Voy de camino a casa a un lado de Con.
- Traigo la motocicleta del lugar donde trabajo, si gustas podemos...
- No gracias, prefiero caminar pero enserio me agrado verte hoy, en nuestro primer encuentro normal y no tan lejano a lo natural. - veo su cara confusa. - yo sola me entiendo.
- Ok. Si quieres te acompaño caminando, no es problema.
- No soy capas de pedirte eso.
- Yo te lo estoy pidiendo. - me ofrece su mano. Le miro...- Confía en mi vale.
- Vale... - tomo su mano.
- Y quién era aquel chico?
- Cuál chico?
- El que se fue con aquella rubia alta.
- Lo viste?
- No, mejor dicho, te vi mientras los mirabas a ambos con... odio.
- Para nada esos dos me valen un cuerno.
- Vista la cara que pones cuando hablas de ellos pareciera que el tema te importa más de lo que quieres que importe.
- Pfffff... para nada, ese chico es mi...
- Tu novio?
- Noooo! Eso jamas, es mi hermanastro... aunque siendote sincera... ni mi hermanastro llegara a ser, de eso me pienso encargar.
-Es él la razón por la que me besaste aquella noche?
- No! - grite tan fuerte que debieron oírme hasta Francia. - Jack es un creído que solo piensa en sí mismo.
- Pero lo quieres?
- De que van esas preguntas?
- Simple curiosidad.
- Bueno, yo no lo quiero, le detesto aunque vaya a ser de mi familia.
- Me parece que hablas muy mal de él, pareciera que te gusta.
- No vuelvas a repetir esa maldición jamas de los jamases o me dará un panic atac a media calle!
Ambos reimos. - Vale, te creo. - saca un objeto de su sudadera. - toma, lo encontré tirado aquel día del beso. Pensaba dártelo peto hasta ahora todos nuestros encuentros habían sido inesperados. - es mi anillo.
- Ah... Con, muchísimas gracias, no se que habría hecho sin él. Me lo obsequió mi padre antes de marcharce. - Con coloca su mano sobre mis hombros.
- Quieres hablar de ello?
- Prefiero que no! el tema me pone mal... mejor hablame de ti... ¿qué edad tienes? te calculo unos 19... quiza 18... o 20? - le causo risa.
- Acertaste, tengo 19.
- Eh, venga, me ganas por un año, no te creas tanto de favor, eso sí, tendrás que enseñarme a manejar pronto, de esa no te salvas principe! - lo dije en voz alta? Ops mi bocota...- perdona, no quise decir lo ultimo... soy una tonta.
- Para nada, me encantaría ser tu príncipe, mi princesa Jimena. - se pierde en sus pensamientos.
- Ocurre algo? - cuestione.
- Recordaba como me tumbaste en aquel césped con tal de atraparme, por así decirlo. - señala al patio de la casa.
- Que oso verdad! pero así soy yo, todo un problema andante... - nos acercamos a la entrada.
- No lo eres, a mi me agrada que te comportes distinta a todas las chicas que conosco.
- Y cómo se comportan las chicas que conoces?
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Amor Inevitable ❤
RomanceEl destino, como empezar a describirlo, es inimaginable, inpensable, desconcertante, mágico e idealista, nos cambia por completo, gira nuestras perspectivas a 360°, se interpone en nuestro camino, arrasa con todo a su paso, y sin darte cuenta... te...