Entre los colmillos de los Bartholy. Eneas. T3

Capítulo 48

Han pasado unos meses desde que Lorie es humana, y he de decir que ojalá lo hubiera hecho antes... Que tranquilidad en la mansión... Nicolae reparte su preocupación entre que Lorie no se dañe o se mate por hacer alguna locura, y en vigilar que me alimente y descanse lo suficiente ahora que estoy de 7 meses.

Todas las tardes se empeña en darme un masaje en los pies, los cuales me duelen a rabiar, mientras se dedica a hablarle a Helena. Peter ha dicho infinidad de veces al igual que yo que no es necesario que lo haga, pero dice que no es molestia, que le complace hacerlo. En fin... no seré yo quien se niegue... Estoy relajada cuando suena mi teléfono. Lo miro y Nicolae me mira indirectamente pero intrigado, ya que no suelo recibir llamadas.

_Ya pensé que te habías olvidado de mi... _digo fingiendo molestia.

_¿Cómo piensas que podría hacerlo?

_Siendo mala amiga, y teniendo a tu lado un sexy vampiro que no te deja salir de la habitación... _digo con provocación.

_Eres la peor...

_Lo sé... Por cierto, te invito a cenar, te recojo luego.

_¿Noche de chicas?

_Evidentemente...

_Gracias brujita... lo necesito...

Tras colgar Nicolae me mira riendo sin decir nada, es obvio que con su oído lo ha escuchado todo...

_Suerte que Lorie ya no puede escucharte hablar... Sino seguro te hubiera insistido en ir con vosotras...

_Es solo algunas de las ventajas... _digo picarona y empezamos a reírnos.

_La verdad es que llevas razón... no he sentido tanta tranquilidad nunca... Por cierto Ariadna, quería preguntarte algo.

_Dime _no me gusta nada lo serio que se ha puesto, seguro que viene una pregunta incómoda...

_Supongo que querrás tener a Helena en el lago al igual que a Eneas.

_Así es.

_Veras, me gustaría estar presente, después de todo... es mi hija también...

Me habla serio y mirándome a los ojos pero con un tono dulce, no quiere sonar autoritario como suele ser su costumbre. Yo frunzo el ceño y me quedo pensativa.

_Nicolae, si no te importa, me gustaría  hablarlo con Peter antes de decirte nada.

_Está bien

Tras la conversación, damos por finalizada la sesión de habla-masajes, y me dirijo a mi habitación para ducharme y ver qué me pongo. Voy por las escaleras y me encuentro de frente con Peter y Eneas.

_Hola mami, hola Helena _dice acariciando mi barriga ya muy abultada.

_Hola mi amor.

_Eneas, ve con el tío Drogo, voy a ayudar a mamá.

_No es necesario Peter.

_No voy a dejar a mi Diosa sola... Así que déjame ayudarte... Debes estar cansada...

Peter me coge en brazos sin esfuerzo alguno, me sonríe y me lleva a la habitación. Me pone sobre la cama con mucho cuidado, se tumba a mi lado, y empieza a acariciar mi barriga y a hablarle a Helena mientras deja besos por todas partes.

_Peter, voy a salir con Sarah, pero tranquilo, tendremos cuidado, y además, nadie se me va a acercar a ligar en este estado _digo riendo y anticipandome a su sermon de siempre.

_Está bien... _dice riendo. _Veo que soy muy predecible...

_Bueno... Digamos que te conozco demasiado bien... _digo juguetona mientras me acerco a su boca.

_Eres la mujer más hermosa que he visto nunca... Tanto por dentro como por fuera... Te quiero...

_Y yo a ti mi amor, ahora si me dejas, tengo que arreglarme.

_Tendre que ayudarte entonces... ¿Un baño? _me dice con una sonrisa sensual.

_Me has leído el pensamiento...

Peter prepara un baño, y no me deja entrar hasta que está listo. Una vez preparado, viene a buscarme y me coge en brazos para ir al baño. Cuando entro veo la bañera llena, con espuma y huele a azahar... Le beso el cuello y el azahar se mezcla con su perfume amaderado... Me encanta su olor a cedro... Me pone de pie junto al baño, y empieza a quitar mi ropa llenándome de besos. Luego lo desnudo yo a él con caricias y besos, y entra en el baño para tenderne la mano y ayudarme a entrar.

Una vez dentro nos sentamos, quedando él detrás mía y yo me apoyo en su pecho. El me rodea con sus brazos y apoya su cara en mi cabeza en un gesto protector. Estoy en la gloria ahora mismo. Yo cruzó mis brazos para acariciar los suyos y giro mi cabeza para depositar un beso en su brazo.

_¡Corre Peter! ¡Dame tu mano!

Llevo la mano a mi vientre, Helena se está moviendo y da algunas patadas.

_Es algo muy hermoso... Gracias por estos momentos mi amor.

_No hay de que, gracias por estar junto a mi.

_Nunca te dejaría...

_Por cierto, me ha dicho Nicolae que le gustaría estar en el nacimiento de Helena.

Noto como Peter se tensa, su aura ha cambiado ligeramente y se ha quedado mudo e inmóvil.

_De todas formas, él es el padre... Aunque las circunstancias no sean las ideales... Creo que también tiene derecho.

_Ari, si a ti te parece bien... Yo no me opondré.

_Está bien, aunque le pondré una condición.

_Lo que tu estimes oportuno me parecerá bien.

_Gracias mi amor _le digo besándolo y noto como empieza a relajarse nuevo. Tras un largo rato, terminamos nuestro baño y empiezo a arreglarme.

Peter se va con los niños y Drogo, mientras yo me arreglo. Una vez lista voy a buscar a Nicolae, que como siempre está en el salón.

_Hola, ¿molesto?

_Claro que no, pasa.

_Venía a decirte que he hablado con Peter, y nos parece bien que estés cuando nazca Helena. Sólo te pido una cosa, en el lago entraré sola con Peter y tu estarás en la orilla, quiero un poco de intimidad.

_Por supuesto, y muchísimas gracias, de verdad, no sabes lo feliz que me hace... _dice dándome un abrazo.

Escucho el claxon del coche de Sarah, señal para separarme de Nicolae y despedirme del resto.