria, lo cual provocó una duda en mí; jamás convivimos en esos cinco años que estuve estudiando.

Por esa misma razón, dedique una búsqueda en la estación de policía en Alaska solicitando al Capitán encargado de dicha unidad, además se trataba de la persona que hizo todo el trámite de mi traslado para investigar los sucesos. Los resultados que obtuve fueron francamente sorprendentes y el misterio sobre la desaparición de mi hermano posiblemente pueda resolverse con el trabajo en cubiero de John y con la información que tenía frente a mis ojos.

Decido darme un merecido descanso posteriormente del labor desempeñado en estas semanas casi no pasaba tiempo en casa a lado de mi querido novio, quien me esperaba con un cena romántica o trataba de mantener mi interés en la relación que llevábamos, sin embargo, he deteriorado todo por concentrar mi atención en hallar a Piers.

¿Cuándo termine usando mi tiempo para trabajar de esta forma? Merecía un verdadero descanso a mi corta edad a pesar de contar con el apoyo de Chris todavía no puedo revelarle información sobre mis avances temía que fuera a cometer una locura como acostumbra hacerlo debido a los impulsos de idiotez.

Quisiera que toda esta pesadilla terminará pronto y así tendría una vida normal olvidando el bioterrorismo, aunque sería difícil empezar de nuevo ya que, termina marcando tu vida para siempre por las experiencias que has vivido.

Apagó la computadora y escuchó el sonido de mi móvil debía ser Jason cuestionando el hecho que no he llegado a casa dormir dado que, el reloj marcaban las dos de la madrugada. Siendo prepotente revisó el bolsillo izquierda de mi chaqueta a fin de verificar la persona que me ha contactado a estas horas.

De número privado a Paige

Te veo a las 4.00 a.m. en el parque cercano al hospital memories y ven sola

Me recargue en el respaldo de la silla y solté una bocanada de aire.

Lo único que faltaba a mi desvelada recibir una llamada de la persona que me ha contactado desde la muerte de mi hermano y me ha brindado las pistas necesarios, así formularía un caso con base sólida y podré defenderme mediante las leyes norteamericanas.

Salí de la oficina previamente cogí mis pertenencias, mientras camino por los pasillos solitarios recordando las historias de terror contadas por mis colegas, en ocasiones me daba gracia escucharlas porque suelen ser un poco estupidas.

Subo al elevador que me llevará directamente a un estacionamiento subterráneo únicamente pensaba justamente ahora en el dolor de pies que provocan mis zapatillas de tacón.

Continué maldición en mi interior y decidí quitarlas para una mejor comodidad, me recargue en la pared del elevador puedo sentir un alivio. De pronto, escuchó el sonido de la campanita cuando las puertas del elevador se abren aproveche en abrir los ojos.

Quedé en shock.

—Sugiero que no intentes algo estúpido y en caso de hacerlo no dudaré en jalar el gatillo —mencionó un hombre con capucha

Tragó saliva.

Acate pasivamente la orden de aquel hombre misterioso ya tenía suficiente con que mi vida estuviera en riesgo por las diferentes investigaciones hechas, además ¿Qué puede pasarme? Seguramente le pedirán un rescate a Chris a cambio de documentación o efectivo.