Capítulo 22 - Eiden

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Dicho esto me marcho de allí, sigo en mi forma de ninfa, y voy corriendo por el bosque, aunque mas bien estoy levitando, y llego al lago. Entro en el agua, necesito limpiarme... lo siento en mi piel, dentro de mí, en mis labios... Sólo quiero quitarme su sensación de encima... no puedo... no puedo... que va a pensar Peter... cómo se lo voy a decir... ¿Por qué me tiene que pasar esto a mí? Como si no hubiera tenido bastante con que se aprovecharan de mi cuerpo Viktor... Nathaniel... que ahora lo hace una persona en la que confiaba ciegamente...

Doy un gran grito de dolor desgarrador, y mientras grito todo se congela a mi alrededor, pero no me importa... No siento el frío del agua, y así es como está mi corazón ahora mismo... No puedo más con el dolor que siento... mis lágrimas salen de mí con vida propia sin parar... me voy hundiendo poco a poco en el lago, cerrando mis ojos, hasta que llego al fondo... Me quedo ahí...en la nada... no sé qué hacer... me encantaría quedarme aquí para siempre... Entonces noto como unos brazos me cogen, abro los ojos y veo a Eiden.

_Me tenías preocupado princesa... no salías y he venido a buscarte. Tranquila, estoy contigo... _me dice mentalmente mientras me abraza y salimos a la superficie con mi ayuda, yo no necesito respirar, pero Eiden puede que si...

Nos quedamos dentro del lago, el me tiene sujeta en modo princesa, y yo dejo mi cabeza sobre su pecho, mientras mis lágrimas siguen saliendo de mí sin decir nada. Eiden tampoco dice nada, solo espera que yo me tranquilice y me desahogue... Siempre ha sido un gran amigo. Cuando ya estoy más tranquila empieza a hablarme.

_Oye hermosura... ¿podrías dejar de congelar el lago? No es que me esté muriendo de frío, pero sí que está fría... y eso que soy un vampiro...

Me dice con una sonrisa y yo sin hacer ningún gesto hago que el agua vuelva a su estado natural y se descongele.

_Muchas gracias... y ahora, ¿quieres decirme que te pasa? Te conozco muy bien y se que tu interior se refleja en el lago... ha devido de ser algo muy grave para que estés así. ¿Ha sido Peter?

En cuanto lo nombra me pongo a llorar como una desesperada... Joder Peter... cómo voy a decirle esto... Eiden me mira preocupado y le hago un gesto con la cabeza negando a su pregunta.

_Está bien... ¿quieres contármelo?

_No puedo Eiden... no puede saberlo nadie... no aun... y si Peter se entera... ¡Dios mío, que voy a hacer, que le voy a decir!

Empiezo a encontrarme muy alterada nuevamente.

_Ari, tranquila por favor... me estás empezando a asustar... no diré nada, te lo prometo, pero por favor, cuéntamelo...

_Eiden... no creo que seas capaz de cumplir tu promesa, te conozco muy  bien... y sé lo protector que eres y lo impulsivo también...

_Te lo prometo princesa, por favor... cuéntamelo... confía en mí...

Le cuento todo lo que me ha estado haciendo Nicolae, durante cuanto tiempo, como me manipulaba a mí y a todos, y según le voy contando mis lágrimas no dejan de caer y y su cara cada vez transmite más ira... Cuando acabo de contarle todo me abrazo fuerte contra él. 

_Ari... no haré ni diré nada porque te lo he prometido, entiendo que quieres ser tú quien se lo cuente... pero te juro que si fuera por mí ahora mismo le arrancaría la cabeza, y ten por seguro, que si en algún momento quieres que lo haga, solo tienes que pedírmelo y lo haré encantado. Oh mi diosa... no sufras más... estoy aquí para ti... _me dice estrechándome más fuerte contra él.

_No quiero volver Eiden... ahora mismo no puedo... necesito unos días para asimilarlo todo y pensar...

_Iremos a visitar a Erik, he estado en comunicación con él, desde que Nicolae me mandó vigilarlos los he seguido de cerca, y quiere reunirse conmigo para contarme algo, pero tiene que ser en persona. Si quieres puedes venir conmigo.

_Sí, me encantaría... pero debería de coger ropa... solo tengo esto, y estoy empapada...

_Está bien, iremos a la mansión, pero no me separaré de ti... gracias por contármelo...y por cierto, me alegro que le dieras una paliza... _me dice con una sonrisa y me besa en la frente. 

Salimos del agua y sigue conmigo en brazos. Voy a hacer el gesto de bajarme, pero no me deja.

_De eso nada mi diosa, te voy a llevar entre mis brazos, aquí estás segura y nadie te podrá hacer nada, así que tranquila y relájate. 

Llegamos a la mansión y miro con preocupación a Eiden, pero me dice que me relaje, que Peter no está. En cierto modo era lo que quería saber. Entramos así en la mansión, y nos dirigimos hacia mi habitación. Nicolae sale a buscarme pero yo no lo miro si quiera, y creo que no se atreve a hablarme en presencia de Eiden. 

_Te espero aquí princesa, date una ducha caliente, cámbiate y coge ropa, prometo que no me moveré de la puerta. 

Me suelto poco a poco de su abrazo y me meto en mi habitación. Cojo ropa y voy a darme una ducha caliente. Solo quiero frotar fuerte mi piel con jabón. 

NARRA EIDEN

Estoy entrando con Ari y me voy que aparece Nicoale, será desgraciado... Iba a acercarse pero le echo una mirada intimidatoria que le hace cambiar de idea. Ahora iré por él... Dejo a Ari en su puerta, y le digo que no me moveré de ahí... pero es evidente que lo haré. Cuando entra en su habitación y escucho su ducha, voy en un rápido movimiento en busca de Nicolae. 

Me pongo frente a él, no digo nada pero lo miro fijo a los ojos. Me acerco despacio y me pongo delante de él. Va a decir algo, pero le doy un puñetazo con todas mis fuerzas. No le hace todo el daño que quisiera, pero aun así sé que le ha hecho bastante daño. Intenta hablar de nuevo, y le vuelvo a dar otro puñetazo.

_No te mereces ni mirarla, así que no lo vuelvas a hacer o te sacaré los ojos _digo con voz fría y seria.

Entre los colmillos de los Bartholy. Eneas. T3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora